Jugar es más importante que nunca durante estos días en los que, debido a la cuarentena, los niños están sobreexpuestos a las pantallas. Los niños deben dedicar al menos una hora y media a realizar actividades lúdicas no relacionadas con el entorno digital.
El juego es una herramienta muy útil para reducir la ansiedad y el estrés que pueden sufrir los niños durante el encierro en casa durante la cuarentena. Cuando los niños nos preguntan «¿a qué jugamos?», la familia, los padres concretamente, debemos estar más dispuestos que nunca a actuar como impulsores de dinámicas que inciten a la actividad física jugando y participando con ellos en juegos activos como las luchas a caballo (ver fotografía), los bailes, los ejercicios de tonificación muscular en un metro cuadrado… Estas actividades les ayudan a distraerse y a cansarse al mismo tiempo que liberan endorfinas (las hormonas del bienestar) para mejorar su estado emocional.
Y es que a parte de compartir juegos de mesa, también conviene que los niños participen en juegos más activos como el escondite en casa, los saltos de obstáculos en el pasillo…. También podemos convertir las tareas domésticas en momentos lúdicos o plantear juegos verbales que minimicen la situación presente e inviten al optimismo.
Juegos para desarrollar habilidades durante la cuarentena
Cualquier juego o juguete bien concebido y, sobre todo, utilizado de la forma correcta, puede favorecer el desarrollo infantil a nivel intelectual, emocional, del lenguaje, educativo y motor. En este sentido, expertos en juego y desarrollo infantil del Departamento de Pedagogía-Producto del Instituto Tecnológico del Juguete (AIJU) ofrecen un «Manual para Mamás y Papás aprendamos a Jugar», donde se recogen una serie de consejos que pueden servir de guía para dirigir el juego de los niños en estos momentos:
1. Personalidad. El desarrollo completo y equilibrado de la personalidad del niño se consigue optando por juguetes variados. Evita que jueguen siempre a lo mismo, en la variedad encontrarán nuevas posibilidades de afianzar el desarrollo de su personalidad.
2. Razonamiento. Para desarrollar el razonamiento son recomendables los juegos de asociar, de diferenciar formas y colores, de establecer relaciones lógicas, de memorizar, de reflexionar, de construir… En definitiva, entran en esta dinámica todos los juegos que requieren lógica y una forma de pensar más o menos elaborada.
3. Creatividad e imaginación. Para soñar con la mente y estimular su creatividad están especialmente indicados los juegos de imitación, de expresión, de construcción, los disfraces y aquellos que permitan inventar, imaginar o crear situaciones u objetos propios y personalizados.
4. Motricidad gruesa. La estimulación y coordinación de los movimientos corporales se consigue con el uso de andadores, triciclos, bicicletas, patines, juegos de puntería o cualquier juguete que invite al movimiento y la precisión o la coordinación de movimientos.
5. Motricidad fina. Para el desarrollo de las habilidades con las manos son aconsejables los juegos de construcción, de manipulación, muñecas, miniaturas y otros juguetes que incluyan la manipulación de piezas pequeñas que obliguen a mover los dedos de forma precisa.
6. Sociabilidad. Para una mejor interacción con los demás son recomendables dos tipos de juegos: por un lado, los juegos de imitación como cocinitas, vehículos, tiendas, médicos… y, por otro, los juegos de mesa, los deportes en equipo y los que promuevan la participación de varias personas.
7. Afectividad. Para trabajar las emociones y los sentimientos, tanto las muñecas, como los peluches y otros tipos de personajes y objetos que despierten sentimientos de apego o cariño pueden ser nuestro mejor aliado.
8. Lenguaje. Entre las mejores ideas para que los niños aprendan a expresarse, a parte de la lectura, tenemos los juegos de expresión oral, los de vocabulario para formar palabras, los de imitación, y los de preguntas y respuestas.
Marisol Nuevo Espín
Asesoramiento: AIJU. Juguettos
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