Llega el verano y la gran mayoría de los padres se plantean el mismo problema: ¿cómo conciliar las vacaciones laborales con las mucho más largas vacaciones escolares de los niños? No es fácil cubrir el cuidado de los niños cuando éstos tienen tres largos meses libres frente a las dos semanas o un mes (para los más afortunados) de sus progenitores.
Algunas familias recurren a la socorrida opción de tomar vacaciones cada progenitor en un periodo, de forma que los niños siempre están con uno de ellos, pero de esta forma no disfrutan de vacaciones en en familia. Los abuelos, por supuesto, siguen siendo una ayuda imprescindible para los afortunados que cuentan con ellos.
Sin embargo, en todos los casos se hacen cada vez más necesarios los campamentos de verano, ya sea los urbanos o los que se desarrollan fuera de casa durante un periodo que suele ser de una o dos semanas.
Analizando la oferta de campamentos de este verano, nos damos cuenta de que cada año las propuestas son más y más sofisticadas, más especializadas y más orientadas a un tipo de niño concreto, especialmente en el caso de los campamentos urbanos. Esto las convierte en alternativas ideales que, con la investigación previa adecuada por parte de los padres, lo convierten en una apuesta segura que los niños recordarán para siempre.
Campamentos especializados por temáticas para los niños
Campamentos en plena naturaleza
– Campamentos en la naturaleza: los más clásicos. Los que implican dormir de acampada o en albergue mantienen el programa de siempre que incluye deportes, juegos, veladas nocturas…
– Campamentos de deporte o aventura: son propuestas cuyo eje central son un deporte concreto, varios deportes o únicamente deportes de aventura como montar a caballo, bajada de un río en canoa, tirolina, etc.
– Campamentos de granjeros: tanto urbanos como para dormir fuera de casa, ofrecen alojamiento en la naturaleza en instalaciones especiales como granjas-escuela. Esta alternativa propone que los niños desarrollen tareas propias de los granjeros, desde ordeñar vacas, hasta esquilar ovejas, pasando por cuidar del huerto. Siempre, eso sí, combinándolo con un ocio típico veraniego como la piscina, que no puede faltar en cualquier oferta de verano.
– Campamentos de refuerzo al estudio: para alumnos de primaria y secundaria que quieren reforzar lo aprendido durante el curso. Puede desarrollarse como campamento urbano o campamento fuera de casa.
Campamentos urbanos
Entre los planes urbanos de campamentos para niños destacan:
– Campamentos de teatro: interesante acercamiento a este arte en el que los niños crean su propia obra teatral.
– Campamentos de cine: los niños profundizan en técnicas de actuación, creación de guión, grabación, edición, etc. ¡He incluso ven su obra en la gran pantalla!
– Campamento musical: dirigidos a niños que ya saben algo de música o que quieren aprender. Los niños se familiarizan con distintos estilos musicales, aprenden más sobre los instrumentos y, en definitva, se divierten con mucho ritmo.
– Campamento artístico: ideal para experimentar con distintos artes. Suelen contar con monitores profesionales de técnicas como la pintura, la escultura, la arquitectura, la música, el teatro, etc.
– Campamentos de programación y robótica: una alternativa que está creciendo exponencialmente en los últimos años porque se trata de una propuesta divertida y original y que cuenta con el absoluto apoyo y seguimiento de padres e hijos. Los niños se lo pasan fenomenal. A veces se desarrollan en un entorno natural, lo que los convierte en una alternativa completa.
– Campamentos científicos o matemáticos: ideales para mentes despiertas que se lo pasan en grande investigando y descubriendo cosas nuevas relacionadas con la ciencia o las matemáticas.
– Campamentos de emprendimiento: una propuesta original que busca que los niños potencien distintas áreas que se ponen en marcha cuando desarrollamos un proyecto de principio a fin, como el análisis del entorno, la planificación, el desarrollo de un cronograma, técnicas de marketing y comunicación para garantizar el éxito de nuestro proyecto, etc.
– Campamentos de historia: una alternativa con la que los niños aprenden más sobre distintas épocas y la forma de vida y costumbres de antaño.
– Campamentos lúdicos: se desarrollan en parques de ocio y las actividades combinan las manualidades con los juegos. Ideales para los más pequeños.
– Campamentos Montessori: para bebés, una alternativa ideal que asegura un aprendizaje basado en despertar su curiosidad y potenciarla.
– Campamentos deportivos: potencian la práctica de uno o varios deportes en los niños. Los hay especializados en fútbol, tenis, natación, etc o los que abordan un deporte cada día.
– Campamentos de inteligencia emocional y habilidades sociales: son talleres de juegos que ayudan a que los niños mejoren estas habilidades psicológicas, las incoproren a su día a día mejorando su autoestima.
– Campamentos en inglés: prácticamente todas las alternativas anteriormente mencionadas pueden desarrollarse al 100% en inglés o contar con algunas horas de inglés.
– Campamentos de integración: son los más fuertes en «educación en valores» y pueden desarrollarse en cualquier tipología de las anteriormente mencionadas. En este tipo de campamento todos los niños son bienvenidos, incluídos los niños con discapacidades físicas o mentales. El trabajo en grupo y la solidaridad, así como conocer de primera mano la forma en la que viven otros niños son los pilares básicos de estos campamentos.
Son sólo algunas de las alternativas con las que cuentan los niños para este verano. Y la oferta sigue creciendo año a año. Seguro que entre los que os hemos comentado alguno encaja a la perfección con vuestro pequeño.
Diana Martín
Más información sobre campamentos en el blog de Mamá tiene un Plan.
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