Muchos niños se han tomado como una gran alegría estas vacaciones improvisadas para evitar el contagio por coronavirus. Pero en la mayoría de los casos, la organización de estos días sin cole supone cierto problema para los padres que tienen que seguir trabajado o, en el mejor de los casos, teletrabajando.
En cualquier caso, es necesario cuadrar horarios de trabajo y niños, tiempo con los abuelos, actividades en casa, y como no también, salidas al aire libre porque no podemos tener a los niños tantos días encerrados en nuestro hogar a pesar del riesgo por coronavirus. Pero lo que más nos interesa a los adultos es que los más pequeños se diviertan con planes tan divertidos como educativos, es decir, que disfruten de un ocio con contenido.
Cuando nos planteamos las actividades que vamos a elegir para nuestros hijos es conveniente que disfruten de su tiempo de ocio y como nos indica Mar Sánchez Marchori, directora del Instituto Valenciano de Pedagogía Creativa, es importante planificar este periodo vacacional y buscar un equilibrio entre repasar lo aprendido porque el curso no ha terminado, realizar actividades creativas y estimulantes y descansar.
Hay que tener en cuenta que es conveniente que los niños sigan realizando actividades académicas para que no se desconecten e incluso que vayan adelantando contenidos, ya que algunos colegios los van a pasar a través de su plataforma on line, porque a la vuelta habrá que correr para dar el temario que marca el MInisterio de Educación en tiempo récord. Por tanto, lo ideal sería que tengan un plan que desarrolle y estimule sus funciones cognitivas.
Desde el Instituto Valenciano de Pedagogía Creativa, Mar Sánchez Marchori presenta una propuesta para organizar y planificar este periodo vacacional forzoso que ha llegado de imprevisto a mitad de curso y que los niños puedan disfrutar de estos días libres con su familia.
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Consejos prácticos para 15 días sin clase por el coronavirus
1. Realizar un planning diario
Analizar las rutinas que van a seguir nuestros hijos durante estos 15 días sin clase. Una vez tengamos más o menos claro la hora de levantarse, las comidas, ducha, etc., valoremos qué tiempo libre tendrán por la mañana y por la tarde y a qué lo pueden dedicar.
2. ¿Qué es imprescindible que hagan mis hijos?
El día es muy largo y, si lo organizamos bien, podemos realizar muchas propuestas diferentes. Decidiremos cuáles son aquellas que se deben hacer todos los días. La recomendación que realiza Sánchez Marchori es que diariamente los niños tengan tiempo para:
– Actividades académicas de adelanto y repaso
– Lectura como tiempo de ocio. En este sentido, y para distinguirlo de las tareas, es mejor que sea independiente al espacio de los deberes.
– Actividades físicas y deportivas
No todas tienen que tener la misma duración, ni tienen que ocupar gran parte del día y se pueden hacer en casa.
Actividades para niños sin clase por edades
Además, debemos tener en cuenta las edades de los niños, por lo que sugiere los siguientes tiempos:
- Niños de 6 a 8 años :
– 20 minutos de actividades de repaso
– 5 minutos de lectura (ocio, no curricular)
– 60 minutos de actividades deportivas
- Niños de 8 a 12 años:
– 45 minutos de actividades de repaso
– 30 minutos de lectura (ocio, no curricular)
– 60 – 90 minutos de actividades deportivas
5 juegos para llenar el tiempo en casa por el coronavirus
Nos referimos a aquellos juegos a los que dedicaremos más tiempo en estos días, ya que el resto del año no es posible; pueden tener una duración de entre 60-90 minutos, dependiendo de la edad de los niños.
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1. Caja de disfraces. Los disfraces nos dan mucho juego y permiten que los niños estén entretenidos un gran periodo de tiempo. Entre elegir el disfraz, vestirse y sentirse en el personaje añadiendo complementos que tengan en casa pasará al menos media hora. Luego viene la parte más divertida, crear una historia inventada que teatralizar.
2. Ocultar objetos en la habitación. Adivinar dónde está escondido un objeto interesante para ellos puede ser un juego muy divertido sobre todo si luego lo pueden usar para hacer algo con él.
3. Qué es lo que no está. Descubrir qué es lo que falta en una mesa llena de objetos es un interesante juego de memoria para los niños.
4. Juegos de mesa. De números, de palabras, de cartas… todos los juegos de mesa son fantásticos para pasar un rato divertido y educativo con los niños. Si además puedes enseñarles alguno más complejo como el ajedrez mucho mejor.
5. Origami. Es el arte japonés de hacer figuras con hojas de papel. Es una excelente manualidad de la que existen muchos videos en Internet para seguir paso a paso.
Marisol Nuevo Espín
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