Categorías:

Teñirse el pelo en casa, ¿te atreves?

Tabla de contenidos

Muchas personas están aprovechando este tiempo de confinamiento en casa para experimentar con sus melenas, cambiar su look, o incluso, cuidarse con algún tratamiento específico, algo muy importante para experimentar un subidón de energía y autoestima en estos momentos todavía tan difíciles.

Bien sea a través de tutoriales o vídeos explicativos de Internet se está aprovechando el tiempo libre para aprender a cortarse el pelo, teñirse o probar cambios de imagen, ya que tener un pelo bonito es el mejor complemento que se puede lucir.

Teñirse el pelo en casa, ¿qué debemos saber?

Con las peluquerías cerradas, las canas se han hecho visibles y muchas personas han decidido probar a teñirse el pelo en casa con tintes y productos que pueden adquirirse en un supermercado. Pero una vez en el establecimiento surgen dudas: ¿Qué tipo de tinte elijo? ¿Quiero uno que dure mucho o volver a mi tono natural en poco tiempo? ¿Cuál compro si tengo el cuero cabelludo muy sensible? ¿Qué color me favorece más?

Tintes para el cabello según su duración

Los tintes se pueden dividir según su duración en semipermanentes, permanentes o temporales. Con los permanentes el color nunca termina de irse del todo porque el pigmento actúa penetrando en el interior de la fibra capilar. Resultan ideales para tapar las canas y cuando estamos seguras de que ese es el color que nos favorece. Por el contrario, si solo queremos ver cómo nos queda un nuevo color, lo ideal es elegir uno semipermanente, que se va en varios lavados.

Tintes para el cabello según sus ingredientes

Según sus ingredientes los tintes pueden ser naturales o sintéticos, si nuestro cabello es muy sensible lo mejor es utilizar naturales o ecológicos, para asegurarnos de que ninguno de sus ingredientes puedan causarnos irritación. En este sentido, la elección de colores será más limitada que en un tinte sintético… ¡pero el efecto es igual de natural!

Tono de cabello favorecedor

¿Sabías que en en España el 75% de la población es morena, frente al 13% que es rubia, el 9% es castaña y sólo un 1% que es pelirroja?

Para elegir el tono ideal del tinte para el cabello, lo mejor es fijarnos en el color de nuestra piel y de nuestros ojos:

– Si nuestra piel es morena y los ojos oscuros: lo mejor es optar por tonalidades que vayan a conjunto con nuestros rasgos, es decir, morenos, castaños oscuros, chocolate o negros.

– Si tenemos la piel y los ojos claros: lo ideal es contrastar con tonos rubios cálidos, dorados, rubios oscuros y tonos caoba.

– Si nuestra tez es clara y nuestro ojos oscuros: los cobrizos, bronce o castaños claros son los tonos más naturales y que más nos favorecerán.

– Si tenemos la piel morena, pero destacan unos ojos verdes o azules: sin duda hay que elegir colores castaños, dorados o bronce.

Cuidados diarios básicos para el pelo

Cepillarse el pelo todas las noches es muy recomendable. Se necesitan entre diez y veinte pasadas con el cepillo para eliminar los restos de productos y suciedad acumulada durante el día. Gracias a esto, se exfolia el cuero cabelludo y se estimula la circulación sanguínea favoreciendo el crecimiento y potenciando el brillo. Para desenredarlo en mojado es mejor utilizar los dedos o un peine de púas anchas, ya que al estar menos elástico el pelo se rompe más fácilmente.

¿Sabías que una persona puede llegar a tener 150.000 pelos en su cabeza? Cada pelo tiene una vida de entre dos y tres años, después se caen y salen otros por lo que al día se pierden entre 50 y 100 pelos. Encontrarnos algunos en el peine o en las manos es normal, pero si son muy abundantes mejor consultar a un especialista.

¿Por qué es bueno cortarse el pelo?

Cortarse el pelo es bueno para lucir un cabello sano. Si prefieres no esperar a conseguir cita en la peluquería o de momento no te atreves a ir puedes cortarte las puntas un centímetro. Apenas se notará, pero tu cabello quedará sano, ya que las puntas son la parte el cabello que más se reseca y sufre.

El cabello suele crecer de media un centímetro al mes, algo más en los meses más calurosos.

Cómo lavarse bien el pelo

Para presumir de melena, hay que lavarse el pelo siguiendo unas pautas. Antes de mojarlo, conviene desenredarlo porque el pelo mojado es más frágil, y es mejor evitar roturas cuando está seco.

Después, se moja y se aplica el champú elegido para tu tipo de cabello, teniendo la precaución de usar solo la cantidad correcta para evitar asfixiar el folículo piloso, lo que puede provocar la caída del cabello. La raíz es la zona que más se debe masajear al menos durante tres minutos para activar la circulación y potenciar la nutrición del pelo. Las puntas se limpian solas, no hay necesidad de frotarlas. Por tanto, no hay que aplicar más producto, ya que la espuma va bajando desde la raíz hasta las puntas. Y para terminar, después de enjuagar el cabello, hay que terminar siempre con agua fría.

Los expertos recomiendan lavar el pelo cada tres días, pero si hay que lavarse más por tener el pelo graso, es bueno hacerlo con un producto equilibrante ya que al lavarse se eliminan los aceites naturales de nuestro cabello y éste produce más para protegerse y acaba dando un aspecto graso.

Identifica tu tipo de cabello antes de elegir un champú

Antes de lavarse el pelo lo primero que hay que hacer es identificar el tipo de pelo y las necesidades que tiene, aparte de su forma (liso, rizado, ondulado…) es importante diferenciar si es graso o seco, saber si se tiene caspa, picores en el cuero cabelludo, caída…y cuando se sabe el tipo de cabello, hay que utilizar un champú y acondicionador específico para las características especiales.

Una buena opción es hacer un primer enjabonado con un champú de tratamiento (anticaspa, anticaída…) y un segundo enjabonado con un champú embellecedor (brillo, encrespamiento, voluminizador…).

Es importante también usar acondicionador ya que ayuda a hidratar la fibra capilar, y hace que el cabello esté más manejable. Por cierto, se calcula que el 33% de la población tiene caspa, siendo los adolescentes los más propensos a tenerla por la alteración de las hormonas.

Tratamientos para el cabello con aceites

El uso de planchas, secadores y rizadores pueden hacer que el pelo se deshidrate. El uso de aceites capilares es una de las mejores opciones que se pueden encontrar en el mercado para recuperar la hidratación estando en casa, además de intentar secarlo al aire durante las semanas que todavía quedan de confinamiento, para tener el pelo más sano.

El aceite debe aplicarse dos veces a la semana, distribuyéndolo mechón a mechón y dejarlo actuar veinte minutos como mínimo. Incluso se puede dejar toda la noche y aclararlo a la mañana siguiente, ¡se nota mucho la diferencia!

El aceite de argán es un buen ejemplo para hidratar, dar brillo y fortalecer las puntas. Hay que aplicarlo después de lavar el pelo, cuando todavía está húmedo, masajear para que penetre bien, después secar y peinar como de costumbre.

Para el cabello graso conviene usar el aceite del árbol de té, eficaz para regular la producción de sebo. También es eficaz para el tratamiento de la caspa, añadiendo unas gotas en el champú habitual. 

Noelia Suarez. Directora de comunicación de Nutritienda.com

Te puede interesar:

Alopecia femenina, una patología silenciada

 6 consejos para un cabello bonito

 Tricotilmanía, ¿qué hacer cuando se arranca el pelo?

 6 consejos para evitar la caída del cabello

Otros artículos interesantes