Este 2020 las rutinas de muchas familias han cambiado. Lo que era normal hasta no hace mucho, ha dejado de serlo y algo tan sencillo, como un viaje, ha sido suprimido de los planes familiares. La búsqueda de seguridad y la incertidumbre económica son dos de los principales escollos de muchos hogares a la hora de plantearse uno de estos traslados de ocio.
Sin embargo, con la vuelta de la normalidad, las familias se empiezan a retomar estas rutinas previas. De hecho, si bien durante el verano muchos hogares no se han planteado un viaje, de aquí a finales de año muchos de ellos se han planteado un traslado. Porcentaje que se incrementa si se observa la visión de cara al próximo 2021, así lo indican los datos del estudio Changing Traveller Report en su edición de este año tan extraño.
Vuelta a la normalidad
Tras unos meses de confinamiento, los hoteleros retoman la actividad (siguiendo con las restricciones necesarias para la seguridad sanitaria). De esta forma, en la mente de muchas familias aparece la idea de aprovechar lo que queda de verano, conociendo otras zonas. En la actualidad tres de cada cuatro viajeros se han visto afectados económicamente, pero eso no impide que el 67,5% de los encuestados tengan previsto viajar dentro del territorio nacional de aquí a finales de 2020.
La cantidad de hogares que viajarán se incrementa a nueve de cada diez si se pone como límite finales de 2021. Atendiendo al futuro próximo, el 48,24% señala que este traslado se producirá en los próximos tres meses, el 19,26% de los participantes se decanta finales de este año y el 22,95% esperará al 2021. Un 4,52% se muestra más cauto y afirma que esperará a que pase el próximo año, porcentaje similar a aquellos que esperarán a que termine la pandemia.
El 50% de estos viajes serán más cortos por culpa de la crisis del coronavirus y el alojamiento será distinto al que se hubiera pensado en otros momentos. La ocupación de las cadenas hoteleras y complejos turísticos se reducirán en un 8%, aunque serán el alojamiento preferido por los viajeros.
Búsqueda de seguridad
El factor que decidirá si se realiza el viaje, o no, será el nivel de seguridad. Las medidas de higiene que esperan encontrarse en los destinos es una de las mayores preocupaciones de los españoles que quieren viajar y se hospedarán en hoteles. Las reservas en estos establecimientos han aumentado ya en un 30% y los responsables de este trabajo esperan que crezcan mucho más en el futuro.
Un 82% de los encuestados todavía están en fase de pensar e imaginar sus próximas vacaciones, y todavía no han concretado, por lo que serán los que reserven a última hora. El 75% de estas peticiones se efectuarán con un mes de antelación, como máximo. De hecho el solo el 23,16% de los encuestados reservarán con mese de antelación frente al 51,05% que lo harán con semanas por delante.
Solo el 22,8% de los encuestados opina que reservarán con días de antelación y un 1,40% lo harán el mismo día de su llegada. Volviendo a los aspectos que decidirán un viaje, junto a las medidas de higiene, en segundo lugar aparece la oportunidad de cancelación gratuita (32,81%), visión que se relaciona con la posibilidad de una nueva ola que interrumpa las vacaciones.
Damián Montero
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