Categorías:

Cómo puede defenderse un niño de un ‘abusón’

Tabla de contenidos

¿Qué hacer si tu hijo sufre de alguna manera, aunque no sea claramente de forma física? ¿Cómo enseñarle a defenderse y a defender a otros de los abusones, sin «pagarle con la misma moneda»? Toma nota de algunas ideas y consejos para frenar un abuso que con el paso del tiempo puede convertir a tu hijo en víctima en el terrible bullying (acoso escolar).

Sentirse intimidado, atormentado, arrinconado, son agresiones que sufren muchos niños. El 75% de ellos manifiesta haber sido tratados así. Este hostigamiento casi siempre depende de un desequilibrio de fuerza: física, emocional o social. Los chicos empujando, pegando; las chicas burlándose, propagando chismes, murmurando*

Expresar sin miedo sus sentimientos

Hasta hace poco, la burla era una forma de fortalecer al niño, de prepararle, de hacerle duro* pero todo tiene un límite y unas consecuencias y ésta no es la mejor forma, ni para él, ni para el abusón, que se volverá más agresivo. Los que han sido intimidados, sufren predisposición a la depresión, baja autoestima y esto ¡toda la vida!.

La mejor manera de evitar que los niños sean víctimas de cualquier clase de hostigamiento es enseñarles a expresar claramente sus sentimientos, a decir «no» cuando les están presionando y a saber aislar y alejarse del problema cuando la situación se plantea demasiado peligrosa o muy desigual… Los abusones no suelen meterse con niños que se muestran seguros de sí mismos, ni con los que «pasan» de sus burlas, porque de estos últimos acaban aburriéndose.

Los expertos dicen que el daño es mayor si el niño es pequeño pues no puede defenderse, incluso ni contarlo.

La conclusión es que el niño no puede resolverlo por sí mismo. La postura de los padres y del tutor del colegio, para ayudar a prevenir y a corregir, es fundamental.

Cómo detectar si mi hijo sufre por algún compañero

Puedes fijarte en los siguientes síntomas:

1. Se muestra retraído.

2. Nervioso.

3. Inseguro.

4. Falto de interés.

5. Triste. Apagado.

6. Malhumorado.

7. Llorica.

8. Se pega por todo con sus hermanos y a veces con mala idea.

9. Contesta mal.

10. Puede dormir mal. Despertar temprano.

11. Síntomas de ansiedad: digestivos, no poder respirar, dermatitis, tartamudeo*

¿A quienes molestan?

Los abusones hostigan a los que consideran más débiles. Si tu hijo es de alguna forma diferente, pelirrojo, flacucho, gordito, con gafas, muy alto o muy bajito para su edad, tiene un acento determinado, es demasiado tímido o juega con niños mayores para protegerse,  puede que tu hijo se convierta en una «diversión malsana» para otros.

Qué hace el abusón y qué espera del más débil

Lo que hace:               

– Zancadillas. Pelotazos        

– Poner motes («¡Cuatro ojos!»)  

– Quitarle lo que lleva.        

– Tirar del pelo.           

– Criticar por lo bajo.         

– No dejar jugar.                    

Lo que espera:

– Reírse de él

– Ridiculizar

– Hacerle llora

– Dejarla mal

– Dejarle sólo

– Reafirmar su «liderazgo» delante de su «séquito»

Cinco consejos para orientar al niño que sufre acoso

1. ¿Pueden tus hijos decir cualquier cosa en casa por mala que sea? Piensa si le estas dando seguridad, si le escuchas con atención todos sus problemas, si hay confianza, si te puede contar todo.

2. Pues devuélveselo tu, dale una patada o un puñetazo, cogerle entre unos cuantos y darle una paliza». Si le damos esta solución a nuestro hijo cuando nos cuenta que se meten con él, estamos dando una respuesta vengativa. Hay que escucharle y observar si el hostigamiento se repite con frecuencia, para actuar en consecuencia.

3. Pero hijo, hay que ser fuerte, no tiene más importancia, son cosas de niños». Tampoco podemos dar la sensación de despreocupación. Para nuestro hijo es algo serio. Le afecta y busca que nosotros le digamos qué tiene que hacer, como puede hacer frente a ese abusón o como aislar el problema. Enséñale a que afiance su personalidad y que exponga su opinión ante el abusón.

4. ¿Qué se meten contigo? Ahora mismo voy a coger al niño, voy a hablar con sus padres y se van a enterar». Esta actitud es demasiado proteccionista. Solo es útil si se ha hecho todo lo posible y el abusón sigue hostigando. Debemos fortalecer su autoestima, animándole y dándole soluciones para que las acometa él. Nuestros hijos buscan seguridad en nosotros, pero no es positivo que siempre le «saquemos las castañas del fuego».

5. Diferente es buscar aliados con otros padres en situaciones similares y decidir una estrategia común para que apliquen los niños.

Qué hacer para ayudar a mi hijo si es víctima de un abusón

Si la cosa se complica y ves que tu hijo no ha podido salir de una situación de abuso por parte de otros, le ves solo y casi sin amigos, es la hora de reaccionar en positivo, relacionándose con los demás, elevando su autoestima y advirtiendo al tutor de esta situación. Él vale mucho. En el momento que se sienta seguro con unos cuantos amigos de verdad, podrá salir más fácilmente de esa situación. Así, proponle que invite a dos o tres amigos a casa, a un plan, un fin de semana. Intenta conocer a los padres de estos nuevos amigos. Refuerza otras amistades para hacer frente al abusón.

Maite Mijancos. Directora del IEEE

Te puede interesar:

Conoce si tu hijo es ciberacosador

Acoso escolar

Mi hijo tiene problemas con sus amigos

La comunicación en la familia

Miedo al rechazo social en niños y adolescentes

Otros artículos interesantes