Categorías:

Innovación educativa: 10 claves para transformar el futuro

Tabla de contenidos

El mundo está cambiando de forma acelerada y la naturaleza de la innovación debe afectar a la educación porque solo a través de las nuevas generaciones podremos transformar el mundo. Pero, ¿qué implica la implementación de una verdadera innovación educativa?

Supone un cambio significativo en el proceso de aprendizaje, pero no solo en los métodos, en los contenidos y en los materiales de aprendizaje, sino también en la calidad de la enseñanza, en el valor del propio proceso de aprendizaje y sobre todo en la relevancia que la innovación va a aportar al sistema educativo.

10 claves para transformar el futuro educativo

Tomando como eje estos nuevos objetivos, éstas han sido las 10 claves o conclusiones que se han extraído del II Congreso de Innovación Educativa que se ha celebrado en el Palacio de Congresos de Zaragoza.

1. La transformación del mundo actual empieza en la escuela. Tanto es así que la innovación en el aula se ha convertido en la medida de la innovación de un país y de una sociedad.

2. El colegio debe ser un sitio lleno de aventuras en el que los docentes propongan retos para conseguir que, cuando las madres y los padres pregunten a sus hijos qué han hecho en el cole, estos no respondan: «Nada». En ese colegio caben y deben estar todos: docentes, familias y alumnado.

3. La innovación hay que compartirla con la comunidad educativa y crear ecosistemas innovadores. Con la suma se multiplican resultados.

4. El espacio puede convertirse en el tercer profesor. La arquitectura y el diseño son una herramienta para influir en la educación y pueden propiciar que el alumnado deje de ser pasivo en su aprendizaje y se active. El espacio debe generar motivación, no subordinación.

5. La mejor innovación es la que atiende a los que más lo necesitan. Hay que buscar el éxito de cada uno de los alumnos y personalizar el aprendizaje.

6. Debemos educar en el asombro porque el asombro es el motor del aprendizaje, es el que permite al alumnado conocer lo que les rodea. Para conseguirlo, es importante que los menores no estén sobreestimulados, porque esto satura sus sentidos y bloquea el deseo de conocimiento.

7. Hay que entrenar al alumnado para hacer preguntas, no solo para dar respuestas.

8. Innovar no significa siempre ser el primero. Hay que fijarse en las buenas iniciativas y extenderlas.

9. En las aulas siempre debe haber motivación y un ambiente positivo. El alumnado debe sentir que creemos en él, que su espacio escolar le hace sentirse feliz.

10. Lo más importante que hay en un aula son las personas. Hay que intensificar las relaciones humanas y generar conexiones fuertes entre docentes y alumnado.

La innovación educativa: algo impensable hace 5 años

Alfredo Hernando, psicólogo

El psicólogo e investigador Alfredo Hernando ha defendido que «el aula es el espacio donde empieza la transformación del mundo», en su ponencia ante el II Congreso Internacional de Innovación Educativa, que organiza el Departamento de Educación del Gobierno de Aragón en el Palacio de Congresos de Zaragoza.

«La innovación en el aula es la medida de la innovación de un país y de una sociedad. El aula es la máquina que tenemos para crecer como personas y como humanidad. La innovación educativa era algo casi impensable hace solo cinco años. El reto es conseguir la personalización del aprendizaje, para que cada alumno tenga su proyecto vital, ya que los alumnos son la medida de la innovación. No hay que confundir innovación con ser los primeros en hacer algo: innovación es crecer en resultados: copia lo que funciona en otros lugares, prueba, adapta, combina, transforma», ha recomendado el experto a los equipos de docentes que quieran innovar en el aula.

Alfredo Hernando dirige el proyecto escuela21.org, un viaje que le ha llevado a conocer y experimentar de primera mano con las escuelas más innovadoras de todo el mundo. Hernando es un explorador de la metodología del designthinking, la gamificación, los paisajes de aprendizaje, la integración tecnológica en el aula y la gestión de procesos de innovación y cambio en centros educativos. «En el año 2013 comencé este proyecto que es un laboratorio de innovación educativa, y lo que hago es viajar buscando escuelas innovadoras que están funcionando muy bien, que garantizan el éxito de todos sus alumnos con un mensaje positivo de cómo están logrando dar mejor para ellos, cómo lo hacen, cómo podemos aprender de ellas, comunicarlo y buscar la replicación entre escuelas y con equipos de profesores», asegura.

Está involucrado en distintos proyectos internacionales de innovación educativa con entidades como Fundación Telefónica, el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte de España o el proyecto de construcción participativa de una vivienda en Viena, con un fuerte componente social centrado en la integración de refugiados, la comunicación social media y la agricultura ecológica.

¿Cómo trabajar la innovación educativa?

«Lo primero es hacer natural el proceso de innovación y no confurdirnlo con un acto mágico o pionero, sino que es un acto de crecimiento. La innovación es sencillamente un proceso de cambio, que busca hacer algo de una manera distinta más o menos creativa, con evidencias de que funciona, y que la mayor parte del peso de esa transformación lo lleva un equipo de profesores con las familias de una comunidad y de una escuela y eso es lo que comparten la mayoría de escuelas que tienen éxito, es decir, lo que buscamos con la innovación no es trabajar en clase con más o menos dispositivos, más o menos idiomas, o más o menos pizarras… -añade Alfredo Hernando- lo que estamos buscando que todos los alumnos desarrollen un proyecto vital completo y a partir de ahí podemos combinar muchos elementos que van a garantizar el éxito entonces es como un equipo de profesores que cambia, mide, reajusta, vuelve a cambiar y se inicia un proceso que es una espiral continua de crecimiento para hacer una escuela distinta cada año, buscando la mejora».

Cómo caminar hacia el éxito escolar

Alfredo Hernando explica que «el fracaso o el éxito escolar, es decir, lo que explica el desarrollo de un proyecto vital más allá de la nota con los alumnos depende de tres grandes elementos: los factores socioeconómicos y culturales del país donde se encuentra el estudiante, la familia y la escuela. Por mucho que busquemos nuevas experiencias no podemos importar el sistema entero educativo de Finlandia o de Corea del Sur, lo que podemos importar son experiencias de éxito. Por tanto, lo que sabemos que funciona para hacer que alumnos en entornos de necesidad tengan éxito es trabajar de la mano con familias y educadores, es lo único que puede romper la brecha. Lo otro necesita de más agentes para que pueda obrar el milagro, pero es posible».

Marisol Nuevo Espín

Te puede interesar:

– El misterio de la innovación educativa

Enseñar a pensar, el pensamiento crítico de los niños

Puertas abiertas a la innovación educativa

Claves para reducir el fracaso escolar, según la OCDE

Otros artículos interesantes