Begoña Pérez es Bego, la Ordenatriz, una madre de siete hijos y experta en Decoración de Interiores, que se ha convertido en la influencer de referencia en el tema del orden, limpieza y gestión del hogar a través de Instagram, donde acumula más de medio millón de seguidores, (https://www.instagram.com/la_ordenatriz/).
Con la recesión que viene y que ya está pisándonos los talones, tendremos que pensar en dar una segunda vida a todo lo que tenemos, algo que al mismo tiempo, contribuye a cuidar al medioambiente. Y es que su filosofía es: «Enfócate en reutilizar en lugar de sustituir», porque no hay nada más respetuoso con el medio ambiente que reutilizar. En última instancia, lo más ecológico es «salvar» la prenda o el objeto que estamos limpiando. Muchas de las personas que le siguen en redes sociales han reconocido que han conseguido «salvar» cosas que estaban destinadas a terminar en la basura.
Acaba de publicar su primer libro Limpieza, orden y felicidad, (Planeta), donde podemos encontrar los tips más top para manchas, olores, organización, limpieza y restauración de mobliliario. Si quieres saber los múltiples usos que tiene la laca o el agua micelar para recuperar prendas de ropa y objetos, no te pierdas las ideas de la Ordenatriz, y sus consejos como madre e interiorista para organizar una casa con niños.
Educar en el orden proporciona autonomía a los niños
Limpieza, orden y felicidad es el título de tu libro. ¿Por qué empezar por la limpieza y seguir con el orden para sentirnos felices?
En mi proceso de aprender más sobre el orden, vi que cuando yo quería ordenar, siempre había cosas que estaban sucias y algo no puede quedar ordenado si no está limpio. Entonces, me puse a ver qué trucos eran más eficaces, más rápidos, y sobre todo más prácticos porque yo soy súper práctica. Luego cuando lo tengo todo limpio y ordenado siento paz, sí me da paz, no me pone de los nervios y por eso hablo de felicidad.
¿Qué has trasladado de tu etapa de interiorista a tu etapa de Ordenatriz?
Muchas cosas como por ejemplo la visión de espacios. Generalmente acumulamos mucho, porque a veces que nos gustan muchas cosas de decoración, pero no pensamos en la practicidad. Por ejemplo, esa mesa, a lo mejor es muy bonita, pero quizás no me sirve porque es muy grande para el espacio que tenemos o al contrario, es muy pequeña y no cabemos todos. Otro tema es la durabilidad de los materiales y saber qué productos de limpieza puedo utilizar y cuáles no.
Y ¿cómo te ha ayudado esta etapa de Ordenatriz en tu vida?
Esa última etapa me ha ayudado a conectar con la gente, pero además ha tenido una carga emocional muy importante, porque todo esto me ha servido para superar una pérdida, la pérdida de mi padre. Cuando yo caigo en ese duelo, que gracias a Dios fue una cosa sana, empiezo a entender que la vida es un proceso. Al abrir la cuenta de Instagram y darme a conocer como organizadora profesional, entendí la red social como una red personal. O sea, soy Bego, y estoy ayudando a resolver la consulta que me están haciendo ahora mismo. No me daba tiempo a responder a todas. Estuve obsesionada hasta el año pasado. Me tiraba el día entero, pero el día entero, literal, para responder a todo el mundo. Entonces, vi que no llegaba, me agobiaba mucho y tuve que plantarme y replantearme la situación. Yo creo que la gente, gracias a Dios, lo entiende y conoce que solo hay una persona detrás que no le da tiempo a todo, aunque lo intenta.
Como madre de 7 hijos, ¿cómo les has educado en el orden para que cada cosa vuelva a su lugar?
Cuando hablo de edades, debemos pensar que no necesito lo mismo a los quince años que a los veinticinco. Esto está muy relacionado también con el apego que tenemos a las cosas, porque hay veces que pensamos que cualquier tiempo pasado fue mejor, pero no es cierto. A mis hijos les he ido educando poco a poco en el orden con paciencia. Es cierto que al dedicarme a esto, me he dado cuenta que lo primero de todo es pensar, pararse y pensar. Parece una obviedad, pero vivimos tan acelerados que no tenemos tiempo para paramos a pensar y muchas veces se nos echa el problema encima.
Y la cuestión es que si yo quiero que mis hijos sean autónomos deben ser ordenados.
Queremos que tengan su vida, no la mía y su orden no es el mío. Por eso, si te das cuenta, estoy hablando de cada uno con su carácter. Tengo hijos ordenados y tengo otros que no tanto. De todos es sabido que tengo de todo, pero es cierto que cuando yo me focalizó en el orden y la limpieza, empiezo por el armario y a la altura de cada uno. Esto va unido a la decoración, a buscar cómo me sale más barato y así voy levantando el armario para que un día quepa un vestidito o un pantaloncito y cuando lleguen a los quince años, que ya tienen la altura de un adulto, podamos ir subiendo las baldas.
¿Qué aporta a los niños el orden y cómo les amuebla la cabeza?
Sabemos que si tenemos una mente estructurada nos va a ir mejor y vamos a tener más criterios para elegir. Si a los niños les damos autonomía, ellos se van a ver capaces de ordenar si saben cómo devolver cada cosa a su lugar. Por ejemplo, si han estado jugando con los muñecos, con el escalextric… cuando terminen sabrán dónde guardarlo si saben dónde colocarlo. Así luego, al día siguiente, sabrán dónde encontrarlo. Entonces, si seguimos una rutina con orden, con disciplina y mucha paciencia lo podrán gestionar. No se trata de ser perfectos ni de que sean perfectamente ordenados…. ha habido veces que me encontrado zapatos en papeleras. Pero es verdad que la autonomía les da mucha seguridad a los niños.
¿Qué trucos nos puedes dar para limpiar los juguetes de los bebés y de los niños?Siempre tenemos que pensar en el material del juguete. En general, lo mejor es limpiar los juguetes de plástico e incluso de madera en la bañera con agua y jabón. Después hay que tener mucho cuidado y secarlos bien al aire para que no queden restos de agua en su interior y salga moho. Los peluches suelen almacenar muchísimo polvo y recomiendo meterlos en la lavadora. Hay algunos que son tan grandes que no caben y si hay que lavarlos a mano en la bañera, yo me iría a la famosa fórmula mágica de la que hablo en el libro, pero como estamos hablando de niños hay que aclararlos muy bien, porque esa fórmula lleva jabón y amoniaco.
¿Cómo organizar los juguetes en el cuarto de los niños?
Esta pregunta, parece que no, pero es muy complicada porque el exceso de juguetes puede complicar el orden y también la limpieza. El problema es que el exceso dificulta el orden, sobre todo a los niños, que no van a poder mantener ese orden, y entorpece la limpieza debido a la enorme cantidad de objetos que acumulan polvo y suciedad. Por otra parte, muchas veces les ofrecemos tantos juguetes, que no saben cuál elegir. Somos los padres los que debemos ofrecerles los que más les puedan gustar, por ejemplo, si es más artista, invierte en lápices, pinceles, en un buen babi y unos buenos plásticos para forrar la habitación y que pinte lo que quiera para desarrollar su creatividad. Si le gusta leer, invierte en libros y si le gusta jugar con muñecas, invierte en muñecas. Pero no podemos invertir en todo porque ni la casa ni la economía lo aguanta todo, creo yo. Bueno, igual hablo desde mi punto de vista, de una casa con siete hijos, donde además yo diría que hay que enséñales a cuidarlos y mantenerlos.
Los niños tienen que valorar las cosas y si les damos mucho, no van a saber valorarlo.
Y ese es nuestro papel, no van a ser más felices por haber tenido demasiado. Me estoy metiendo en camisa de once varas, pero tenemos que ser muy cuidadosos.
¿Qué hacer, sobre todo en Navidad, cuando llegan los juguetes nuevos?
Si pensamos que tenemos un exceso de juguetes, podemos aprovechar que estamos en Navidad para enseñar a los niños que hay gente que no se lo puede permitir. Vamos a donarlos con ellos para que los niños se hagan partícipes de ese proceso. No sé si mucha gente lo ha hecho, pero cuando nos metemos con nuestros hijos a ordenar juguetes en Navidad y les decimos: «este año vas a tener tres juguetes nuevos, así que elige tres del año pasado para donar». Es maravilloso. Se desprenden inmediatamente muchísimo antes que los mayores, si no intervenimos, es decir, si no les decimos cosas como «éste te lo regalaron los abuelos. Pobrecitos, es que tienen muchísima ilusión» o «Esto te lo he regalado yo, y me costó un pastón».
Un consejo especial para las mamás primerizas, ¿cuáles son los mejores trucos para lavar la ropa de bebé?
El primero es que la ropa nueva hay que lavarla antes de ponérsela a nuestro bebé y yo diría que toda la ropa nueva porque si yo te contara cómo están los almacenes* Nos parece que está limpia, pero hay que lavarla. Hay gente, como yo antes, que no lavaba la ropa por estrenarla inmediatamente, sí, hay que lavarla. Y la del bebé, desde luego, separada de la de adultos, por lo menos hasta los seis meses porque a los seis, siete, ocho meses ya empiezan a gatear. A partir de esa edad tenemos que favorecer el fortalecimiento de su sistema inmunitario. No quiero decir con esto que anden en la sociedad, sino que la limpieza de su ropa puede formar parte de la colada familiar.
¿Y con respecto a manchas en la ropa de bebé?
Las manchas en la ropa de bebé son muy complicadas, sobre todo, los escapes de pañal. Normalmente, esa orina, por ejemplo, no huele nada y no tenemos que actuar, no tiene nada que ver con la de un adulto enfermo. Pero las manchas del otro escape o de un potito, un puré con zanahoria que deja todo naranja y que no hay manera, el truco es bicarbonato y agua oxigenada, media hora y a lavar. También tenemos que saber que el agua oxigenada, es también el percarbonato, que es el agua oxigenada sólida, y que hay que aclararlo bien. Desde mi cuenta estoy intentando enseñar a la gente, porque los españoles gastamos muchísimo en detergente. Por ejemplo compro el detergente especial para el bebé, para lavar la ropa por separado, y luego hago el cutre y lavo la ropa en una hora. Pues no, la ropa que hay que lavarla en dos horas, incluso en tres horas para aclararla bien, si se ha usado agua oxigenada o percarbonato.
¿Es posible utilizar productos de limpieza en casa que no ensucien el medio ambiente?
Bueno, aquí igual doy una mala noticia, pero yo creo que todos ensuciamos el medio ambiente. Yo intento ser lo más ecológica posible y por eso uso el agua oxigenada, bicarbonato, vinagre blanco de limpieza… son elementos naturales, pero eso no significa que no dejen restos y ensucien el planeta. El jabón también ensucia y es natural también. Desde el punto de vista de la ecología tenemos que pensar qué compensa más. A lo mejor usar amoniaco no, lejía tampoco, pero puedo mantener esa camiseta en lugar de tirarla al medio ambiente. En el libro hablo de cómo librar esas batallas.
¿Qué producto de limpieza consideras imprescindible para tener en casa?
A parte de una buena bayeta de microfibra, que atrapa muy bien el polvo y la suciedad gracias a su capacidad electrostática, podemos limpiar muchísimas cosas solo con agua. En lugar de utilizar el típico aerosol de muebles, solo agua. Este truco lo conocí en mi época de interiorista, ya que todos los carpinteros y ebanistas me decían que los muebles de madera necesitan cierta humedad. Incluso es verdad que parece que retarda la aparición del polvo, porque si ponemos una capa de grasa sobre otra llega un momento en que, al ser la madera porosa, tenemos el mueble con polvo y grasa incrustada y hay que utilizar de todo para dejarlo limpio, que oxigene y respire. Otro producto que no falta en mi casa es la laca. No es ecológico, pero a lo mejor es más ecológico utilizar la laca para quitar esa pintura del sofá y no tenerlo que tirar.
Marisol Nuevo Espín
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