En cuanto llega el buen tiempo, las visitas a la playa y la piscina son más frecuentes y en la mochila no pueden faltar la toalla, las gafas de sol y el protector solar. Este último, se ha vuelto un imprescindible en cualquier escapada de fin de semana y ahora descubrirás por qué.
Poco a poco la sociedad es más consciente de la importancia de proteger la piel a los rayos del sol, pero, ¿sabemos utilizar los protectores solares correctamente, cómo aplicarlo…? Antes de lanzarse a la compra de un protector solar, descubre todo lo que debes saber sobre estas cremas indispensables.
El protector solar que más te conviene
1. ¿Es lo mismo los rayos UVA que los rayos UVB?
Es importante conocer la diferencia entre rayos UVA y rayos UVB. Los primeros, son capaces de penetrar en la piel, siendo los principales culpables del envejecimiento, así como de la aparición de manchas que se hacen más evidentes con el paso de los años. Por su parte, los rayos UVB pueden producir quemaduras sobre la piel y su daño se ve incrementado por la acción de los rayos UVA, siendo el cáncer de piel la peor de las consecuencias de una exposición al sol sin protección.
2. ¿Qué significa FPS?
Para prevenir la acción de estos rayos es imprescindible recurrir a cremas con FPS, es decir, Factor de Protección Solar. Cada protector cuenta con un factor determinado, donde FPS 15 protege de un aproximadamente 93% de los rayos solares, mientras que FPS 30 protege del 97% y FPS 50 protege de hasta un 99%.
No obstante, no solo es importante conocer el grado de protección, sino también el espectro al que proteja, es por esto que se recomienda el uso de protectores de amplio espectro, es decir, que proteja tanto de los rayos UVA como de los rayos UVB. Aunque el uso de este tipo de cremas es frecuente en verano, no podemos olvidar que el sol influye sobre nuestra piel todo el año, por lo que el protector no debe ser un imprescindible solo del verano.
3. ¿Son las cremas densas más eficaces?
Hasta el momento, las cremas solares contaban con una textura densa y poco transpirable, en otras palabras, incómoda. Sin embargo, los últimos avances han permitido protectores solares en emulsión, es decir, en texturas ligeras y cómodas para la piel, sobre todo en el rostro. Con la emulsión, la piel no solo está protegida del sol, sino también hidratada y recupera su aspecto saludable, evitando las arrugas y manchas de la piel.
Por otro lado, es interesante contar con protectores resistentes al agua y al sudor, pues con la humedad la crema puede perder su capacidad protectora, facilitando la penetración de los rayos solares en la piel.
4. Modo de aplicación
Sobre el modo de aplicación, este debe preceder al maquillaje y sobre todo re aplicar pasadas las dos horas, ya sea a través de protectores en polvo, bruma o incluso con emulsiones ligeras protectoras sobre el maquillaje, lo que además dará un aspecto más jugoso al rostro.
Además, la piel tiene memoria, por lo que no hay que olvidar cuidarla y protegerla los 365 días del año. Aunque el sol es fuente de vitamina D y son muchos los beneficios que nos aportan al organismo, es necesario tomarlo con precaución y sobre todo bien protegidos.
Carmen Díaz. Directora del centro Germaine Goya, centro Germaine de Capuccini en Madrid.
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