Los niños necesitan revisiones periódicas dentales como prevención para detectar posibles caries o deformaciones. La Academia Americana de Odontología Pediátrica recomienda hacer la primera visita al odontólogo al cumplir el primer año de edad. Tras la primera revisión, los controles se deben realizar, si todo va bien, cada 6-12 meses, según recomiende el odontopediatra.
Los niños con dientes sanos mastican sin dificultad los alimentos y aprenden a hablar claramente, y además sonríen con seguridad.
En España, lo más habitual es que hasta los tres años sea el pediatra el que controle la erupción de la dentición temporal y si ve algún signo de alarma recomiende a los padres acudir al odontopediatra.
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La primera revisión dental de bebés y niños
El especialista empezará con un historial médico y dental del niño y le hará una revisión de dientes y encías, verá si existen caries del biberón, se evaluarán posibles problemas o alteraciones de crecimiento (forma de los maxilares).
Además es el momento de instruir a los padres en los hábitos de higiene para su bebé, el control en la ingestión de azúcares y la administración de flúor.
En las siguientes revisiones, el odontopediatra controlará la erupción dentaria, si han aparecido caries o algún problema del crecimiento (en este caso le remitirá con el ortodoncista). Recordará las técnicas de higiene y los hábitos dietéticos recomendables para tener una boca sana.
Consejos para la primera consulta dental del niño
A continuación, te damos algunos consejos para que la primera consulta dental de tu hijo sea un éxito:
– Elige a un odontólogo, preparado y acostumbrado a atender a niños. En una clínica con un ambiente adecuado y una sala de espera cómoda y preparada para niños (con juguetes…) tu hijo estará entretenido durante la espera y no asustado pensando en lo que va a pasar.
– Prepára al niño para la primera visita. Explícale lo que hace el dentista. Colócale frente al espejo y haz que mire sus dientes y su boca. Puedes jugar con él diciéndole que tú eres el dentista y él el paciente y viceversa. También puedes ponerle algún video de su dibujo animado favorito que visita al dentista: Caillou, Dora exploradora, Peppa Pig…
– Pasa con el niño a consulta. Nosotros en la consulta dejamos pasar a los padres en la primera visita hasta que el niño coge confianza para entrar él sólo en el gabinete. Así ambos, los papás y el niño empiezan sin miedos e informados de todo lo que se hace en la consulta. Aunque después los padres no deberían pasar al área del sillón odontológico, de esta manera el odontólogo podrá establecer una relación directa con el niño sin la mediación de los padres, lo que facilitará las respuestas del niño en la consulta dental.
– Coge cita temprano (si es posible por la mañana o a primera hora de la tarde), evitarás que tu hijo presencie escenas de pánico de algún otro niño, si es que llegaran a sucederse. Además, un niño descansado siempre reacciona de mejor manera.
– No amenaces a tu hijo diciéndole que si presenta un mal comportamiento lo llevarás al dentista, lo relacionaría con un castigo.
– No expreses frente a él tus propios temores… Si a mamá o a papá le da miedo ir al dentista ¿qué me espera a mí? pensará tu hijo.
Recuerda que la mejor manera de aprender es por imitación… Acude a tus visitas regulares feliz y confiado, puedes pedirle a tu hijo que te acompañe y así verá y ¡aprenderá con tu ejemplo!
Sara Hawkins Solís. Lda. Odontología UCM. Master en Ortodoncia UCM. Prof. Colaboradora Master de Ortodoncia UCM
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