La primavera ya está aquí y con el buen tiempo llegan ciertas prácticas habituales en los jóvenes que tienen ciertos riesgos, como los tatuajes de henna, famosos por ser temporales, es decir, desaparecen al cabo de pocos días. Antes de que llegue el verano, lo mejor es estar preparado para esta probable petición de un hijo adolescente, y saber a lo que se enfrenta.
Los tatuajes con henna son muy típicos durante el verano, y es raro pasear por un mercadillo instalado en la época estival y que no haya algún puesto ofreciéndolos. Su principal particularidad es que, mientras que los tatuajes normales se hacen con una inyección dentro de la piel, los de henna se aplican sobre ella. Además de la duración: un tatuaje es para toda la vida, mientras que el de henna dura sólo unos días.
Cuidado con la henna negra
Pero hay que tener cuidado: la henna no es negra. Por lo tanto, si ves que te la ofrecen de este color, mejor no arriesgarse. Tal y como explican desde la Asociación Española de Pediatría, en los últimos años se están introduciendo tatuajes de henna negra, que tienen un color más atractivo y se fija más rápido, pero para conseguir que sea negra añaden unos colorantes a la henna, y ahí radica el riesgo.
Uno de los colorantes típicos que se añaden a la henna para darle ese color negro es el p-fenilendiamina o PPD, que está prohibido para su uso sobre la piel porque puede causar graves reacciones alérgicas.
Los síntomas de la alergia por henna negra
Los síntomas causados por la henna negra no tienen por qué aparecer al momento; de hecho, pueden hacerlo hasta semanas después de su aplicación, pero todos son similares: en la zona donde se hizo el tatuaje aparece picor, enrojecimiento, manchas, ampollas o incluso pérdida del color de piel y cicatrices.
Otra consecuencia de la henna negra es la sensibilización de la piel: las personas que se la han puesto tienen una piel más sensible, por lo que es posible que tiempo después (incluso años) cualquier sustancia química (como los tintes de la ropa) le cause alergia.
Es importante acudir al médico en cuanto se detecten estas reacciones, pues en algunos casos se llega a precisar hospitalización, según advierten los pediatras.
Cómo reconocer la henna negra
Como hemos dicho, la henna no es negra, sino que es una pasta extraída de hojas y flores de un arbusto que tiene un color marrón verdoso. Por lo tanto, si observas que el color de la pasta es más oscuro, puedes sospechar que le han añadido algún tipo de colorantes. Además, el tatuaje resultante de la henna tiene un color rojizo o marrón, mientras que el de la henna negra es, como su nombre indica, negro.
Otra forma de saber si se trata de henna negra es preguntar por el tiempo de aplicación: la henna natural tiene que estar en contacto con la piel tanto tiempo como se pueda, mientras que la negra es más inmediata. Si preguntas si puedes retirarla de la piel tan sólo una hora después de su aplicación y te dicen que sí, es henna negra.
Finalmente, hay un tercer truco: la duración del tatuaje. Los de henna natural duran como mucho una semana, aunque lo normal varía entre los tres o cuatro días. Si te dicen que va a durar más de una semana, es henna negra, por lo que será mejor no hacerse el tatuaje si no quieres lamentarlo después.
Ángela R. Bonachera
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