La llegada de un bebé suele ser una experiencia, sin duda, singular, pero a la vez maravillosa y gratificante como ninguna otra experiencia, y también agotadora y estresante. Ser padres es un acontecimiento único en la vida de cualquier persona. De hecho, en lo que coinciden la mayoría de los papás que ya tienen a su bebé en los brazos es que un hijo te cambia la vida definitivamente.
Y precisamente, esto es lo que acaba de confirmar el último estudio que ha elaborado la plataforma internacional Sitly, que pone en contacto a familias con cuidadores infantiles. Esta investigación, que ha tomado el pulso a los padres europeos, en España e Italia se registran los niveles de estrés paternal más altos de toda la Unión Europea.
Concretamente, un 33% de los españoles asegura estar constantemente estresado desde que ha tenido hijos, al mismo tiempo que un 34% de los italianos afirma encontrarse en la misma situación.
Justo en la otra cara de la moneda se sitúan los países del norte de Europa, donde estos porcentajes descienden considerablemente. Llama la atención que Noruega, con uno de los índices de natalidad más altos de la Unión Europea, el porcentaje de estrés sea muy bajo, sólo un 11% de los padres afirma estar estresado. De cerca, le siguen Finlandia donde solo el 22% de los padres aseguran sentirse más estresados desde que son padres y Dinamarca donde el este nivel llega al 28 por ciento.
La razón de esta diferencia entre el norte y sur es, en palabras de Patricia Adam, responsable de comunicación de Sitly, «el apoyo económico y social que se presta a las familias en los países nórdicos, donde las medidas para conciliar vida laboral y familiar son una apuesta clara, vendría a explicar esta diferencia». En cuanto a medidas de conciliación, España sigue estando en el vagón de cola. La reciente ampliación del permiso de paternidad, junto con la baja de maternidad de 4 meses, sigue resultando escasa para la mayoría de familias.
La reducción de jornada laboral, ¿una solución?
Con la llegada de un recién nacido, las parejas se sientes desbordadas y a medida que su hijo/a va creciendo, cada vez cuentan con menos tiempo para sí mismos porque sus horarios giran en torno a los de sus niños. La dificultad generalizada de compatibilizar los horarios de una guardería o colegio con las largas jornadas laborales se une al hecho de que algunos padres no pueden contar con ayuda familiar, y deben optar por un canguro o niñera. Para muchas familias, la solución pasa por la reducción de jornada laboral para el padre o la madre.
Precisamente, este inconviente empeora en verano, durante las vacaciones y muchos son los padres que se lamentan de la falta de coherencia entre el calendario escolar y sus vacaciones laborales.
De hecho, según el estudio sobre el año escolar de Eurydice, Red europea de información sobre Educación, los alumnos españoles tienen entre 10 y 11 semanas de vacaciones en verano, lo que nos coloca casi a la cabeza de Europa. Un 52% de los padres españoles asegura haber pensado en reducir su jornada laboral en algún momento, por no encontrar una opción de cuidado infantil que se adaptara a sus necesidades. Y un 43% hubiera preferido pedir una excedencia, si hubiera tenido la posibilidad, para poder estar con sus hijos. Sin embargo, la mayoría de padres tiene claro que nunca renunciaría a su carrera profesional por tener hijos (un 65% de los encuestados).
Prioridades y cambio de hábitos
Ampliar la familia no solo puede transformar la vida laboral de los padres, en lo social también se notan cambios. «Los padres encuestados se lamentan de la falta de tiempo y energía en general. Las salidas nocturnas son más escasas y dejan de ser espontáneas porque tienen que planearse con antelación. El principal motivo es que dejar a los niños al cuidado de un familiar o una niñera debe organizarse con cierto margen», explican desde la plataforma.
Así un 52% de los padres españoles asegura tener menos ganas de salir por la noche tras la llegada del primer hijo. Le siguen los holandeses con un 48%, los italianos y noruegos también se quejan de este aspecto, ambos con un 47%. Sorprende la respuesta de los padres finlandeses, casi ocho de cada diez afirma contar con menos ganas de salir los fines de semana desde que han tenido hijos.
Cambios en la relación de pareja
Todos los padres coinciden en que están mucho más cansados desde que tienen hijos y se lamentan de no poder dedicarle más tiempo a su pareja. Tener una cena romántica o encontrar oportunidades para la intimidad sexual es más complejo con niños en casa.
Afrontar las dificultades que plantea el reto de educar y ver crecer a un hijo no es tarea fácil para la mayoría de parejas. Así, un 37% de los padres españoles asegura que su relación ha empeorado tras tener hijos. Algunos progenitores confiesan incluso envidiar a otras parejas que no son padres, un 16% de los progenitores en el caso de España.
Te puede interesar:
– ¿Cuánto cobra una niñera en España?
– Compartir niñera, nueva fórmula de ahorro para las familias
– Elegir niñera, cómo buscar y seleccionar a una buena cuidadora