En ocasiones, centramos nuestra atención en hechos secundarios, olvidándonos de lo realmente importante. Está fábula, titulada Los dos conejos, enseña a los niños que los hechos importantes son los que de verdad requieren de nuestra atención y preocupación.
Las fábulas para niños son cuentos infantiles que resultan muy útiles para los padres a la hora de educar a sus hijos, ya que llevan una moraleja destinada a enseñar valores a los más pequeños.
Los dos conejos, una fábula sobre el valor de los hechos importantes
Por entre unas matas,
seguido de perros,
no diré corría,
volaba un conejo.
De su madriguera
Salió un compañero
y le dijo: «Detente,
amigo, ¿qué es esto?»
«¿Qué ha de ser?- responde:
Sin aliento vengo…
Dos pícaros galgos
me vienen siguiendo.»
«Sí, -replica el otro-
por allí los veo…
pero no son galgos.»
«Pues ¿qué son?» – «Podencos».
«¿Qué? ¿Podencos, dices?»
«Sí, como mi abuelo.»
«Galgos y muy galgos:
bien vistos los tengo.»
«Son podencos, vaya,
que no entiendes de eso.»
«Son galgos, te digo.»
«Digo que podencos.»
En esta disputa
llegando los perros,
pillan descuidados
a los dos conejos.
Los que por cuestiones
de poco momento
dejan lo que importa,
llévense este ejemplo.
Moraleja de la fábula Los dos conejos
¿Qué enseña a los niños la fábula infantil Los dos conejos? No debemos perder el tiempo en cuestiones sin importancia olvidando lo principal.