Muchos especialistas en nutrición consideran a la obesidad como la gran epidemia entre las nuevas generaciones. En los últimos tiempos la proliferación de dispositivos electrónicos como opción de ocio y la expansión de la comida rápida han hecho que cada vez existan más casos de sobrepeso entre los niños. En este punto se hace evidente una concienciación para luchar contra este problema.
Sin embargo, tal y como reflejan los resultados del IV Observatorio sobre Hábitos Nutricionales y Estilos de Vida de las Familias, en España hace falta mucha concienciación sobre este problema. Muchos hogares todavía no comprenden la magnitud que tiene la obesidad en la actualidad.
No entienden el problema
Los datos que ofrece este observatorio muestran que en la mayoría de los casos, los padres creen que sus hijos tienen un peso correcto. El 82% de los progenitores creen que los niños de su hogar no son víctimas de la obesidad, aunque según los números que exponen los especialistas en realidad es el 62% de los menores en España quienes se salvan de este problema.
El hecho de no saber si un hijo tiene problemas de peso hace que la mayoría de los padres confiesen que su principal preocupación en el terreno de la nutrición sea si los menores comen menos de lo que deberían. Esto en ocasiones provoca una sobrealimentación en las nuevas generaciones. Una tendencia que comienza a observarse especialmente a partir de los 7 años.
Los expertos señalan que es a partir de esta edad cuando la tendencia a tener un peso mayor al recomendado empieza a manifestarse. Esto se debe a que es en torno a los 7 años, los niños empiezan a tener una mayor autonomía y el control de los padres empieza a reducirse. Los niños comienzan a comer lo que quieren y es aquí en donde los progenitores deberían tomar conciencia y apostar por una dieta equilibrada dentro del hogar.
La obesidad en los menores
Los datos de este estudio también recogen la situación de la obesidad en las nuevas generaciones. El 12% de los niños en España es obeso y el 18% tiene problemas de sobrepeso. Por ello, para evitar que estos números vayan a más y se reduzcan, hay que tomar consciencia del problema. Estos son algunos consejos para ello:
– Ser consciente de las raciones de comida que debe comer el niño y no excederse con ellas.
– Dieta equilibrada con gran presencia de hortalizas, verduras y legumbres.
– No poner a la vista del niño alimentos como dulces u otras comidas que pudieran alimentar su deseo.
– Promover la actividad física en casa, animar a los más pequeños a salir a la calle para hacer ejercicio.
– La bebida más consumida en casa deber ser el agua. Los refrescos y bebidas azucaradas deben quedar en segundo plano. Los zumos mejor recién exprimidos que comprados envasados.
– Restringir el tiempo en el que los niños pasan frente a las pantallas. Si quiere hablar con un amigo, mejor en persona que a través del móvil y si quiere jugar a la pelota, mejor en la calle que con un videojuego.
Damián Montero
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