Aunque el verano parece sinónimo de vacaciones, sabemos que no todos los trabajadores tienen la oportunidad de tomarse unos días y descansar durante la temporada estival. Muchos de nosotros seguimos trabajando arduamente bajo el calor del verano, lo que puede llevar a una disminución de nuestra productividad debido a la fatiga o astenia veraniega.
Seguir trabajando durante los meses de más calor supone un esfuerzo, ya que la productividad en el trabajo suele caer debido a la fatiga o astenia veraniega, que producen las altas temperaturas. ¿A quienes afecta más la fatiga veraniega? Sobre todo a las personas que tienen dificultad para dormir en verano. La falta de sueño, unida al cansancio constante que produce el calor, afecta al rendimiento en el trabajo, haciendo difícil soportar las jornadas de trabajo aunque sean intensivas.
8 trucos para aumentar tu energía y ser productivo en el trabajo
Pero no te preocupes, ¡tenemos buenas noticias! Expertos en alimentación y bienestar han desarrollado 8 consejos para aumentar tu energía y mejorar tu productividad durante el verano. Esto es lo que nos recomienda Miguel Navarro, CEO de Salud Feroz, la escuela online de alimentación, entrenamiento y bienestar emocional y Ana Montes, Directora Clínica de Salud Feroz:
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1. Aprovecha las maravillas de la naturaleza. Incorpora más frutas y verduras en tu dieta. Estos alimentos están llenos de vitaminas, minerales y antioxidantes que te brindarán la energía necesaria para enfrentar tus jornadas laborales.
2. Elige sabiamente tus carbohidratos. Opta por granos integrales como arroz integral, quinoa, avena y pan integral. Estos carbohidratos liberan energía de forma gradual, manteniéndote saciado y con fuerzas durante toda la jornada.
3. No saltes comidas. Mantén una rutina de tres comidas principales al día y, si es necesario, incluye snacks saludables como frutos secos, yogur griego o una deliciosa pieza de fruta.
4. Controla las porciones. Disfruta de tus comidas sin excesos, utiliza platos más pequeños y come de forma pausada para reconocer la sensación de saciedad.
5. Mantente hidratado. Beber suficiente agua es esencial, especialmente en verano. La deshidratación puede causar fatiga, así que asegúrate de mantener tu cuerpo bien hidratado durante todo el día.
6. Escoge alimentos naturales. Limita el consumo de alimentos procesados y azúcares refinados. Opta por opciones frescas y naturales que te proporcionen los nutrientes necesarios para mantener tu energía estable.
7. Planifica tus comidas. Preparar tus comidas con anticipación te ayudará a tomar decisiones más saludables y evitará recurrir a opciones menos nutritivas en momentos de hambre.
8. Disfruta del aire libre. El verano es la época perfecta para comer al aire libre. Organiza picnics saludables y barbacoas nutritivas, aprovecha la variedad de frutas y verduras de temporada y ¡disfruta al máximo de cada bocado!
Recuerda que cada persona es única, así que adapta estos consejos según tus necesidades individuales. Si tienes alguna condición de salud específica, no dudes en consultar con un profesional de la salud o un dietista nutricionista para obtener una guía personalizada.
Este verano, no permitas que la fatiga te detenga. ¡Con una alimentación saludable y consciente, estarás listo para disfrutar al máximo y aprovechar cada momento con energía y vitalidad! ¡A por un verano lleno de productividad y bienestar!
Marisol Nuevo Espín
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