El embarazo es una delicada etapa en la que muchos factores entran en juego para asegurar un buen estado tanto a la madre como al bebé que se está gestando en el vientre de la mujer. Alimentación, descanso, estrés, estos son algunos de los puntos que deben vigilarse para prevenir problemas tanto en el presente como en el futuro del niño una vez que haya llegado a este mundo.
Un ejemplo es la ansiedad en el embarazo. Un problema que de aparecer puede tener importantes efectos en el desarrollo emocional de los más pequeños o en la conducta presente en la infancia. Desde el Servicio de Psiquiatría, Psicología y Medicina Psicosomática del Hospital Universitario Quirón Dexeus se recogen varios efectos negativos de esta sensación de desasosiego en las mujeres gestantes.
Efectos de la ansiedad
Los efectos de la ansiedad en el embarazo se relacionan con el efecto neurotóxico del cortisol materna, hormona con un fuerte vínculo con el estrés. Ésta es capaz de atravesar la placenta, y de producir posibles cambios epigenéticos, modificaciones sobre los genes del feto. La investigación todavía no ha determinado cuáles son y quedan por determinar.
Lo que sí se ha observado es que estos efectos cambian dependiendo de la edad gestacional. Ese hecho se explica desde la teoría de la programación fetal, que mantiene que los sistemas neurobiológicos se programan para la vida adulta en función de las características del ambiente durante períodos muy específicos del desarrollo prenatal. Las investigaciones definen dos momentos de mayor vulnerabilidad: el embarazo precoz, semanas 12 a 22 semanas, y la semana 32.
Estos en estos momentos en donde la ansiedad puede alterar el desarrollo del niño y dando lugar a problemas como:
– Parto prematuro. La investigación ha encontrado una relación entre una alta ansiedad materna y una mayor prematuridad.
– Bajo peso al nacer.
– Retraso de crecimiento fetal.
– Malformaciones congénitas. Los sucesos estresantes durante el primer trimestre de embarazo pueden incrementar en ocho veces el riesgo de malformaciones menores, como el labio leporino.
– Efectos sobre el neurodesarrollo en el feto:
Problemas de atención e hiperactividad que aparecen de los 5 a los 14 años.
Problemas de conducta
Menores puntuaciones en los indicadores de desarrollo intelectual, algo que queda claro en la intensidad a las habilidades lingüísticas.
Prevención del estrés en el embarazo
Dados los efectos negativos del estrés en el embarazo, se hace evidente la necesidad de combatirlo durante este tiempo para evitar todos estos problemas. Estos son algunos consejos desde la American Pregnancy Association:
– Descubrir los desencadenantes. ¿Qué es lo que ocasiona la ansiedad en las madres? ¿Se pueden evitar estas situaciones?
– Descansar. El agotamiento y la falta de sueño son dos desencadenantes de la ansiedad. Hay que asegurar que la madre descansa en este periodo.
– Ejercicio. Nada de quedarse en casa, hay que salir a la calle, practicar ejercicio (siempre teniendo en cuenta la situación) y evitar la ansiedad que provoca quedarse entre las 4 paredes de siempre aparezca.
Damián Montero
Te puede interesar: