¿Alguna vez un conductor no te ha dejado pasar en un paso de peatones? ¿Has visto a gente cruzando una calle cuando no deben? Todo esto es fruto de falta de educación vial, algo esencial en nuestra sociedad pero que no todo el mundo respeta. Por ello, la iniciativa Ponle Freno pide que incluya la educación vial como asignatura obligatoria en los colegios.
Según destacan desde esta iniciativa de Antena 3, Onda Cero y Europa FM, «educar en seguridad vial es educar en valores», por lo que se han puesto como su «gran causa de 2015» lograr que el Gobierno incluya la educación vial en las escuelas como asignatura, pues hasta ahora ha estado incluida en el marco de diferentes programas de apoyo.
La educación vial, esencial para pequeños y mayores
«De la misma manera que a los pequeños y los jóvenes se les forma en normas básicas de convivencia frente a los demás como ciudadanos, en el plano de la Seguridad Vial se debe concienciar a los alumnos en sus fases de educación obligatoria de la importancia de observar unas normas básicas de utilización de la vía«, argumentan.
En este punto, desde la iniciativa explican que quieren enseñar a los jóvenes cómo deben portarse en su faceta como peatones, pero también como usuarios de vehículos: desde la bicicleta al coche con el cinturón de seguridad, pasando por las motos y, por qué no, el transporte público.
El tráfico es ya un acompañante en nuestra vida diaria, y saber convivir con él se hace esencial para lograr una actitud preventiva y segura ante él. Por ello, no sólo se quieren dar a conocer las normas de circulación, sino que se pretende explicarlas a través de la Educación vial en las escuelas para que los niños, jóvenes (y adultos del futuro) comprendan por qué son necesarias.
La petición ya ha llegado incluso al Congreso de los Diputados. Ha sido CiU el que ha presentado una proposición no de ley, sumándose así a la iniciativa de Ponle Freno, que también ha llegado al Senado. El diputado de esa formación Jordi Jané ha recordado que somos todos los que podemos ser víctimas, y también todos podemos provocar un accidente, por lo que ha puesto de relieve la necesidad de formar en educación vial y que ésta se estudie en el colegio y sea evaluable para aumentar la seguridad de las familias al volante.
El debate está servido, ¿debe ser una asignatura obligatoria, o es trabajo de los padres educar a sus hijos a ser responsables en la calle y con el tráfico?
Ángela R. Bonachera
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