La crisis originada por el coronavirus no ha sido solo sanitaria. Los efectos económicos se empiezan a sentir en la actualidad, algo que también ha terminado por afectar al mercado laboral. Al igual que ha ocurrido en otros momentos en los que la economía se ha resentido, las ofertas de empleo se han reducido. Una mala noticia para los jóvenes que buscaban su primera oportunidad de trabajo.
Y es que, tal y como destaca el Informe Infoempleo Adecco, desde que se decretó el estado de alarma, la oferta de empleo se redujo en un 70% en España. Un dato completamente opuesto al de 2019, año en el que se experimentó un incremento de un 10,2% con respecto al pasado curso. Tras siete ejercicios consecutivos de crecimiento, la pandemia ha hecho que se cambie la tendencia.
Hostelería y turismo, los más afectados
Como se ha dicho, hasta 2019 la tendencia era ascendente a lo que ofertas de empleo se refiere. Sin embargo, en marzo de 2020 se produjo un evento que lo cambió todo: se decretó un estado de alarma que paralizó la economía en muchos sectores. ¿Hasta qué punto se ha desdibujado el mercado de trabajo? Teresa Tomás, CEO de Infoempleo, india que el grado de incertidumbre en la actualidad es alto.
Por sectores, los más perjudicados en lo que a ofertas de empleo se refieren, son la hostelería y el turismo con un descenso del 90,2%, la consultoría (reducción del 87,9%) y la industria del automóvil (bajada del 85,4%). La distribución mayorista también se redujo en un 84,6%, dato que se contrapone al crecimiento de vacantes en empresas de mensajería, que se sitúan en un 150%.
Entre las dificultades a las que se enfrentan las empresas en la actualidad, destacan las repercusiones económicas derivadas de la crisis sanitaria (59,5%) o la incertidumbre política (27,3%). Un cambio que se ha producido durante los meses de la pandemia, ya que en febrero de 2020 los principales reclamos eran el desajuste entre oferta de profesionales y vacantes (41,5%), la escasez (35,3%) y la retención de talento (27,5%).
Impacto en la actividad
En cuanto al impacto que ha tenido el confinamiento en la actividad empresarial, cinco de cada diez organizaciones aseguran haber reducido si actividad económica entre un 25% y un 75%, un 12,4% se ha mantenido estable y solo un 5,5% ha crecido. Un porcentaje que se compone por el sector de logística y transporte, sanidad y servicios sociales, TIC, alimentación y bebidas o agricultura.
El 35% restante son empresas que han paralizado por completo su actividad, como las del sector de la hostelería y el turismo, o la industria automovilística, campos en donde más se ha sufrido esta parálisis. A la hora de consultar sobre sus planes de reactivación, el 30% ya había retomado su actividad antes de julio, entre julio y agosto lo harán el 30,7% y el 30,5% esperará a otoño o a 2021.
También hay que mencionar otro de los nombres más comunes en el terreno económico durante la pandemia: el ERTE. La crisis sanitaria se tradujo en la suspensión laboral entre empleados y empresa durante un periodo de tiempo. Atendiendo a los datos de este informe, el 61,3% de las empresas se habían acogido a esta medida antes de junio. Cifra que varía en función del sector laboral.
En construcción, el 75% de estas empresas, industrial (74,1%) y servicios (61%). El tipo de ERTE más solicitado ha sido para una parte (43,2%) o el total para la plantilla (29,2%). Si atendemos a la evolución de estos expedientes, el 45% se encontraban en suspensión temporal en junio.
Damián Montero
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