La obesidad infantil se ha convertido en una de las grandes preocupaciones en la actualidad. El aumento del sedentarismo, unida a un descenso en la calidad de la alimentación, ha provocado que el sobrepeso esté presente en los niños. Ante esta situación son muchas las propuestas que surgen con el fin de garantizar una buena nutrición a los más pequeños de la casa.
Entre estas medidas está la que propone la nutricionista Luján Soler: comer en familia. Según esta experta, cuando todos los miembros de un hogar se sientan a la mesa se crea un entorno que favorece la buena nutrición. Y es que, para conseguir estos objetivos, todos deben poner su propio granito de arena ya que los padres no pueden olvidarse de su influencia en los más pequeños.
Comer en familia, ausencia de pantallas
¿Qué aporta una comida en familia a la nutrición? Según Luján Soler cuando estamos frente a las pantallas, por ejemplo, no hay conciencia de la cantidad que se ha consumido y de los alimentos que se han consumido. «Por eso, también la importancia que hablamos de comer reunidos, en familia, alejados de dispositivos electrónicos, conversando, comiendo tranquilos, masticando bien».
Además, Soler también señala al sedentarismo como culpable de la obesidad infantil: «la gente no se mueve. Entonces, entre las horas que están en el cole, luego si en casa están jugando a los juegos. También hay estudios donde muestran las horas que se pasan frente a* pueden ser móviles, maquinitas de juego, la tele… Y eso, evidentemente, resta a las horas que tienen que estar moviéndose. Cómo impacta cuando, por ejemplo, se come con los padres o no».
Por otro lado, Soler indica que este problema no debe infravalorarse: «Infravalorar al sobrepeso, obesidad en peques, adultos o en ancianos es muy preocupante. Nosotros, los dietistas-nutricionistas, insisto en que lo que queremos es que la población esté sana, saludable. Por eso, que esto del peso de: «peso tanto, la báscula dice tal». Nosotros, evidentemente, valoramos muchos otros factores, no solo lo que puede hacer lo de la báscula, sino que, en una historia clínica, en una anamnesis, profundizamos mucho para ver qué está pasando con esa persona.
Podemos encontrarnos niños, adolescentes, adultos, ancianos, embarazadas, en fin… que pueden estar con sobrepeso u obesidad, pero, luego, a nivel, como digo yo, por dentro, las tuberías, las cañerías, el organismo por dentro…»
Prevención en familia
Comer en familia no es la única medida que se puede llevar a cabo en el hogar con el fin de prevenir la obesidad infantil. Estas son otras que se proponen desde el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades:
– Ofrezca una variedad de verduras, frutas y productos integrales.
– Incluya leche y productos lácteos bajos en grasa o descremados.
– Elija carnes magras, aves, pescado, lentejas y frijoles para ingerir proteínas.
– Sirva porciones de tamaño razonable.
– Anime a su familia a beber mucha agua.
– Limite las bebidas endulzadas con azúcar.
– Limite el consumo de azúcar y grasas saturadas.
Damián Montero
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