El confinamiento hizo que las familias se enfrentasen a una situación nunca antes vista y en la que se incrementó el tiempo que pasaban juntos. Antes había que esperar a las vacaciones para que los miembros de un hogar pudieran verse durante tanto tiempo, pero a esta situación había que añadir el encierro con el fin de garantizar la seguridad sanitaria, impidiendo actividades de ocio de puertas para afuera.
A priori, el primer resultado de esta situación parecía ser el conflicto entre los miembros de un hogar. Ahora, desde el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) se han lanzado los datos sobre cómo creen, las familias, que se vieron afectadas por este encierro. Y, según los datos del estudio Efectos y Consecuencias del Coronavirus, lejos de causar daño en el vínculo, este se ha reforzado.
Mejora en las relaciones familiares
Los datos del CIS señalan que el 22,3% de los españoles afirma que su relación con su familia mejoró durante el confinamiento. Un 17% afirma que es este refuerzo se produjo con la pareja. Un 55,7% indica que no aprecia diferencia respecto antes y un 6% opina que este trato ha empeorado durante el encierro sanitario del coronavirus.
Si la pregunta se extiende fuera del hogar, el 15,3% explica que su relación con amigos empeoró, mientras que un 70% reconoce que no hubo cambios en este sentido. En cuanto a su trato con los vecinos, un 72% de los encuestados opina que el confinamiento no supuso alteración alguna y un 20% destaca un incremento en la calidad de este vínculo.
Las videollamadas fueron la herramienta preferida para mantener el contacto con los familiares y amigos, siendo empleada por el 80% de los participantes en este trabajo. Por otro lado, el 83,6% de los entrevistados indica que estuvo más atento al estado de los miembros de su familia y el 73,4% incrementó el intercambio de mensajes y fotos en sus aplicaciones móviles.
Actividades de las familias en confinamiento
El 71,5% de los participantes señala haber visto más series o películas que en su vida anterior y un 60% ha leído más libros, mientras que un 76,2% reconoce haber incrementado su atención a las noticias. Un 38,1% explica que ha utilizado más juegos de mesa con sus familiares o pareja. Por otro lado, un 46,1% reconoce haber incrementado su presencia en videoconferencias.
Un 29% indica que gracias a estas actividades se han sentido «algo mejor» y un 31,4% reconoce que en algunos momentos su estado de ánimo mejoró, pero en otros empeoró. Un 15% no apreció cambios y un 3,7% «algo peor». Por su parte un 30,5% indica que han podido aprovechar este tiempo para realizar labores pendientes y un 22,1% se han sentido más útiles y un 10,2% afirma que esta sensación se debió a pasar más tiempo con su familia.
Damián Montero
Te puede interesar:
– Fernando Sarráis: «En el confinamiento, hay que llevar el sufrimiento con buen humor»
– La desescalada de los adolescentes: cómo prevenir conductas de riesgo
– Hélène Colinet: «Hay que pensar en cómo llevar de manera online lo que estamos haciendo en clase»