Parece que ser padre es sinónimo de vivir preocupado, ¿verdad? Son demasiados los peligros (reales o infundados) que cada día pasan cerca de nuestros hijos. En concreto, lo que más preocupa a los padres españoles es el consumo de alcohol en niños, el uso de internet y de las redes sociales y los horarios de salidas.
Estas son las conclusiones del Barómetro de la Familia, un estudio realizado por Gad3 para The Family Watch a partir de 600 encuestas telefónicas. En él no cabe ninguna duda de qué es lo que más preocupa a los progenitores españoles: el 90 por ciento de los encuestados (prácticamente todos) se referían al consumo de alcohol en niños como algo que les quitaba el sueño.
Muy cerca de esto se situaba el uso de Internet como algo nocivo, señalado por el 82.5 por ciento de los encuestados. Además, ocho de cada diez ha mencionado el abuso de Redes Sociales como una de sus principales preocupaciones, seguida de los horarios de salidas de los hijos menores, que preocupa al 77,3 por ciento de los padres encuestados.
¿Se consume más alcohol?
Los encuestados se muestran muy preocupados por el alcohol porque, según los resultados de este barómetro, la mayoría tiene la impresión de que en la actualidad hay más consumo de alcohol entre los menores que hace una década (81,5%). No es lo único que ven peor: más de la mitad opina que los jóvenes también consumen más pornografía y el 51% afirma que también se consume más tabaco.
Mirando los resultados de este trabajo podemos ver a una generación de padres pesimista: la mayoría (el 62.5 por ciento) afirma que respecto a hace una década, ahora hay menos comunicación dentro de las familias, lo que desde The Family Watch relacionan con el resto de los problemas.
«La principal variable que explica el mayor consumo de alcohol entre menores de edad, los embarazos no deseados o el acoso entre menores va directamente relacionada con el diálogo de los hijos con sus padres», ha afirmado el presidente de Gad3, Narciso Michavila.
La responsabilidad de los padres
Los progenitores son conscientes de sus responsabilidades para con la educación de sus hijos. Por ello no es de extrañar que nueve de cada diez encuestados creen que deberían ser más estrictos con el consumo de alcohol. Asimismo, para más del 80% de los encuestados los padres deberían ponerse también más serios con el empleo de internet y las redes sociales y el 77,3% opina que habrían de ser más estrictos en los horarios de llegada a casa.
Sobre los motivos para la alarma con Internet también ha preguntado la encuesta, que ha encontrado que la inmensa mayoría de los encuestados cree que las redes sociales «están permitiendo mayor acoso anónimo», «han hecho que disminuya el respeto a la intimidad de los demás» y «están sexualizando en exceso las relaciones entre menores».
Es por esto que prácticamente todos los padres (el 97.2%) reconoce que deberían «estar más atentos al posible acoso a través de las redes sociales» de los hijos menores de edad, «velar por la intimidad» de los mismos en ese ámbito (96,5%), controlar más el acceso a internet en el hogar (94,3%) y controlar más el uso que ellos hacen del móvil (93%).
Los móviles y los niños
Los peligros de las redes sociales se dan también, en parte, por el infinito acceso a través de móviles. En esta línea, la encuesta pregunta a los padres a qué edad compraron un móvil a sus hijos o a partir de qué años consideran que sería adecuado hacerlo. ¿El resultado? Los 15 años, una edad que conforme ha señalado Michavila, está por encima de la media que arrojan la mayoría de los estudios, los 13 años.
El estudio concluye con otra preocupación: el 40,4% de quienes se encargan de comprar la ropa para sus hijos considera que el sistema actual de tallaje influye en ellos negativamente, lo que puede derivar en problemas alimentarios.
Damián Montero
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