MADRID, 4 Septiembre
Mucho se ha hablado de los beneficios que tiene el ejercicio sobre la salud, como la reducción de peso, una menor tensión arterial o cifras más bajas de colesterol. Un estudio muestra ahora cómo el paso del tiempo no borra esos beneficios sino más bien lo contrario.
Aquellas personas que se han iniciado en una práctica deportiva durante su madurez consiguen evitar la enfermedad en su vejez. Incluso hasta los que han dejado la natación o el gimnasio para después de la jubilación pueden conseguir un efecto positivo sobre su expectativa de vida.
«Estar en forma no sólo retrasa lo inevitable, sino que en realidaddisminuye el comienzo de una enfermedad crónica en los últimos años de vida», afirma el doctor Jarett Berry, profesor de medicina interna y autor del estudio cuyos datos publica la revista ‘Archives of Internal Medicine’.
Para llegar a estas conclusiones, este investigador junto con el resto de su equipo analizaron los datos de 18.670 personas que formaban parte de otra investigación, el Estudio Longitudinal del Centro Cooper, que contenían más de 250.000 historiales médicos.
Leer más: El Mundo