Tu embarazo semana a semana va llegando a su fin. Cada vez está más cerca el momento del parto, por lo que esta semana 38 deberás prestar especial atención a las contracciones y a si rompes aguas; ten en cuenta que solo el 5% de los bebés nace en la fecha prevista, el resto se adelantan o atrasan. Será la oxitocina lo que determine concretamente el momento del parto.
Cambios en la embarazada: la semana 38 de gestación
Tu tripa sigue aumentando, aunque varía en tamaño dependiendo de la mujer, y tu cansancio sigue incrementándose.
A partir de la semana 37 de embarazo, y a lo largo de este último mes puede producirse el desprendimiento del tapón mucoso que bloquea la entrada al útero y protege al feto frente a los posibles gérmenes de la vagina. Si aún no lo has notado no te preocupes, hay mujeres que no lo expulsan hasta el mismo momento del parto.
Otros síntomas de las semanas anteriores se repiten:
1. Mejoran tu respiración y tu digestión gracias al descenso del útero. Por el contrario, las ganas de orinar siguen siendo frecuentes y se reproducen algunos dolores punzantes y calambres en las ingles y piernas.
2. El pecho sigue segregando calostro.
3. Los tobillos y pies se hinchan.
4. Sigue siendo difícil conciliar el sueño toda la noche seguida.
Desarrollo del bebé en la semana 38 de embarazo
Tu bebé ya puede incluso superar los 3 kilos de peso y alcanzar el medio metro de estatura (estas medidas son muy variables, depende de cada mujer y feto). Tras la formación definitiva de los pulmones y el cerebro, el bebé ya está listo para vivir fuera del vientre materno aunque seguirá madurando las próximas semanas y, por supuesto, una vez haya nacido. Además:
1. Su cabeza ya está cubierta de pelo, más o menos según el bebé concreto.
2. Gana fuerza en las extremidades, aunque estas permanecen flexionadas, y sobre todo en las manos.
3. Sus intestinos se llenan de meconio, que expulsará como primer excremento una vez nazca. Recordemos que el meconio es una pasta negra o verde muy oscura formada a partir del lanugo y el líquido amniótico que el bebé ha ido bebiendo las semanas pasadas.
4. Se incrementan sus niveles hormonales, lo que contribuirá a mantener los niveles de presión sanguínea y glucosa después del nacimiento.
Como curiosidad, aunque el color de pelo y el de los ojos no están definidos aun, los especialistas explican que, por razones de pigmentación, aquellos bebés que nacen con los ojos marrones permanecen con los ojos marrones, mientras que si el bebé nace con los ojos de color gris o azul oscuro, es posible que se le queden grises o azules o que se vuelvan verdes, de color miel o incluso marrones.
La salud de la embarazada en la semana 38 de gestación
Lo más importante en esta semana 38 de embarazo es que cuides la higiene de las partes íntimas, sobre todo, de cara al parto. En este sentido es esencial que estés atenta a la expulsión del tapón mocoso, ya que desde ese momento tu útero queda más vulnerable ante posibles infecciones. Por ello se recomienda que, en estos casos, se eviten las relaciones sexuales y los baños prolongados.
En estas últimas semanas de embarazo es posible también que sientas más hambre de lo normal, prueba a saciar el apetito con una pieza de fruta u otros tentempiés ligeros y saludables. Además de la alimentación, no descuides el descanso, fundamental para coger fuerzas para el cercano parto. Aprovecha para dormir la siesta, arreglar el cuarto y hacer otras cosas que no podrás hacer cuando haya nacido tu bebé.
Control del embarazo en la semana 38 de gestación
El médico estará vigilando con frecuencia tu embarazo, los síntomas previos al parto como la dilatación del cuello (comprobando que color del líquido amniótico es transparente) y el óptimo desarrollo del bebé. Para ello, además de distintos exámenes ginecológicos y ecográficos, llevará a cabo una monitorización del bebé (registro cardiotocográfico para anotar los latidos del corazón del bebé y las contracciones del útero) y, si hiciese falta, una amnioscopia para visualizar la bolsa amniótica.
Recordamos de nuevo que en esta semana 38 de embarazo es muy importante que estés atenta a las señales que indican el inicio cercano del parto:
– Contracciones regulares cada 5 o 10 minutos que van aumentando de intensidad a medida que pasa el tiempo.
– Pérdida de líquido amniótico, es decir, lo que comunmente se conoce como «romper aguas».
– Sangrado similar a una menstruacción.
– Disminución de movimiento fetales.
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