Todos sabemos que la adolescencia no es una época fácil: se trata de una etapa de repleta de cambios físicos y psíquicos suele suponer un antes y un después en la relación entre padres e hijos. De entre todas las cosas que se «mueven» a lo largo de estos años de reajustes en la familia (tener un adolescente en casa), quizás hay una que suele estar presente en casi todos los casos: los estudios.
Fuente: El Confidencial