A todas nos llega. Después de tener un hijo, en un par de semanas, o un par de meses, toca enfrentar un hecho que posiblemente tememos, volver. Toca volver o a una jornada laboral fuera del hogar, volver a un horario de actividades del hogar regular, o volver a realizar actividades sociales que hasta ahora hemos dejado de lado. Todas involucran pasar un tiempo alejado de nuestro nuevo y maravilloso bebé.
Cómo prepararse para volver al trabajo tras el parto
De hecho, volver es algo de importancia vital en la vida de toda madre y por eso es necesario conocer las claves para preparar tu vuelta al trabajo. Sin este espacio de realización laboral, profesional y/o académica, sin este espacio de interacción social adulta y realización personal, es increíblemente difícil encontrar un nicho en el que exista un equilibrio entre nuestro rol materno, rol laboral y bienestar personal. De hecho, una vez que volvemos descubrimos lo importante que es para nosotras tener este espacio nuestro, donde tenemos un rol individual y personal.
Antes de ser madres ya estamos preocupadas por como va a afectar el volver a nuestra relación con nuestras familias y nuestros hijos. Tanto es así, que las españolas solemos esperar de media hasta la treintena para tener hijos siendo uno de los principales motivos el temor a la inflexibilidad laboral y la visión tradicional de los roles de genero en la familia. Estos factores están acompañados por la inestabilidad económica, los altos niveles actuales de desempleo y la falta de trabajos a tiempo parcial.
Entre las claves para preparar tu vuelta al trabajo, hay que tener en cuenta que es posible ser buena madre y buena profesional, que es posible tener tiempo para mimar a nuestras familias y también tiempo para mimarnos. No es una tarea fácil, no obstante, con una buena administración de tiempo y ayuda es viable alcanzar este equilibrio.
Las esferas del volver a nuestra vida de antes
1. Vuelta tras una baja de maternidad: volver después de una baja de maternidad a un horario laboral establecido puede ser todo un reto. Este volver exige que sigas siendo tan eficiente y productiva en tu trabajo como antes, cuando no tenias un bebé que estableció con su nacimiento que si él no duerme nadie duerme.
2. La vuelta a una vida organizada: realizar pagos, ocuparse de los diferentes asuntos de la casa, de otros hijos y sus propias peripecias y también de nosotras mismas suele ser complicado cuando hay un bebé pequeño en casa. Es común que la limpieza se descuide o que la lista de pendientes se engrose. Claramente esta situación no es óptima ni estable y requiere tanta determinación y esfuerzo como volver a un escenario profesional.
3. La vuelta a una vida social y afectiva existente: cuando llega un bebé a nuestras vidas lo que mas se echa de menos es tener tiempo del que disponer. Especialmente en el caso de ser madre primeriza, hay mucho que hacer y poco tiempo para hacerlo. Esto suele afectar en primer plano nuestro ritmo de vida social, y muchas veces nuestra relación con nuestra pareja. Si bien la primera puede verse en paro durante unas semanas o meses, la segunda es un elemento que hay que cuidar con especial cuidado.
Cómo preparar tu vuelta al trabajo tras la maternidad
Para hacer esta transición de la manera mas exitosa sigue estos consejos:
1. Dejar a un lado el sentimiento de culpa. Dejar a tu hijo en casa mientras vas a trabajar tiene solo aspectos positivos. Es importante recordarnos constantemente que estamos trabajando porque es lo mejor para la familia y para nosotras. Un estudio publicado en 2012 siguió a 2,540 futuras madres desde los 14-22 hasta los 40 años de edad. Este estudio encontró que aquellas madres que durante estos años habían tenido un trabajo, a tiempo completo o parcial, tenían un mejor nivel de salud mental que aquellas madres que no habían tenido un trabajo o que habían tenido largos periodos de desempleo. Este estudio señala que tener una vida profesional activa promueve el bienestar mental al proporcionar un espacio de realización personal definido y complementario a la realización como madres de familia.
2 Encontrar el servicio optimo para el cuidado del bebé. Tener una cuidadora o una guardería cualificada y adecuada es siempre de gran tranquilidad. En este mundo de tanta información es mas fácil encontrar recomendaciones de familiares o amigos sobre buenos sitios o personas de confianza para la labor. Por otra parte, siempre es positivo que los niños tengan una oportunidad de desarrollar vínculos de confianza y sociabilidad con gente alterna a sus padres. Poseer una firme certeza de que nuestro bebé esta en buenas manos es una gran ayuda ya que nos permitirá ser mas eficientes en nuestras tareas ya que no perderemos mucho tiempo pensando en si nuestro bebé esta siendo bien cuidado o llamando compulsivamente para estar seguras de que todo sigue bien.
3. Hablar con tu jefe. La comunicación y la transparencia son clave. Es importante que tanto tu jefe y tu tengáis las mismas metas en mente y conozcáis vuestras prioridades. Muchas madres reportan tener un aumento de eficiencia en sus horas de trabajo tras volver después de una baja de maternidad. Saber que se cuenta con horas limitadas para alcanzar las expectativas dentro del trabajo muchas veces reduce la procastrinación y acelera el ritmo de trabajo sin afectar la calidad del mismo.
4. Organízate. Siempre hay diferentes variaciones de nuestro horario que pueden beneficiarnos a conseguir un mayor tiempo con nuestros hijos y a realizar todo el trabajo que tenemos que acabar. Para muchas, esto significará llevar trabajo a casa y culminarlo una vez que el bebe se haya ido a dormir. Para otras significará alterar las horas de trabajo empezando o acabando mas tarde o mas pronto. Un tip para mantener un alto nivel de organización es tener una lista de aquellas cosas que se tienen que realizar. No solo ayudará como apoyo mnémico, sino que también nos ayudara a organizar en nuestra mente aquello que es prioritario y aquello que aun queda por realizar. Tener en papel aquello que tenemos que hacer y tachado aquello que hemos completado también puede darnos tranquilidad al saber que hemos realizado todo lo propuesto o que vamos avanzando en nuestros quehaceres.
5. Delega y busca apoyo. Es muy posible que alguna vez necesites a alguien que te eche un cable, déjate ayudar. Puede ser que necesites alargar un día tu horario en la oficina, tienes una diligencia imprevista, o que necesites ayuda de un colega. Pide ayuda cuando la necesitas. Si no pedimos ayuda cuando nos hace falta, nos sentiremos abrumadas y no conseguiremos realizar todo lo que querríamos hacer o en el nivel que querríamos hacerlo. Un estudio publicado en 2013 demostró que el 81% de las madres involucradas reportaban el apoyo social como el principal factor para desarrollar un rol materno compatible con una vida laboral. Por otra parte, un estudio publicado en 2011 demostró que tener lazos de amistad ayuda a mantener un buena autoestima y una mayor calidad de vida.
De todos los apoyos sociales y lazos de amistad, el mas fuerte e imprescindible es el de la pareja. No compartir con la pareja tiempo, miedos y momentos de intimidad puede cobrar un alto precio a la relación. En momentos de falta de sueño y estrés es muy fácil olvidar que nuestra pareja es nuestro mejor aliado. Mantener un fluido canal de comunicación y apoyo mutuo es indispensable para un volver exitoso.
6. Descansa. Procurar tener suficientes horas de sueño, saber cuando parar y darnos un respiro o conocer la prioridad de los quehaceres y saber postergarlos cuando no son de alta prioridad son todas acciones imprescindibles para nuestra salud mental y un triunfante volver. Un baño de agua caliente, 15 minutos mas de sueño, realizar una actividad que nos gusta, incluso hacer un parón de 3 minutos para escuchar una de nuestras canciones favoritas son todas actividades que puedes ayudarnos a refrescarnos y continuar con nuestras obligaciones y roles de manera mas descansada.
Teniendo estos factores en cuenta ayudara a que volver sea mas fácil y también ayudara a evitar sentimientos de erosión y derrota.
Maite Balda. Psicóloga y especialista en Neurociencias cognitivas.
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