Ocho millones de españoles sufre alergia al polen. Según los últimos datos de la Sociedad Española de Alergología, uno de cada tres españoles es alérgico, de los cuales la mitad sufre alergia al polen. Los cambios de temperatura en las estaciones están provocando una sobrepolinización, a veces, repetida, lo que obliga a prolongar el tratamiento con fármacos. Para evitarlo, el uso de vacunas es una solución alternativa que disminuye en un 30% el gasto en fármacos.
Las gramíneas y parietarias son las plantas que más reacciones alérgicas provocan, lo que obliga a tratar los incómodos síntomas de alergia como rinitis, conjuntivitis o lagrimeo, con fármacos. En los últimos años, debido a las altas temperaturas en los meses de otoño e invierno se han desencadenado procesos de polinización tempranos y, en ocasiones, hasta repetidos.
El resultado ha sido una sobreexposición al polen durante más tiempo, lo que está obligando a prolongar el tratamiento con fármacos para el control de los síntomas, en ocasiones unidos a incómodos efectos secundarios como, por ejemplo, la somnolencia en el caso de los antihistamínicos.
Vacunas para tratar la alergia al polen
La eficacia de las vacunas para el tratamiento de la alergia al polen ha sido recientemente probada por un equipo de alergólogos de Hospitales Nisa -del que forma parte el Dr. Agustín Fernández- que ha llevado a cabo un estudio entre más de 1.300 pacientes para medir el nivel de eficacia y satisfacción de los pacientes tratados con inmunoterapia, es decir, con vacunas contra la alergia al polen.
El Dr. Agustín Fernández, alergólogo de Hospitales Nisa, asegura que «la alergia al polen puede alterar de forma negativa la rutina diaria de quien la padece; además, lleva asociado un alto coste socioeconómico. La inmunoterapia permite una reducción considerable de los gastos en torno al tratamiento de la alergia, tanto a nivel sociolaboral -productividad en el trabajo, calidad de vida, etc- como en el coste por atención médica y a la hora de acudir a la farmacia a comprar los fármacos necesarios».
Según la Sociedad Española de Alergología e Inmunoterapia Clínica (SEAIC), los datos más relevantes son los referidos al coste en asistencia médica y farmacológica: las vacunas disminuyen un 40% los gastos en servicios médicos y un 30% los destinados a fármacos de alivio sintomático. En este sentido, matiza el Dr. Fernández, «lo realmente interesante es que la vacuna es el único tratamiento capaz de modificar la evolución de la alergia. Por lo tanto, conviene analizar su conveniencia a la hora de diseñar el tratamiento integral que el paciente alérgico precisa».
Consejos para sobrevivir a la alergia al polen
Para minimizar los síntomas alérgicos que pueden provocar los picos de concentración de polen que se concentran en los meses de abril, mayo y junio, desde Hospitales Nisa se ofrecen los siguientes consejos
1. Evitar actividades al aire libre como ejercicio físico intenso.
2. Consultar los niveles de polen a través de aplicaciones móviles avaladas por la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (SEAIC) o en la web polenes.com
3. Cerrar las ventanas en casas; ventilar la vivienda a mediodía y por poco tiempo
4. Utilizar gafas de sol en el exterior y mascarilla que cubra nariz y boca en días de alta polinización.
5. Ducharse y cambiarse de ropa al llegar a casa
6. Usar filtro antipolen en el coche y purificadores de aire en casa
7. No cortar el césped ni podar en días de alta polinización
8. Cuando una persona está ya diagnosticada de alergia, debe permanecer alerta ante cualquier indicio de agravamiento de los síntomas y acudir al médico en caso de empeoramiento.
Marisol Nuevo Espín
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