En apariencia, un coach y un psicólogo se dedican a lo mismo: a través de una serie de preguntas pueden ayudar a sus clientes o pacientes a enfocarse hacia sus objetivos y sentirse mejor. Sin embargo, son los coaches, los que están alcanzando una popularidad sorprendente en la última década. Algunos psicólogos incluso se acaban formando en coaching para impulsar sus consultas. Entonces, ¿en qué se diferencian? ¿Cómo saber a quién necesitas?
¿Cómo saber si necesito un coach o un psicólogo?
Sólo las personas que se encuentran con problemas emocionales notables se plantean ir al psicólogo, mientras que cualquier persona que busque orientar mejor su vida buscará un coach.
La figura del coach
El profesional del coaching se define como un experto en habilidades comunicativas que es capaz de motivar a su cliente para que descubra sus objetivos en la vida. La metodología del Coaching consiste en aplicar bases teóricas de la psicología para adaptarlas a las necesidades del cliente.
La desvinculación del Coaching respecto de la Psicología, desde el origen de estudio y formación, ha permitido que personas sin formación universitaria, pero con curos privados de formación, traten problemas de conducta.
La metodología del coach se basa en la conversación con el cliente y la aplicación del método socrático, pero no puede intervenir directamente porque no está facultado.
La psicología como especialidad
Un psicológo, además de su formación universitaria reglada, para ejercer debe formar parte de un colegio oficial profesional, que le acredita como aceptante de unas consignas éticas y deontológicas comunes para todos los profesionales del sector. Como profesional de la mente humana, también puede tratar problemas de conducta y de desarrollo de aptitudes, como el coach, y utilizar técnicas y métodos qpara que sus clientes puedan lograr sus objetivos personales y profesionales.
El psicólogo tiene una formación específica sobre las técnicas comunicativas y de entrevista, y gracias a su conocimiento de los procesos psicológicos, puede intérpretar la personalidad del cliente y su situación psicosocial y/o laboral. Por este motivio, puede aconsejar y dar pautas de actuación, e intervenir directamente sobre las necesidades del cliente.
Diferencias entre coaching y psicología
1. Pasado y presente. La psicología trabaja en la resolución de problemas desde el pasado, mientras que el coaching se centra en el presente para mejorar en el futuro. El número de sesiones es, por tanto, más corto con un coach y más largo con un psicólogo.
2. Pacientes y clientes. En el coaching no hay pacientes, por lo que se trabajan son los recursos potenciales que ya tiene la persona. Para la psicología, como ciencia aplicada, es necesario trabajar con pacientes dentro de lo que ellos entienden como salud mental porque la psicologìa trata patologías o enfermedades.
3. Problemas y personas. Mientras que la psicología se centra más en el problema, el coaching centra su atención en la persona y en cómo gestiona sus emociones.
4. Teoría y practica. En coaching no importa tanto la teoría como la práctica. Se motiva para desarrollar acciones concretas y personalizadas. En cambio, la psicología profundiza en el proceso de cambio porque interesa el porqué de las cosas. A los coaches, les interesa más el para qué.
Marisol Nuevo Espín
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