Categorías:

Niños ordenados, cómo educar en el orden

Tabla de contenidos

En la educación de nuestros hijos es importante dedicar una parte esencial al orden, sabiendo que éste empieza por la responsabilidad para ver en pocos años como, fácilmente, ordena su tiempo, su armario, su cuarto y su mesa de trabajo. Implicarles en las tareas del hogar, enseñarles a cuidar sus cosas y llamar su atención sobre las buenas costumbres son algunos buenos consejos para educar en el orden en familia.

Consejos para educar en el orden a los niños

1. Implicarles en el orden del hogar. ¿Cómo? A través de los encargos: tirar cosas al cubo de la basura, distinguiendo la bolsa amarilla para los envases; meter la ropa en la lavadora, separando los calcetines en su bolsa correspondiente para que no se mezclen con el resto de las prendas; ayudar a colocar la compra, por ejemplo, los cartones de leche; ordenar las películas y los libros; revisar el material escolar para comprobar que no nos falte nada, etc.

2. Educarles en el buen uso de las cosas. Hay que hacerles ver que las cosas bien cuidadas duran más, y, por tanto, es un deber de todos cuidarlas. Asimismo, cada objeto tiene sus «instrucciones de uso» y en cada caso existen unas pautas ordenadas que rigen la correcta ejecución de una tarea, que nuestros hijos deben ir aprendiendo poco a poco. Por ejemplo, enseñarles que hay una forma concreta y ordenada de forrar un libro, o que nos ayuden en nuestras cosas y se sentirán importantes porque «ayudan a papá o a mamá».

3. Llamar su atención sobre el aspecto externo que ofrecemos y las buenas costumbres: que no vayan con los moquillos colgando; lavarse las manos antes de comer y después de haber pasado por el WC; decirle a mamá que nos corte las uñas de las manos y de los pies; saber distinguir solitos cuándo la ropa está sucia y echarla al cesto; procurar ir manchándose lo menos posible al comer. Y cuidar todo lo relativo a sus tareas escolares, su cartera, los libros, etc. Inculcarles buenas costumbres en la mesa: no estirarse, no hacer ruidos, no meter los dedos en el plato, etc.

Objetivos de educar en el orden a los niños

Cómo vivir el orden con nuestros hijos para…

– Que sean virtuosos.
– Que el ambiente familiar sea agradable.
– Que sean eficaces en el estudio y más tarde en su vida profesional.
– Que sepan organizarse y marcarse objetivos en la vida.
– Que sepan aprovechar mejor el tiempo y disfruten más de la vida.
– Que sepan lo que debe hacerse en cada momento.
– Que aprendan a ser puntuales y cumplir con sus obligaciones.
– Que distingan lo fundamental de lo importante, y lo importante de lo secundario.
– Que sean disciplinados y pulcros, tanto externa como interiormente.
-Y, sobre todo, que sean felices y dirijan su vida con coherencia.

El orden en casa: ¿qué tal anda de orden nuestra casa?

Diremos que no hay un buen sentido del orden en el hogar si…

– Habitualmente nos cuesta encontrar las cosas, o las perdemos con frecuencia.

– No cuidamos las cosas para que así duren más.

– Solemos llegar tarde a las citas.

– Acostumbramos a dejar las cosas para última hora.

– Los niños van sucios al colegio o con los deberes sin hacer.

– No exigimos el orden de un modo sistemático, sino arbitrario.

– No tenemos unos horarios claros en temas como: comer, cenar, acostarse y levantarse, también en época de vacaciones.

– Ordenamos a toda prisa antes de acostarnos, después de un día entero desordenando.

– Apartamos las cosas de la vista, amontonándolas sin ton ni son en cajones o armarios, que luego nunca ordenamos.

– Ordenamos la casa o la habitación cuando ya no hay más remedio. Por ejemplo, en el caso de los niños, cuando se les viene encima una bronca de mamá; o en el caso de nosotros, los padres, cuando vamos a  recibir visita.

– Guardamos en un mismo lugar los juguetes estropeados con los nuevos, los bolígrafos o rotuladores gastados con los que pintan, los lápices afilados y los que no tienen punta, los medicamentos ya caducados con los que no lo están, etc.

Acumulamos por falta de orden y previsión más cosas de las que son necesarias. Por ejemplo: no revisamos la despensa y compramos cosas que ya teníamos.

Ana Aznar
Asesoramiento: Inmaculada Núñez Lagos. Profesora del Centro Universitario Villanueva.

Te puede interesar:

El orden y su importancia en la educación infantil

Educar en el orden: los encargos

La mochila escolar, un buen sitio para trabajar el orden

Encargos por edades para responsabilizar a los niños

30 ideas de encargos para tus hijos

Video: ¿por qué las madres nunca terminamos las tareas?

Otros artículos interesantes