La escena de un padre leyendo un cuento a su hijo antes de irse a dormir se repite en multitud de hogares a lo largo de todo el mundo. El contenido de estos relatos es muy diverso y abarca desde la historia de tres cerditos que deben construir una casa para resguardarse del lobo hasta la de una joven que debe acudir a casa de su abuela con una cesta de comida.
Aunque parezcan narraciones inocentes, algunos pasajes de estos cuentos pueden sorprender bastante a los más pequeños, como la escena en la que el lobo se come a la abuela de Caperucita. ¿Están preparados los niños para afrontar estos pasajes? Algunos padres piensan que no y por ello tratan de reescribir estas historias evitando estas situaciones.
Discrepancia de ideales
¿Cómo enfrenten los padres actuales los relatos de los cuentos del pasado? Esta pregunta ha sido contestada en la encuesta realizada por Music Magpie y One Poll, ambas entidades han realizado una encuesta a 2.000 padres en donde recabaron su opinión sobre estos relatos clásicos y si habían alterado en alguna ocasión pasajes para hacerlos más suaves a sus hijos.
Uno de cada cuatro padres afirmó que en alguna ocasión había cambiado un pasaje de un cuento al entender que era demasiado violento o sorprendente para sus hijos. Por su parte, un 16% afirma haber prohibido este material en su casa. También destacan las discrepancias con algunas escenas mostradas en estas narraciones populares y que confrontan con los valores de estos progenitores:
– El 36% de los padres discrepan con el engaño del flautista de Hamelin a los niños.
– Uno de cada cuatro padres cree injusto que Cenicienta fuera la encargada de la totalidad de las tareas del hogar.
– El 27% de los padres encuestados no cree que Robin Hood fuera un héroe ni un modelo a seguir por su modo de actuar.
– Uno de cada cuatro padres valora el cuento de El Patito Feo como un cuento que favorece el acoso escolar al aceptar al protagonista sólo cuando es bonito.
– El 27% de los padres muestra su preocupación por el hecho de que Pinocho aliente a los niños a mentir.
Entre las historias que más cambian los padres destacan Caperucita Roja, Los Tres Cerditos, Hansel y Gretel y el Patito Feo. En esta lista también aparecen clásicos como Blancanieves y Los Siete Enanitos, La Bella y la Bestia y Pinocho. Los responsables de esta encuesta destacan que no debe sorprender que muchos padres discrepen con las historias de estos cuentos ya que fueron redactados hace años y que los valores de la sociedad han cambiado. De hecho muchas de las adaptaciones al cine de estos relatos también han sido el foco de alteraciones.
Beneficios de leer a los niños
Ya sean cuentos clásicos o actuales, lo cierto es que leer a los más pequeños en la cama es una idea excelente. Muchos son los beneficios de dedicar tiempo a esta actividad, estos son algunos de los efectos positivos que tiene la reserva de estos momentos al final del día:
– Aprendizaje de nuevo vocabulario. Cuando se lee al niño se le ofrece una larga lista de palabras que favorece el desarrollo de su vocabulario. Tener cerca al padre ayuda a que el pequeño pueda conocer el significado de estos términos.
– Hace que la lectura sea más atractiva. Tener un grato recuerdo de la lectura a estas edades hace que los niños tengan más interés en los libros.
– Favorece el vínculo entre padres e hijos. Pasar este tiempo junto a los más pequeños es siempre una buena idea, y compartir estos momentos con los libros de por medio es una gran idea para generar un fuerte lazo entre padres e hijos.
– Desarrolla la imaginación. El padre lee, el niño debe imaginar todos los elementos de esta historia y pensar en cómo serían estos personajes y sus acciones.
Damián Montero
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