La comunicación es la base para crear un buen ambiente en casa. Si no se comparten estos momentos, si no se sabe hablar para transmitir emociones y pensamientos, al final todos nos volvemos unos desconocidos. Por no hablar de que la resolución de conflictos puede ser muy difícil y, de cualquier grano de arena, puede hacerse todo un mundo que enrarezca el ambiente en el hogar.
Una buena idea puede ser poner en marcha mecanismos de comunicación asertiva dentro de la familia. Un modelo que la psicóloga Fernanda Aliseda define como una «forma de convivencia que es capaz de determinar la calidad del funcionamiento del hogar como un equipo. Si se pone en práctica reduce la tensión y es capaz de influir positivamente en la interacción con otros grupos.
¿Qué es la comunicación asertiva?
La comunicación asertiva, dentro de la familia, es la capacidad que tiene cada miembro de expresarse de forma libre y honesta dentro del hogar, siempre desde el respeto a l resto de integrantes. Se alcanza a través del diálogo en el que se transmite un mensaje claro de lo que se desea expresar. Gracias a ella se alcanza una comprensión real entre todos y se consigue una relación funcional.
Estos son los principales beneficios de la comunicación asertiva:
– Ayuda a la resolución de problemas. Permite que los integrantes de la familia puedan llegar a acuerdos y resolver diferencias de forma rápida y eficaz.
– Fomenta la autoestima. La sensación de ser escuchados, respetados y valorados refuerza el amor propio y la autoconfianza de los miembros de la familia.
– Confianza. Cada uno de los miembros de la familia se siente aceptado y capaz de expresarse de forma honesta.
– Armonía. La capacidad de dialogar abiertamente sobre los problemas y definir normas claras favorece un ambiente de equilibrio y tranquilidad.
¿Cómo practicar la comunicación asertiva?
Estos son algunos consejos con los que poner en marcha la comunicación asertiva dentro del hogar:
– Tareas concretas. Es indispensable comunicar a los hijos de forma concreta cuáles son las normas que se deben respetar en casa y las responsabilidades que se deben cumplir.
– Toma de decisiones conjunta. A la hora de tomar decisiones hay que involucrar a todos los miembros de la familia, al menos tenerlos presentes en la reunión donde se tomen decisiones.
– Hacer pedidos o sugerencias. Para que todos los miembros de la casa expresen sus opiniones, deben ser respetados y tenidos en cuenta.
– Hacer uso del lenguaje no verbal. No solo es necesario hablar, también hay que acompañar con el lenguaje no vernal, atendiendo al gesto adoptado, la actitud y tono de voz.
– Actuar con coherencia. Hay que prestar atención y que las actitudes y decisiones que se estén tomando sean adecuadas a lo que también se ha pedido a los hijos.
Damián Montero
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