Vivimos en un mundo globalizado. Las nuevas tecnologías han roto las fronteras entre países y el mundo está más conectado que nunca. En este nuevo contexto se hace necesario el aprendizaje de un idioma que haga que todas estas zonas puedan comunicarse, el inglés se presenta como la mejor solución en este aspecto. De hecho en la actualidad esta lengua se ha convertido en un requisito imprescindible en todo curriculum.
Las nuevas generaciones se enfrentan al reto de aprender este nuevo idioma para conquistar el éxito profesional en el futuro. Pero, ¿les es fácil conseguir dominar estas destrezas, o les cuesta un mundo? Según el EPI-School a los jóvenes de España lo que más trabajo les cuesta es leer y escribir textos en inglés, mientras que la parte oral de esta lengua es algo que consiguen manejar con bastante rapidez.
Aprendizaje auditivo
Este estudio analizó los casos de alumnos de Educación Secundaria Obligatoria y Bachillerato. Los resultados destacaron que la mayoría de los estudiantes poseen un nivel de B1 muy cercano al B2 en la parte oral del idioma, mientras que a en las secciones de lectura y escritura la calificación queda en el A2. Según los responsables de este estudio, esta situación es resultado de la mayor facilidad que tiene aprender una lengua a nivel auditivo.
Para ello ponen el ejemplo del proceso de adquisición del habla en la lengua materna. Éste se da a través de un mecanismo de escucha por parte del niño que va integrando poco a poco palabras en su vocabulario, aprende su significado y las utiliza. Algo que sucede de forma intuitiva, mientras que posteriormente la escritura y lectura cuesta más y la transcripción de estas ideas al papel resulta más dificultosa.
Además, fuera del aula, el inglés es más fácil de practicar a nivel oral y de escucha que en lectura y escritura. Los jóvenes pueden conversar en sus momentos de ocio con otros alumnos extranjeros o con los de su propio país. Además, también hay que tener en cuenta la cantidad de series y películas que se encuentran a disposición de las nuevas generaciones en versión original y que permiten acostumbrar el oído a estas pronunciaciones.
Aprender otro idioma
Como ya se ha dicho, el aprendizaje de un nuevo idioma es un requisito que se ha vuelto indispensable en el futuro laboral de las nuevas generaciones. Estos son algunos consejos que se pueden emplear para el dominio del inglés o de cualquier otra lengua que el niño esté aprendiendo:
– Libros en otro idioma. Tal y como explica el estudio antes mencionado, existe una brecha entre el nivel oral y el de escritura o leído. En este punto se puede compensar regalando a los jóvenes libros en otro idioma para que vayan ganando soltura en estas cualidades.
– El juego de las tarjetas. Elige varias imágenes de distintos objetos: una comida, un mueble, juguetes, etc. y debajo de ellos escribe el nombre de estos artículos. Enséñaselos al niño y que este aprenda a reconocerlos, de esta forma sabrá cómo se escriben mientras de paso también practican la pronunciación.
– Las palabras básicas. Cada idioma cuenta con un vocabulario básico, el niño debe dominar en primer lugar estas palabras antes de ampliar su base de datos mental. La escritura de pequeñas redacciones empleando estos términos contribuirán a la mejora de sus destrezas idiomáticas.
– Campamento bilingüe. Llega el verano, las horas de ocio aumentan y en ocasiones se convierten en momentos realmente tediosos. Este puede ser un buen momento para decidirse por un campamento bilingüe en donde el niño se lo pase genial mientras aprende un nuevo idioma.
– Nada de timidez. En ocasiones el aprendizaje de un idioma se puede ver lastrado por la vergüenza. Esta timidez debe ser superada y animar al niño a practicar esta lengua en todos los sentidos, sin miedo a equivocarse. Establecer una rutina por la que día a día se afiancen un poco más estas nociones.
Damián Montero
Te puede interesar:
– Aprender idiomas: cómo fomentar la facilidad de los niños
– Los idiomas en España, ¿por qué nos cuestan tanto?