Las vacaciones de verano significan el inicio de un tiempo libre que se extiende por algunos meses. Días y días que, en un primer momento, se invierten en descansar y en hacer todo aquello que las responsabilidades académicas no permitieron. Pero llega un momento en el que el aburrimiento hace acto de presencia y toca pensar en qué se va a hacer para divertirse.
Desde Aprendiendo con Montessori se dan una serie de recomendaciones con ideas para llenar los días de verano. Y es que esta época del año es excelente para seguir aprendiendo bajo el paradigma de esta metodología que permite disfrutar, al mismo tiempo que se interiorizan diversos conceptos
Seis actividades Montessori para este verano
¿Preparados para disfrutar plenamente de este verano? Estas son las propuestas Montessori con las que divertirse este verano:
– Bandeja de observación. ¿Vais a algún lugar de vacaciones? Se puede aprovechar para una bandeja y cuaderno de observación: conchas marinas de la playa, piedras descubiertas en una ruta de senderismo, el folleto de un museo, etc.
– El lugar que ocupan en el mar. Una actividad que requiere, en primer momento, de dibujar y recortar diversos elementos que se encuentran en el mar, desde peces, hasta otras criaturas que viven en las profundidades. La idea es que en otro papel se indiquen varios niveles y los niños vayan indicando dónde habitan.
– Material sensorial. Piedras, conchas, arena, tantos materiales típicos del verano que pueden ayudar a que los niños indiquen qué sensaciones les transmiten. Rugosidad, liso, etc.
– Manualidades con flores frescas. Existen muchas flores, de diversos colores y tonos, hojas con los que acompañarlas. Secarlas para hacer composiciones con estos materiales vegetales es una excelente idea con la que se pueden hacer tarjetas, marcos e incluso decorar las tapas de libretas.
– Huerto en casa. ¿De dónde vienen los alimentos que comemos? Una buena idea es recurrir a un huerto en casa donde se planten las hortalizas y verduras preferidas para los más pequeños. Desde que son semillas hasta que se sirven en plato, toda una lección de responsabilidad.
– Esculturas en arena. En la playa se puede aprovechar la arena para trabajar con ella, haciendo esculturas usando agua y construyendo castillos o diferentes formas. Una actividad manipulativa y que también asegura el desarrollo sensorial.
Damián Montero
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