La gastroenteritis es una enfermedad que, en la gran mayoría de los casos, se debe a una causa vírica y suele durar tan sólo unos días. Pero durante el proceso para controlar la gastroenteritis en niños y bebés es importante prevenir el contagio de los otros miembros de la casa y evitar que el niño o el bebé enfermo llegue a deshidratarse a causa de los vómitos o de la diarrea intensa.
Cómo prevenir el contagio de la gastroenteritis
El lavado de manos del niño y de su cuidador es la medida más barata y eficaz de prevenirla.
¿Cuándo nos tenemos que lavar las manos?:
– Antes de poner la mesa
– Antes de comer
– Antes de preparar o tocar algún alimento o utensilio de cocina
– Después de ir al baño, limpiar a los niños o manipular pañales
– Fundamental después de estornudar, toser y sonarse
– Después de estar con un enfermo o jugar con una mascota.
Se aconseja no compartir cubiertos de cocina, toallas, servilletas ni ningún elemento que haya estado en contacto con la boca del niño enfermo.
Artículo relacionado:
– Los gérmenes, los principales enemigos del bebé
Vómitos en niños y bebés, ¿qué hacer si no cesan los vómitos?
Cuando comienzan los vómitos, pueden presentarse las primeras dudas para los padres sobre qué ofrecer al niño y cuándo hacerlo:
– Justo después de expulsar el alimento del estómago, hay esperar un poco antes de ofrecer algo de bebida para dar tiempo al estómago a asentarse.
– Es recomendable ofrecer bebida que contenga minerales para recuperar los nutrientes perdidos (por ejemplo, suero).
– Durante la primera hora, debemos darle el líquido poco a poco, (una cucharadita de suero o bebida isotónica cada cinco minutos)
– Evitar que el niño beba gran cantidad ya que si el estómago está resentido, puede volver a vomitar.
En caso de los bebés:
– Con alimentación complementaria, debemos ofrecerles suero a menudo durante las primeras 24 horas o hasta que los vómitos se detengan y, si tiene hambre, darle de comer las veces que pida y la cantidad que desee. No es recomendable variar la alimentación. El niño puede seguir tomando los cereales, verduras, carne, pescado, lácteos (leche y yogur) y frutas habituales.
– En los bebés lactantes no hace falta variar su dieta. La madre debe seguir amamantándole con leche materna igualmente. Lo mismo para los bebés que toman biberón.
Cómo controlar la diarrea en los niños
La diarrea es uno de los síntomas que más rápido se presentan cuando se produce el contagio.
– Aunque los episodios de heces líquidas se repitan cada vez que el bebé o niño coma, hay que seguir ofreciéndoselo sin forzar, ya que el cuerpo siempre absorberá algún nutriente.
– Si la diarrea dura más de 2 ó 3 días, hay que acudir al médico para que realice una valoración del niño.
Pautas para controlar la deshidratación
Lo más importante en estos casos es controlar que el bebé o niño no se deshidrate y en caso de duda, acudir siempre al médico o urgencias pediátricas.
– Controla que la boca y la zona de la lengua esté húmeda y con abundante saliva.
– Controla que llore con lágrimas. La ausencia es síntoma de deshidratación.
– Controla la ausencia o no de fiebre.
– Controla que la fontanela no esté hundida.
Dra. Paloma Nacher. Servicio de Neonatología del Hospital La Milagrosa
Te puede interesar:
– Trucos para tratar los vómitos en niños
– 5 medidas para evitar el contagio por Covid-19 en escuelas infantiles
– Niños en la guardería: 10 procesos febriles al año
– Enfermedades infantiles: ¿está tan enfermo como para dejarle en casa?