La limpieza de los productos del bebé es algo muy importante para asegurar el bienestar de los más pequeños de la casa. Un buen ejemplo es el chupete, un artículo que puede causar en el niño distintos males, desde infecciones hasta contagio de enfermedades, si no se tiene una buena higiene. Ahora bien, ¿cuál es la mejor forma limpiar estos objetos?
La investigación realizada por el Henry Ford Health System de Detroit presenta una fórmula para mantener limpio el chupete del niño de la mejor forma posible. Según estos especialistas en salud infantil utilizar la saliva puede ser el mejor sistema para asegurar una correcta higiene en estos productos.
Limpiar el chupete con saliva: un gesto común
La caída del chupete, su recogida e introducirlo en la boca para limpiarlo con la saliva, es un acto reflejo que realizan los padres de forma casi automática. Un geste muy común y que además puede ayudar a mantener limpio este producto en los más pequeños. Es decir, lejos de ser una rutina que no se recomienda, quitar la suciedad de esta forma es algo que se aconseja.
El análisis de esta investigación contó con la presencia de 128 madres que fueron cuestionadas por la forma en la que limpiaban el chupete de sus hijos. De este total, 53 eliminaron la suciedad con jabón y agua, 30 hicieron lo propio hirviéndolo o utilizando el lavavajillas y 9 recurrieron a la saliva. Por otro lado, los responsables del estudio analizaron el nivel de anticuerpos en tres momentos: nacimiento, a los 6 meses y a los 18 meses.
Hacia los 10 meses ya se detectaron las diferencias entre los bebés que conformaban esta investigación. Aquellos niños cuyos chupetes habían sido limpiados con saliva presentaron mejores niveles de anticuerpos. Una relación que abre vías a nuevas fórmulas de investigación con el fin de encontrar las mejores técnicas para prevenir enfermedades en los más pequeños.
Así debemos limpiar el chupete del bebé
Los responsables de este estudio indican que hay que tomar con cautela estos resultados, a la espera de que nuevas investigaciones certifiquen esta relación causa-efecto. Al mismo tiempo, también se recuerda que otras fórmulas de limpiar el chupete también son efectivas a la hora de mantenerlo limpio. Desde Bebitus se ofrecen las siguientes técnicas:
– Esterilización por vapor. Estos esterilizadores producen vapor saturado de agua muy caliente que mata todos los microorganismos de forma segura. En función del aparato, la esterilización dura de 8 a 15 minutos.
– Esterilizadores para microondas. El principio es similar al de la esterilización por vapor. Sin embargo, la temperatura que se necesita para limpiar el chupete se genera en el microondas. La ventaja: los esterilizadores para el microondas son pequeños y prácticos. Es decir, son perfectos para llevarlos de viaje.
– Hervir los chupetes. Por motivos de higiene, usar siempre la misma cacerola. No utilizarla para cocinar otras cosas puesto que los residuos alimentarios podrían generar gérmenes que se acaban asentando en la misma.
– Limpiar el chupete y esterilizarlo con agua fría. Para este método se necesitan unas pastillas especiales. Dejar que se disuelva una pastilla completamente en un cuenco lleno de agua limpia. Introducir el chupete de manera que quede totalmente cubierto. Tapar el cuenco y tras 30 minutos ya se habrá eliminado la suciedad.
Damián Montero
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