Muchos niños se quejan de dolor de espalda y los médicos saben cuál es, en demasiadas ocasiones, el origen de esta dolencia. La Organización Médica Colegial, OMC, y la Red Española de Investigadores en Dolencias de la Espalda, REIDE, alertan del excesivo sedentarismo en los niños y sus consecuencias en la salud. Nuestros hijos han pasado de jugar en la calle a quedarse en casa con las nuevas tecnologías.
Que se mueva para que no le duela
Tanto OMC como REIDE manifiestan que los nuevos tiempos han traído un estilo de vida más sedentario, especialmente para los más pequeños. Ante este panorama no es de extrañar que el dolor de espalda termine por convertirse en algo habitual entre los más pequeños de la casa. Para poner fin a estas molestias, estas entidades proponen una solución sencilla: «Muévete para que no te duela».
Estos organismos recuerdan que la actividad física es fundamental para que la columna vertebral adquiera su forma definitivacrezca de manera adecuada, y lo haga de forma correcta. La falta de ejercicio también provoca que los niños no desarrollen la musculatura que la espalda requiere para actividades del día a día.
Asegurar un correcto desarrollo de esta zona, hará que se eviten numerosos problemas de espalda en la vida adulta, según estas organizaciones. Estas entidades también indican que en caso de que estas molestias lleguen a presentarse, lo harán de forma más leve e indolora, convirtiéndose en episodios de corta duración. De esta forma se conseguirá que estos problemas interfieran menos con el día a día de las personas.
Por el contrario, estas entidades recuerdan los distintos estudios científicos que recuerdan que aquellos que sufren dolor de espalda en su juventud, tienen más probabilidades de padecer estos problemas de forma permanente en la vida adulta.
Aumento del sedentarismo
OMC y REIDE expresan que ahora más que nunca hay que recordar el beneficio de la actividad física ante el peligroso aumento del sedentarismo. Estas organizaciones advierten de que hoy las principales fuentes de diversión entre jóvenes son demasiado pasivas y no resultan beneficiosas «ni para su salud en general ni para su espalda». Jugar con videojuegos o ver la televisión, están imponiéndose en las nuevas generaciones en detrimento del ejercicio, el deporte y los juegos tradicionales, que sí implican actividad física.
Estos organismos también recuerdan los resultados del informe anual del Sistema Nacional de Salud en 2015. Esta publicación refleja que algo más del 12% de los niños de menos de 14 años son sedentarios y no realiza ninguna actividad física como forma de ocio. Este hecho se relaciona con que la incidencia del dolor de espalda aumenta a partir de los 10 años, y más de la mitad de jóvenes de entre 13 y 15 años ya lo han padecido.
Mochilas y mobiliario escolar
Los responsables de esta campaña también recordaron los problemas derivados de la vida escolar. Según OMC y REIDE la mayor parte del mobiliario en los colegios no se adapta a las necesidades de cada alumno. Estos productos generalmente tienen el mismo tamaño, pero no todos los niños miden lo mismo, por lo que el respaldo que tienen durante tantas horas puede no ser el correcto.
Por último OMC y REIDE también recuerdan los peligros que pueden tener las mochilas escolares sobre las espaldas de los más pequeños. Estos organismos afirman que lo mejor es que el material que portan los alumnos no supere el 10% de su peso corporal, pero hay casos en los que se excede en un 30 %.
Damián Montero
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