Organizar la despensa y el frigorífico con el Método KonMari, de la famosa organizadora Marie Kondo, permite ser consciente de los alimentos que ya se tienen en casa y comprar sin excesos, angustia o miedo para evitar que los murales de los supermercados se queden vacíos por las medidas adoptadas por el coronavirus.
Para evitar contegios por coronavirus o Covid-19, se ha recomendado como medida preventiva no salir de casa excepto para 8 supuestos, entre los que se incluye ir al supermercado. En consecuencia, tanto las personas precavidas, que en situaciones normales suelen tener la despensa llena, como las que son de hacer la compra al día, sienten la necesidad de adquirir alimentos y productos básicos que les permita evitar el contacto con el exterior.
Pero, ¿cómo hacerlo bien sin acumular más de lo necesario? Sara Etxebeste, consultora certificada del método de Marie Kondo en España, recomienda «planificar previamente la compra revisando los armarios de la despensa y el frigorífico, así como el menú de la semana».
Las compras compulsivas que origina el coronavirus
Murales vacíos en los supermercados, grandes colas antes de que abran, desabastecimiento de algunos productos especialmente de celulosa… El problema es que en muchos casos estas compras se están realizando sin antes haber evaluado lo que ya se tiene o desde el miedo a que se acaben los productos.
Aunque las autoridades públicas y los gerentes de varias cadenas de supermercados insisten en que el abastecimiento está asegurado, desde hace varios días los ciudadanos están comprando de forma compulsiva, sin control y sin planificación, generando imágenes de baldas vacías en los supermercados.
Por ello, la Sara Etxebeste, una de las tres Consultoras KonMari certificadas en nuestro país, recomienda «revisar los productos y la comida que se tiene en casa utilizando el método de Marie Kondo con el objetivo de comprar lo necesario con calma y sin dejarse arrastrar por el pánico generalizado».
5 consejos para no arrasar en el supermercado
1. Recolocar y realizar un inventario. Invertir el mismo tiempo que pasaríamos comprando en el supermercado sin planificación en casa sacando todo lo que tenemos en los armarios y en el frigorífico. «Lo que tengamos guardado en el congelador se puede quedar donde está, simplemente se realizará un inventario. Se trata de ser consciente y tener una visión global de toda la comida y productos que tenemos en casa», explica la Sara Etxebeste.
2. Seleccionar productos. Hacer una selección desechando los productos caducados o los que se compran de manera excepcional y, sin embargo, sabemos que no vamos a consumir jamás.
3. Organizar por similares. «Una vez que tengas claro todo lo que quieres guardar, es el momento juntar los productos iguales o similares entre ellos», comenta Sara Etxebeste. ¿Cuántos paquetes o botes de cereales tienes? ¿Y de legumbres? ¿Cuánta verdura, fruta o otros productos frescos tienes en el frigorífico? Así tendremos claro en la cabeza que tenemos varias unidades del mismo producto antes de comprar más.
4. Ordenar los productos. «Un espacio ordenado en el que las encimeras estén despejadas y limpias invita a cocinar, e incluso, despierta la capacidad creadora que tenemos todas las personas» afirma la consultora. Por tanto, volver a colocar y ordenar los productos en los armarios y el frigorífico, pero esta vez, de manera ordenada, no es una pérdida de tiempo. Para encontrarlos fácilmente, propone juntar los productos parecidos entre ellos, por ejemplo: los cereales y legumbres cerca, las conservas en otra balda o caja aparte, los líquidos en otra sección, las semillas y especies pueden ir juntos. Lo mismo en el frigorífico, donde en cada balda se podrán colocar los productos según su similitud o categoría.
5. Planificar las comidas y cenas. La última recomendación consiste en tener a mano la lista de todo lo que se tiene en casa para pensar combinaciones diferentes y planificar todas comidas posibles. «Estoy segura de que con un poco de imaginación a todo el mundo se le pueden ocurrir miles de variantes para aprovechar al máximo todo lo que tenemos en casa», apunta Etxebeste.
Si aún así alguien necesita ir de compras, lo ideal es hacer una lista exacta de los productos y las cantidades que se necesitan. De esta manera «se evitarán compras improductivas, los excesos y dejar al resto de personas (que quizá tengan más necesidad) sin las provisiones indispensables. Al fin y al cabo, se trata sencillamente de mantener la calma, utilizar el sentido común y respetar las necesidades propias y de las personas que están a nuestro alrededor», explica Sara Etxebeste.
Marisol Nuevo Espín
Asesoramiento: Sara Etxebeste. Organizadora y una de la tres consultoras del método KonMari certificadas en España.
Te puede interesar:
– La compra en el supermercado, una oportunidad para aprender
– Ordenar no es lo mismo que recoger
– Niños ordenados, cómo educar en el orden