¡Cuánto nos gusta escuchar las primeras palabras de nuestros hijos! Papá, mamá… pero ¿qué ocurre cuando dice «droto» en lugar de roto? Si estás preocupado por la pronunciación o el desarrollo del lenguaje de tu bebé, descubre el trabajo que realiza con los niños la logopeda y pedagoga Beatriz Maya.
Con una sólida formación como maestra especializada en Pedagogía Terapéutica, actualmente dirige CREE (Centro de Rehabilitación y Educación Especializada) en Madrid. En este centro, la logopeda Beatriz Maya se dedica a su pasión: la detección y tratamiento de dificultades en el lenguaje, así como a otros retos en el desarrollo y aprendizaje de niños y adolescentes.
A través de sus plataformas en redes sociales, especialmente en su cuenta @centrocreemadrid de Instagram, con más de 145.000 seguidores, Beatriz comparte su valiosa información sobre estas cuestiones con sus seguidores, brindando orientación y apoyo a los padres. Recientemente, ha publicado su primer libro titulado Crecer sano, crecer feliz (Ed. Zenith), una guía completa que aborda el viaje de la crianza durante los tres primeros años de vida del niño. Esta guía no solo refleja su experiencia profesional, sino que también ofrece perspectivas únicas y prácticas para promover un desarrollo saludable y feliz en los más pequeños.
Problemas y etapas del lenguaje del bebé
¿Qué te inspiró a dar el salto de tu consulta a las redes sociales @centrocreemadrid?
Saber que había familias que no podían acceder a servicios de Logopedia como el que yo empezaba a ofrecer en ese momento en mi clínica, me rompía el corazón. Imaginar que había peques que, por motivos económicos o geográficos, no podían recibir el tratamiento que necesitaban, fue lo que me llevó a embarcarme en mi labor más divulgativa.
¿Cómo seleccionas los temas que subes a tu Instagram y qué feedback has encontrado de tus seguidores a tu trabajo?
Los temas que trato en mi cuenta de Instagram principalmente responden a las preocupaciones o problemáticas que las familias encuentran en su día a día, ya sea en lo que a la crianza en general se refiere o a aspectos más específicos de su desarrollo (cognición, motricidad, lenguaje…). En cuanto al feedback de mis seguidores, la verdad es que no puede ser más maravilloso. Los mensajes que recibo a diario, en los que las familias me cuentan lo mucho que les ayudan mis publicaciones, son el motor que mueve todo el trabajo que suponen las redes sociales a este nivel.
¿Qué es lo que más preocupa a los padres? ¿Qué es lo que más te piden en sus mensajes?Las mayores preocupaciones de las familias, en los primeros años de vida, están relacionadas con el desarrollo del lenguaje y el desarrollo emocional de sus peques (límites, rabietas, miedos, celos…), pero también con las actividades que pueden llevar a cabo desde casa para estimular sus desarrollos. En mi cuenta de Instagram comparto muchísima información sobre estos ámbitos, pero a través de sus mensajes, pude ver que lo que en realidad necesitaban las familias era un acompañamiento más guiado en estas tres direcciones. De ahí, surgió la idea de ir un pasito más allá y crear mis cursos online. En ellos, puedo proporcionarles toda la información, todos los recursos y todas las estrategias que necesitan para estimular el lenguaje de sus peques desde casa, para entender y acompañar sus rabietas o para pasar tiempo de calidad en familia que, al mismo tiempo, estimule y desarrolle las capacidades de sus hijos.
¿Cuál es el mensaje principal que esperas que los padres y niños obtengan de tu libro?
Mi intención es que las familias dispongan de una guía que les permita conocer de verdad el desarrollo de sus peques. Saber qué pueden esperar en cada etapa y qué pueden hacer en cada una de ellas, me parece primordial a la hora de acompañar a tu hijo en este camino si tu intención es hacerlo desde el cariño y el respeto. Por lo tanto, habría cumplido mi objetivo si mi libro se convirtiera en un libro de cabecera, uno de esos que quieres tener siempre cerca para que, en el momento en el que surgiera cualquier imprevisto o quisieras recordar cómo actuar en alguna de las etapas, pudieras consultarlo y (lo más importante) entenderlo.
¿Cómo definirías tu estilo personal, esa manera de aplicar lo que sabes, de hacer que los niños se diviertan aprendiendo…?
Siempre he basado mi metodología y filosofía de trabajo en el juego. Mi experiencia profesional me ha demostrado que, cuando un niño se divierte, cuando partes de sus intereses y está realmente motivado, ya tienes un alto porcentaje de éxito asegurado en tu intervención. Resulta mucho más sencillo que sea yo, como profesional, sea quien adapte mis objetivos de trabajo a esa diversión, que no forzar al niño a que sea él quien se adapte a lo que pretendemos conseguir en el tratamiento (ya sea adquirir más vocabulario, que sea capaz de decir la dichosa «RR» o que comprenda el significado de un texto).
Como logopeda y maestra especializada en pedagogía terapéutica, ¿cuál es el problema o patología que más ves en consulta y cómo alertar a los padres para que lo detecten a tiempo?
Actualmente, hay claros motivos de consulta que se repiten con mayor frecuencia en mi clínica (CREE – Centro de Rehabilitación y Educación Especializada). En Logopedia, las dificultades para iniciar el desarrollo del lenguaje oral, es decir, para que los peques empiecen a decir sus primeras palabras; las dificultades para articular determinados sonidos, por ejemplo, la «RR»; y las dificultades (que en muchas ocasiones somos nosotros mismos quienes las ocasionamos) referentes al aprendizaje de la lectoescritura. En Psicología, los problemas de conducta, de autoestima, de ansiedad, las dificultades en la relación con el entorno o la familia, son los más demandados.
¿Qué es el baby talk y qué recomendarías a los padres para enseñar a hablar a sus peques?
El término «Baby Talk» hace referencia a la forma en la que los adultos nos comunicamos con los bebés. Por lo general, nos nace de forma innata y espontánea, pero lo cierto es que tiene gran respaldo científico a la hora de estimular el lenguaje en los primeros meses de vida.Esta forma de comunicarnos incluye variaciones melódicas, frases cortas y sencillas, pausas, gestos* y nos permiten captar la atención del bebé y que éste perciba mejor el mensaje que le transmitimos.
Cuando detectamos dificultades del lenguaje, ¿cuándo recomiendas ir al logopeda? ¿Cuándo se puede considerar que un peque tiene dificultades de lenguaje y necesita un logopeda?
Son varios los motivos que nos pueden llevar a pensar que nuestro peque necesita un logopeda. No obstante, los motivos de consulta más frecuentes que observamos en la clínica son: por un lado, que a los 18 meses no hayan surgido las primeras palabras y, por otro lado, que a los 2 años el niño no disponga de un repertorio de, al menos, 20 palabras. Por supuesto, observar que nuestro peque tiene dificultades para comprender lo que le decimos, lo que le pedimos y, en general, para entender y relacionarse con nosotros, sería un motivo clarísimo para contactar con un logopeda. Finalmente, en lo que al habla se refiere, si nuestro peque presenta dificultades para pronunciar cualquiera de los sonidos de nuestro idioma, sería necesario también que iniciáramos este contacto. La mayoría de los sonidos tienen que haber sido adquiridos a los 3 años (/m/, /p/, /s/, /k/…), pero hay otros más complejos que esperamos hasta los 4 o 5 años de edad.
¿Cómo afecta el bilingüismo a los niños, es positivo o puede crear problemas?
En general, siempre que se trate de un bilingüismo bien establecido (con esto hago referencia al tiempo de exposición que el niño experimente ante uno y otro idioma), tiene consecuencias positivas para el desarrollo de nuestros peques.Una de las preocupaciones más frecuentes que manifiestan las familias en torno al bilingüismo es su relación con el desarrollo del lenguaje. En este sentido, el uso de más de un idioma nunca será la causa de las dificultades que puedan surgir en el desarrollo del lenguaje del niño y, llegado el caso de que estas dificultades surgieran, la solución tampoco sería la retirada de uno de los idiomas.Por lo tanto, podemos estar tranquilos. Las últimas investigaciones que describo en mi libro nos aportan datos acerca de los factores positivos y negativos que conlleva el manejo de dos o más idiomas, pero por lo general aportará grandes oportunidades al desarrollo del niño.
¿Qué importancia tiene la atención en el desarrollo del aprendizaje y cómo reconducir una posible deficiencia?
La atención es un proceso cognitivo fundamental e imprescindible a la hora de llevar a cabo cualquier tarea o acción. Por lo tanto, será indispensable que construyamos unos cimientos sólidos a nivel atencional desde los primeros meses y años de vida sobre los que asentarán los futuros aprendizajes de nuestro hijo.Para ello, las actividades que propongo en mi libro son las que mejores resultados nos han proporcionado tanto a mí como a mis familias a lo largo de estos años.En caso de que detectáramos cualquier dificultad en la atención de nuestro peque, lo más recomendable sería que contactáramos con un profesional (en este caso, un psicólogo) que pueda valorar nuestro caso particular y asesorarnos en base a la valoración realizada.
¿Cuál es la clave para que los niños deseen hacer las cosas por sí mismos?
Como decía anteriormente, creo que la motivación es el motor que mueve al niño. Y esto es aplicable a todos los ámbitos en los que requerimos su colaboración.Si hacemos partícipe a nuestro peque de las tareas de casa, de su aseo personal, de su alimentación* y le implicamos, por ejemplo, en la elección de su ropa, en la preparación de su comida y le consideramos, en definitiva, un miembro más cuyo papel es imprescindible para el funcionamiento y la dinámica amiliar, serán mucho menores las ocasiones en las que tengamos que perseguir su colaboración.
Rabietas, celos, chantajes… ¿cómo podemos evitar estos comportamientos negativos para evitar que como padres nos sintamos responsables y nos asalte la culpa?
Este es un tema sobre el que podríamos hablar largo y tendido. En mi libro quiero transmitir mensajes muy claros a las familias, que derriban ciertas creencias que tradicionalmente hemos ido construyendo alrededor de este ámbito.Siempre nos han enseñado a diferenciar las emociones positivas de las negativas y siempre nos han animado a buscar las positivas y a evitar las negativas. Uno de esos mensajes que pretendo lanzar con mi libro va totalmente en contra de esta creencia. No hay emociones positivas y negativas y no tenemos que buscar las emociones positivas y evitar las negativas. Ni nosotros ni nuestros peques.Conocer las etapas que atravesará su desarrollo emocional nos ayudará a saber cómo funciona su cerebro en cada una de ellas y a saber actuar en consecuencia. No podremos evitar que nuestro hijo sienta tristeza, miedo o enfado, pero sí podemos acompañarle y ayudarle a sentir esas emociones.
Marisol Nuevo Espín
Te puede interesar:
– Aprender a hablar: ¿cuándo acudir al logopeda?
– Etapas del lenguaje del bebé
– Evolución del lenguaje infantil, del balbuceo a la verborrea
– 6 ejercicios para ampliar el vocabulario del bebé
– Conversar con los hijos desde pequeños favorece el desarrollo de su inteligencia