La ciudad de Bruselas ofrece atractivos muy interesantes para pasar un fin de semana de Navidad con los niños y en familia. Uno de ellos es el impresionante Atomium, un monumento con aspecto de nave espacial que parece sacado de una película de ficción. Justo al lado, podréis disfrutar con los pequeños de la casa del precioso Museo de Europa en miniatura.
En este museo, además de poder ver los monumentos más característicos de Europa, los niños podrán interactuar, pulsando botones que harán que suene música, se muevan trenecitos y naveguen barcos. En la entrada al museo hay una excelente zona con área infantil, llena de restaurantes, donde podréis comer tranquilamente mientras recuperáis fuerzas para la siguiente parada.
Visita con niños al corazón de Bruselas
Conviene tomar como punto de partida la preciosa Gran Place, donde además en Navidad, nos deleitará con un maravilloso espectáculo de luces y sonido que harán soñar tanto a niños como a mayores, pero si quieres que el sueño continúe, dando un paseo desde allí, encontraréis un espectacular Mercado Navideño donde los niños podrán disfrutar de:
– Una noria tan alta que parece que llegas a la luna
– Un desfile precioso
– Un tiovivo tan mágico, que no hace falta una varita para hacerte soñar
– Un tobogán tan grande, que hará que vivas una emoción enorme con tus hijos
– Una pista de patinaje, donde podrás bailar al ritmo de la Navidad.
– Montones de puestos navideños, todos diferentes, aportando ilusión a mayores y niños.
– Chocolate de todas las formas y colores; endulzarán el día y si es calentito mejor que mejor para estas fechas más fresquitas.
En busca de monumentos en Bruselas
Un juego típico del viaje a Bruselas consiste en buscar a los tres meones más famosos de la ciudad, el Manneken Pis, su hermana Jeanneke Pis, y su perrito, Ninneken Pis. Se trata de recorrer las preciosas calles de la ciudad en su busca, mientras vamos probando también su increíble gastronomía, y como no, su famoso y riquísimo chocolate.
Y para comer… en Bruselas
El famoso restaurante Leon ofrece su riquísima pasta al fruto di mare, y para los mayores sus famosos mejillones cocinados de todas las formas posibles. El restaurante además de tener comida deliciosa, es muy acogedor y tiene tronas para los más pequeños, así que además resulta ser muy cómodo para las familias con niños.
Otro lugar interesante para comer o cenar es el Restaurante del Comic, para disfrutar de un menú simpático, rodeado de dibujos animados como los Pitufos o Tintín.
Mónica Araujo. Directora de Viajando con mami
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