En el coche de viaje, en la piscina, en las siestas o a la hora de dormir, son momentos que pueden dar mucho juego verano para conseguir fomentar la imaginación y la creatividad de los más pequeños.
El verano es la época más disfruta de los niños ya que están de vacaciones, no madrugan, están más descansados, además los días son más largos y el tiempo acompaña a pasar más tiempo en la calle y para jugar. Sin embargo, también es un buen momento para crear buenos hábitos que duren todo el año ya que los niños se encuentran más relajados.
Maelle Chassard, fundadora de Stelii, aconseja a los padres «dedicar un rato al día, creando juegos evitando el uso de las pantallas y así ayudarles a la creación de sus propias historias para así potenciar su creatividad. Además esto creará y fomentará vínculos de unión a la vez que se fomenta el aprendizaje y la imaginación de los niños y nñas».
4 juegos para fomentar la imaginación en momentos cotidianos del verano
En este contexto, Stelii, marca de audiocuentos, ha establecido los mejores momentos para fomentar la imaginación de los más pequeños de la casa durante el verano gracias al uso de su dispositivo interactivo Mi Fábrica de Historias:
1. Jugar en trayectos en el coche
A veces los momentos de viajar en el coche se hacen complicados para los padres. Sin embargo, pueden ser una buena oportunidad para que los niños realicen juegos de mente, ya que deben estar sentados por su seguridad. Escuchar un audiocuento es una actividd muy indicada y una buena alternativa a las pantallas, a las que a veces se recurre por falta de ideas.
Una opción es elegir las historias de los audiocuentos interactivos de forma conjunta con los miembros del viaje (no conductores) como padres, hermanos o amigos, que antes de comenzar el viaje o durante el mismo.
Una vez escuchado el audiocuento elegido por los niños, los papás les pueden hacer preguntas para ver si han estado pendientes de lo que sucede y buscar por ejemplo, finales alternativos, al estilo de: ¿qué le explicó a Celia el lobo sobre por qué las historias no llegaban a las personas? o ¿qué le dijeron el delfín y las sardinas a Gastón en la historia?
2. Fomento de la imaginación a la hora de la siesta
En verano las siestas son un momento de tranquilidad y sosiego, además debido al calor es mejor que los niños y las niñas estén en casa resguardados de las horas en las que las temperaturas más aprietan y estar en la calle, si no es a remojo, no es una buena opción. Por eso proponemos que para los peques que no suelen echarse siesta, los padres pasen un rato con ellos de una forma tranquila sin ver pantallas (dispositivos muy recorridos en estos momentos).
Un ejemplo podría ser elegir un audiocuento como ¡Menudos Oficios! y de forma conjunta, crear los elementos que se pueden elegir con los audiocuentos de Mi Fábrica de Historias, y aprender sobre algún tema que le pueda interesar al niño o la niña, ya sea porque no sepa de ello o porque le llame mucho la atención y hablar sobre ello.
Con estos ratitos, además de fomentar la imaginación a través de la creación de la historia, se fomenta el lenguaje y la expresión a través del la conversación tras las escucha.
3. Jugar con los amigos y el audiocuento
Los niños pasan buenos ratos entretenidos con los amigos durante el verano en lugares como la piscina, en casa de un amigo o en el parque. Estas ocasiones también son buenas para disfrutar de historias compartidas con ellos. Un recurso para entretenerse juntos podría ser que elijan historias del audiocuento juntos y así ver las diferentes historias y elecciones de sus semejantes.
Una opción diferente y divertida podría ser la de votar entre todos el cuento más sorprendente o en definitiva, el que más le haya gustado a cada uno. Se lo pasarán pipa e intentar elegir y consensuar la historia entre todos.
4. Momentos de calma, antes de irse a dormir
El momento de irse a la cama es un buen momento para que padres e hijos tengan un ratito de conexión entre ellos y por ejemplo escuchar un audiocuento como Dulce Noche relajados en la cama. Si lo adoptamos como una rutina diaria, de forma casi inconsciente, los niños noche tras noche tendrán su momentito de imaginación y relajación con sus padres.
Además de pasar un rato agradable y en calma, se reforzará el vínculo padres e hijos, los papás y las mamás mantendrán momentos que perduraran para siempre en su recuerdo además de que los niños consiguen que su cuerpo y su mente se vaya relajando, para conseguir la descarga de pensamientos y prepararse para el sueño.
Marina Berrio
Asesoramiento: Maelle Chassard, fundadora de audiocuentos Stelii
Te puede interesar:
– Juegos para disfrutar de tus hijos en los viajes
– Qué hago si mi hijo no quiere dormir siesta
– Escuchar libros, otra forma diferente de leer