¿Qué es el éxito? ¿Por qué hay quién tiene éxito y quién no? En este proceso nuestro entorno juega un papel fundamental, de hecho existe una transmisión generacional de lo que significa el éxito.
Además, también estamos condicionados por todos los comentarios que hemos escuchado durante la infancia sobre nuestro potencial y las experiencias de nuestros padres. Por tanto, ¿cuáles son los principales factores que determinan el éxito de una persona? Querer es poder, pero ¿puede ser peligroso perseguir en exceso en un sueño? ¿Aprender cuándo hay que pararse también es parte de tener éxito?
El éxito: unos sí y otros no
¿Por qué hay quién tiene éxito y quién no? «El éxito depende de lo que cada persona considera que es tener éxito en su vida; hay personas que consideran que tener éxito es tener una buena pareja, una buena familia, otras que creen que es tener un buen trabajo, una buena casa, poder tener ingresos para poder viajar y disfrutar de otros lujos o necesidades. En función de eso, hay personas que están conectadas más con su proyecto, que puede ser tener un buen trabajo, y lucharán por ello hasta alcanzarlo», explica la psicóloga Carolina Jiménez, de Mundopsicologos.com.
Ahora bien, se puede tener éxito en un ámbito de tu vida y luego ser muy pobre en otros, todo ello también depende no solo de las prioridades que se haya marcado cada cual en su proyecto vital, sino de las creencias que nos hayan inculcado nuestros padres y madres acerca de tener éxito.
En este sentido, «una persona que tiene éxito es la que se compromete al 100% con ese proyecto de éxito y tiene las herramientas externas (apoyos de familiares, amistades, solvencia económica), e internas (constancia, es capaz de buscar espacios de sosiego para seguir creando, perseverancia, tolerancia a la frustración, capacidad para reponerse ante los fracasos) para conseguirlo», añade.
5 secretos mentales para alcanzar el éxito
1. Identificar aquella cualidad que te hace único/a.
2. Buscar formación y entrenamiento para fortalecer esa cualidad que te hará conectar con tu éxito.
3. Plantearte cómo vas a llevarlo a cabo: planificar qué pasos tienes que dar para conseguirlo, qué recursos externos e internos necesitarás.
4. Llevar a cabo ese plan estratégico y analizar si no obtienes los resultados esperados, en qué parte del proceso necesitas ayuda o revisar lo que puedes mejorar.
5. Recompensarte por cada paso que te acerque a tu éxito y hacer comunidad con personas que se encuentren en un proyecto similar, para así compartir sinergias y buscar sostén para cuando el éxito no sea inmediato o haya que reponerse de algún fracaso que se pueda tener. El fracaso también forma parte del éxito y hay que aceptarlo como fuente de aprendizaje para seguir mejorando.
Factores que determinan el éxito de una persona
Carolina Jimenez explica que los principales factores que determinan el éxito de una persona se pueden dividir en dos categorías:
– Motivación intrínseca: son aquellos valores internos que son el motor que te orienta a esa tarea que resulta significativa a nivel personal/espiritual/familiar/social y está más relacionado con factores afectivos y emocionales (por ejemplo; quiero vivir la experiencia de desenvolverme en un país de habla diferente al mío y aprender idiomas, conocer otras culturas)
– Motivación extrínseca: cuando estás orientado/a al éxito en función de las recompensas que vas a obtener (beneficios económicos, poder acceder a aquellos bienes con los que siempre he soñado; casa, coche, viajes,…)
Entre los factores mentales, hay algunos que se pueden trabajar como por ejemplo:
– Autoestima. La confianza en que uno/a misma es poseedor de las habilidades necesarias para llevar a cabo esos proyectos de éxito.
– Trabajar con nuestro niño/a interior, ver aquellos miedos que pueden estar impidiendo que ese éxito sea posible, ya ahí habría que analizar conjuntamente con la persona qué mensajes rodearon su desarrollo experiencial acerca de estar en abundancia o en la carencia.
– Identificar aquellas creencias limitantes que nos bloquean a la hora de actuar y llevar a cabo aquellos pasos necesarios para obtener el éxito.
– Planificar y actuar. De ahí que haya que trabajar también en procesos de planificación, operatividad y acción.
Querer es poder
La voluntad es el querer que nos motiva a luchar para conseguir nuestro sueño. Sin embargo, Carolina Jiménez matiza que «puede ser peligroso creer excesivamente en un sueño, porque al añadirle demasiada presión a ese sueño, puede ser que un alto nivel de exigencia hacia nosotros/as mismos/as nos haga sentir incompetentes y con ello que abandonemos la tarea que nos llevaría al éxito».
Aprender cuándo hay que pararse también es parte de tener éxito. Lo mismo que buscar espacios de esparcimiento, recogimiento y de ocio para poder desconectar de la tarea y recargar energías para luego proseguir. «Si no se hace, ese éxito va a estar cargado de mucha tensión que puede llegar a hacernos sentir mal porque no lo disfrutamos cuando lo estamos consiguiendo y creemos que no somos merecedores de ello, y por eso la exigencia puede jugar una mala pasada», explica esta psicóloga.
La influencia de nuestro entorno hacia el éxito determina mucho nuestro recorrido. Todos aquellos comentarios que hemos escuchado desde pequeños/as acerca de nuestro potencial, de lo que se espera de nosotros/as como adultos/as así como las experiencias de nuestros padres van a marcar que creemos alianzas de lealtad con esas creencias o rompamos esas cadenas.
Marina Berrio
Asesoramiento: Carolina Jiménez, psicóloga de Mundopsicologos.com
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