En la actualidad, Internet ha abierto una gran puerta a cientos de contenidos. Series, películas, vídeos, lecturas… todo al alcance de un click. Sin embargo, para poder acceder a estos materiales no se pregunta la edad y, si se hace, normalmente estos controles no son difíciles de obviar. Basta con un golpe de ratón para engañar al sistema seguir adelante. Pero esto no quiere decir que los riesgos que suponen para los más pequeños.
Visualizar contenidos que no son apropiados para la edad entraña grandes riesgos, peligros que se han ampliado con la expansión de internet y la facilidad con la que los niños pueden acceder a estos materiales. Así lo advierten desde Internet Segura 4 Kids, plataforma que señala cómo puede verse alterado el desarrollo de los más pequeños de la casa si no se tienen en cuenta determinadas pautas de seguridad en este sentido.
Peligros de los contenidos inapropiados para niños
Series para adultos, imágenes o vídeos perturbadores, valores negativos, informaciones falsas… Estos son solo algunos contenidos inapropiados que están al alcance de la mano de los más pequeños y que entrañan los siguientes riesgos:
– Daños psicológicos y emocionales. El menor posee una madurez y una autoestima en desarrollo, por lo que es más vulnerable a nivel emocional si tropieza con información que no es capaz de asumir o frente a la que no sabe cómo reaccionar, como por ejemplo contenido pornográfico o violento. Estos les pueden resultar demasiado complejos e incluso perturbadores.
– Desinformación, manipulación y construcción de falsas creencias. Los contenidos falsos y sin rigor pueden confundir a los menores y son especialmente peligrosos cuando tratan temáticas relacionadas con la salud y la seguridad.
– Establecimiento de conductas peligrosas o socialmente inapropiadas. Los menores pueden asumir determinados contenidos como ciertos y positivos, y adoptarlos en forma de conductas o valores dañinos.
– Daños para la salud física. Algunos contenidos tienen como objetivo la promoción de desórdenes alimenticios (anorexia y bulimia).
– Inclusión en grupos y colectivos dañinos. Acceder a determinados contenidos puede acercar al menor a colectivos extremistas, violentos o racistas, así como a sectas de carácter ideológico o religioso, grupos políticos radicales, etc. El factor emocional es importante a la hora de hacer frente a esta información que puede ser perjudicial o malintencionada, dado que una baja autoestima, o aquella que esté aún en desarrollo, aumenta la vulnerabilidad del menor.
– Gastos económicos. Los fraudes o intentos de engaño destinados a estafar a los usuarios para hacerse con su dinero o sus datos pueden acarrear pérdidas económicas directas, como ocurre por ejemplo con las suscripciones Premium. Además, los menores son más vulnerables a la hora de interpretar y gestionar la publicidad excesiva a la que están expuestos en Internet ya que puede generar en ellos la necesidad de consumir impulsivamente, como sucede con las compras en juegos y aplicaciones. Asimismo, no siempre el contenido de los anuncios es, en sí mismo, adecuado para ellos.
Prevención y fomento de un uso seguro
Los responsables de Internet Segura 4 Kids indican que la comunicación y una buena educación son las claves para favorecer la prevención y un uso seguro entre los hijos:
– Si se pretende evitar que encuentren información inapropiada para su edad, hay que anticiparse a su curiosidad y ofrecerles respuestas y contenidos adaptados a su nivel de comprensión y madurez. De este modo, se promoverá el desarrollo de su capacidad crítica.
– También es positivo que en sus primeras andaduras en la red estén acompañados por un adulto que les pueda transmitir conductas adecuadas a la hora de navegar por Internet, facilitando contenidos de calidad ajustados a la madurez del menor.
– Trabajar sus habilidades sociales y fomentar el cuidado de sus amistades favorecerá que tengan mejor capacidad de reacción y menor predisposición a los efectos negativos de estos contenidos.
– Además, los padres pueden valerse de las opciones que ofrecen las nuevas tecnologías para fomentar un uso seguro de Internet, como son los controles parentales, programas, extensiones y complementos específicos para menores. El empleo de estas herramientas debe adaptarse a su edad y madurez.
Damián Montero
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