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El 83% de los niños obesos vive en países en vías de desarrollo

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Las preocupantes cifras de crecimiento de la obesidad infantil en los países ricos o industrializados ya no son exclusivas de estas latitudes donde impera la comida rápida y el gusto por las comidas y bebidas azucaradas. Ahora la Organización Mundial de la Salud (OMS) acaba de adelantar los datos de la Comisión para el Fin de la Obesidad Infantil donde alertan del rápido crecimiento de la obesidad infantil en Asia y África.

Así de los 42 millones de niños menores de cinco años que tienen sobrepeso en el mundo, 35 millones, o lo que es lo mismo el 83 por ciento de los niños obesos, vive en países en vías de desarrollo con ingresos medios y bajos.

El informe final de la Comisión para acabar con la Obesidad Infantil (ECHO, en inglés, Commission on Ending Childhood Obesity), refleja que los datos del estudio son alarmantes: más de 41 millones de niños menores de cinco años son obesos. La situación es especialmente preocupante en los países en vías de desarrollo, ya que en 2014, el 48 por ciento de todos los niños obesos y con sobrepeso viven en Asia, y el 25 por ciento en África.

Africa y Asia crecen en cifras de obesidad infantil

El objetivo de este informe de la OMS, que se ha desarrollado durante dos años, es hacer frente a los alarmantes niveles de obesidad infantil y sobrepeso a nivel mundial. Pero a la luz de los datos, a la OMS no sólo le preocupan las cifras sino también la evolución de la obesidad en aquellas zonas donde el problema era mínimo. 

– La obesidad infantil en África. Desde 1990, el continente africano ha doblado la cifra de obesidad infantil y sobrepeso en menores de cinco años, según este estudio. Actualmente,, el 25 por ciento de los niños obesos menores de 5 años vive en África. Las enfermedades derivadas de los problemas por obesidad, propias de los países ricos, se suman ahora a las enfermedades infecciosas endémicas que no se han erradicado todavía en los países de ingresos medios y bajos. Así, al dengue, cólera, tuberculosis y sida, hay que sumar el número de cánceres, enfermedades cardiovasculares y accidentes de tráfico, y ahora también las enfermedades derivadas de la obesidad y el sobrepeso, que eran causas de muerte típicas de países ricos.

Crece la obesidad infantil en Asia

– La obesidad infantil en Asia. En el continente asiático es donde el problema es más alarmante, según la OMS, por la rapidez con la que ha crecido la obesidad infantil. El informe destaca que el 48% de todos los niños obesos y con sobrepeso viven en Asia.

Pero, ¿cuál es la causa? Al parecer, se ha detectado que el metabolismo de los niños asiáticos tiene como característica específica la retención de grasas en la parte abdominal del cuerpo y en el interior del mismo, rodeando a los órganos vitales, justo donde es más perjudicial para la salud. Aún no se conoce el motivo de esta característica del metabolismo en la raza oriental, está en estudio, pero resulta peligrosa la grasa que se instala en el interior porque lo hace antes que la externa, de manera que un niño puede no dar señales de obesidad y tener ya una gran cantidad de grasa perniciosa en su cuerpo. 

Causas que explican el aumento de la obesidad infantil en el mundo

Existen varios factores que confluyen para explicar el aumento de la incidencia de la obesidad infantil entre los más pequeños. Algunos de ellos son:

1. Los factores biológicos. La genética ha preparado a la humanidad para tiempos de escasez de alimentos y ahorrar grasa (energía) durante estos periodos. Esta característica aumenta cuando durante la infancia los niños no han tenido acceso a una buena alimentación ni han tenido la oportunidad de ingerir alimentos saludables.

2. La disminución de actividad física en los colegios. La enseñanza en la escuela implica que los niños pasen un buen número de horas sentados y esta condición contribuye al sedentarismo infantil.

3. La desregulación del mercado de los alimentos que engordan. La comida rápida, el exceso de azúcar en las bebidas refrescantes y en ciertos alimentos procesados con grasas poco saludables y azúcares están contribuyendo también al incremento de la obesidad infantil.

4. La herencia de las madres. No sólo a nivel biológico, sino en la transmisión de costumbres alimentarias. 

Marisol Nuevo Espín

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