El tiempo pasa más rápido de lo que parece y llega el día en que nos piden permiso para salir por la noche. ¿A dónde? ¿Hasta qué hora? El miedo a que pueda pasarles algo o no sepan reaccionar ante cualquiera de los peligros de la noche puede invadirnos, pero seamos realistas, mejor aconsejarles para que sepan con qué se pueden encontrar que intentar encerrarles en una burbuja.
Salir por la noche e ir a discotecas es algo muy común entre los adolescentes. Entre los 15 y los 18 años, los adolescentes esperan con ansia ese momento ya que se sienten mayores y con más libertad. La noche, si se dan unos consejos previos a las primeras salidas nocturnas, es otro terreno que inevitablemente tendrán que explorar.
Aunque puede al principio los padres se muestren reticentes ante las salidas nocturnas de sus hijos, a una cierta edad es una realidad inevitable. Una prohibición rotunda no generará más que posibles mentiras por parte de los adolescentes y frustración. Se aconseja dar a estos adolescentes confianza para que abiertamente cuenten qué planes tienen en mente y no tiendan a mentir, o hagan la típica de «me quedo a dormir en casa de una amiga/o» y luego salgan.
Crear una sana comunicación entre padres e hijos unido a la importancia y valor de ser siempre sincero unos con los otros, es clave para que tus hijos crezcan en un ambiente sano y se de una confianza recíproca. De esta manera, se les debe hacer entender que si son sinceros con vosotros, os cuentan a qué discoteca quieren ir, con qué amigos van etc. vosotros seréis comprensivos y no les pondréis tantas trabas. Todo esto debe ir unido a una conversación sobre las precauciones que se han de tener por la noche. En el mundo nocturno, hay personas que no tienen buenas intenciones.
Dado que estos consejos son muy diferentes con respecto a tus hijos e hijas, se debe mantener una conversación distinta con cada uno. Algunos adolescentes corren el riesgo de meterse en peleas sin sentido por demostrar su valentía delante de sus amigos. Mientras que a las niñas se les debe advertir de la importancia que tiene no aceptar nunca copas de desconocidos. Y ambos explicarles lo peligroso que es el alcohol, una droga legal, pero que como las demás también crea dependencia.
Primeras salidas nocturnas de tus hijas
Cada familia debe decidir a qué edad permitir a sus hijos salir por la noche. Cuando llegue el momento, conviene advertir sobre una serie de cuestiones.
1. Nunca aceptar copas de desconocidos: las niñas quieren sentirse guapas, y si un desconocido les invita a una copa, ante su inocencia, podrán pensar que quiere ligar con ellas. Esto puede ser cierto, pero son muchos los casos en los que estas intenciones no son tan buenas. Aunque se piense «nunca me va a tocar a mí» este tipo de conductas se dan, por lo que es muy importante que lo interioricen.
2. No por enseñar más vas a estar más guapa: las adolescentes pueden asociar las mini faldas o escotes a la sensualidad. Debéis decirles que no por enseñar más se van a fijar más en tí. Algo parecido sucede con el maquillaje.
Primeras salidas nocturnas de tus hijos
Los chicos, aunque por supuesto deben tener cuidado con el alcohol y las copas, también deben ser precavidos con las peleas. En la adolescencia, muchos grupos de chicos piensan que por pegarse, las niñas pensarán que son más valientes. Conviene hablar con tus hijos sobre algunas cuestiones como:
1. La ira no se descarga en una pelea. Por lo general, la adolescencia es una época de encontrarse a uno mismo, llena de inseguridades y hormonas a flor de piel. Decidles a vuestros hijos que aunque alguien les empuje, o tenga ganas de entrar en una discusión, lo mejor es mantenerse al margen.
2. Las peleas pueden terminar peor de lo que uno cree. La agresividad física puede causar lesiones para toda la vida y causar traumas emocionales difíciles de superar. La noche no es un mundo oscuro en el que sólo ocurren calamidades. Se puede disfrutar mucho, reír y bailar, por lo que si tus hijos interiorizan estos consejos, las salidas nocturnas serán una fuente de diversión.
Consejos esenciales para hijos e hijas
1. Cuidado con el alcohol: en muchos ambientes el que más bebe es el más popular. Los hospitales reciben cada noche una gran cantidad de jóvenes en estado de coma etílico. Un adolescente que no está acostumbrado a beber, no va a tolerar bien el alcohol. Informar a vuestros hijos sobre este asunto es de vital importancia. La doctora Susana García Greciano sostiene que «en la adolescencia, las células se encuentran en pleno desarrollo con lo cual cualquier tóxico podría tener consecuencias nefastas en el futuro. El alcohol es un tóxico para el hígado que puede llegar a generar una cirrosis temprana que puede a ser mortal en la edad adulta o requerir un trasplante hepático».
2. Nunca deben subirse al coche de una persona que haya bebido: sucede muchas veces que después de las copas, los amigos se van a la discoteca de turno. Debido a la excitación del momento, los que han llevado coche lo acercan a la discoteca. Hacedles entender lo peligroso que es esto. Una persona que ha bebido no tiene los mismos reflejos que alguien sobrio.
3. Evitar decir mentiras: siempre ir con la verdad por delante y ser sinceros para comunicar en casa el lugar al que van a ir y con quién. Esta información es muy válida en caso de que ocurra algo indeseable.
Natalia Pérez García
Asesoramiento: doctora Susana García Greciano
Te puede interesar:
– Discotecas: el descubrimiento de los adolescentes
– Discotecas, un tipo de ocio con riesgo
– 16 años, la edad mínima para casarse
– Alcohol y adolescentes: consejos de la AEP para preveniir su consumo