La autoestima es uno de los ingredientes necesarios para que todo niño se desarrolle correctamente. Parte de ella depende de que los padres inculquen a sus hijos una seguridad en todo aquello que hacen y en las habilidades que poseen. Algo que puede ponerse en marcha desde el mismo momento en el que los pequeños nacen, dada la capacidad que tienen para aprender.
Durante este periodo también adquieren confianza en ellos mismos, un paso tan importante como la conquista de otras habilidades. Los profesionales del Child Mind Institute aseguran que la autoestima es precisa para que los niños puedan desarrollarse al tener confianza en sus propias capacidades, al mismo tiempo que son capaces de sentirse preparados para afrontar diversas situaciones. Estos son algunos consejos profesionales para este fin.
Consejos para criar niños seguros de sí mismos
Para criar a un niño seguro hay que prestar atención a la educación que se le presta a los hijos. Estos son algunos consejos para potenciar la autoestima en la crianza:
– Ser usted un ejemplo de autoconfianza. Incluso si en realidad no se siente del todo una seguridad en uno mismo, los niños deben ver cómo sus padres deben abordar nuevas tareas con optimismo. Eso no significa que haya que ser perfecto, sino verse capaz de intentar todas las labores.
– No permitir que los errores afecten al niño. Hay que trabajar para que los niños vean que todos cometemos errores y que lo importante es aprender de ellos, no quedarse atrapado en ellos. Las personas seguras temen al fracaso porque saben cómo tomarse los contratiempos con calma.
– Animarlos a probar cosas nuevas. En lugar de que concentren toda su energía en aquello en lo que ya destacan, es bueno que los niños se diversifiquen. La adquisición de nuevas habilidades hace que se sientan capaces y confiados en que pueden abordar cualquier cosa que se les presente.
– Permitir que los niños fracasen. Es natural querer proteger a los hijos de toda sensación negativa, como es el fracaso, pero los niños aprenden por ensayo y error, y no alcanzar una meta los ayuda a darse cuenta de que no es algo fatal.
– Elogiar la perseverancia. Aprender a no darse por vencido ante la primera frustración o a no echarse para atrás después de un contratiempo es una habilidad importante en la vida. La confianza no tiene que ver con tener éxito siempre en todo, sino con ser lo suficientemente resiliente como para seguir intentándolo, y no angustiarse si no se logra ser el mejor.
– Ayudar a los niños a encontrar su pasión. Los padres deben invitar a que los hijos investiguen sus propios intereses lo que permitirá que los niños desarrollen un sentido de identidad, lo cual es esencial para generar confianza. Además, ver cómo se amplían sus talentos también significará un gran impulso para su autoestima.
– Establecer metas. Los padres deben invitar a que sus niños formulen metas, grandes y pequeñas, y lograrlas, haciendo que que los niños se sientan fuertes. 8. Celebre el esfuerzo
– Pedirles que colaboren. Aunque los niños se quejen cuando se les pide colaboración en las labores del hogar, se sienten más conectados y valorados cuando son tomados en cuenta para hacerse cargo de tareas apropiadas para su edad, desde guardar los juguetes, hasta lavar los platos.
– Aceptar la imperfección. Todo adulto sabe que la perfección es imposible, y es importante que los niños reciban ese mensaje lo antes posible.
– Prepararlos para el éxito. Los desafíos son buenos para los niños, pero también deben tener oportunidades donde puedan estar seguros de que tendrán éxito.
– Demostrarles amor. Hay que hacerles saber a los hijos que se les quiere sin importar lo que pase: ganen o pierdan. Incluso se produce un enfado con los niños, hay que asegurarse de que sepan que nunca van a perder su vínculo y el cariño con sus padres.
Damián Montero
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