Cuando hablamos de niños con altas capacidades o niños superdotados nos referimos a aquellos niños que tienen una capacidad de aprendizaje muy superior y una forma de aprender muy diferente de los niños de su edad.
La OMS definía la superdotación como una capacidad cognitiva o CI superior a 130 en tests de inteligencia. Pero los test no son siempre exactos, y actualmente no se tiene sólo en cuenta ese dato. Hoy en día los especialistas en altas capacidades valoran el CI como un factor más, en relación con la creatividad, el estilo de aprendizaje, el desarrollo evolutivo, como parte de una evaluación multidimensional, y no solo psicométrica. Según Renzulli esto no quiere decir que no se tenga que tener en cuenta el CI o rendimiento académico sino que no debería ser el único que se tenga en cuenta.
Aunque no es un grupo homogéneo y no todos los alumnos comparten todas las características ni las manifiestan de la misma manera, si revisamos la literatura, sí parece que hay consenso en la frecuencia de algunos de los siguientes rasgos.
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Principales rasgos cognitivos dentro del área de Inteligencia y creatividad
– Gran capacidad de abstracción, conceptualización y síntesis bien desarrollados
– Pensamiento fluido y flexible, elaborado y original y para establecer asociaciones y relaciones entre ideas y conceptos diferentes.
– Velocidad de procesamiento de la información rápida, relacionando y conectando conceptos.» Gran curiosidad por conocer el porqué de las cosas y alta memoria.
– Flexibilidad en sus ideas y pensamientos, con un pensamiento más productivo que reproductivo.
– Manifiestan creatividad y originalidad en las producciones que realizan, con gran capacidad de iniciativa, imaginación y fantasía.
Rasgos sociales y emocionales propios de los niños con altas capacidades
– Suelen manifestar interés por temas filosóficos y sociales, por temas morales y relacionados con la justicia, ya que suelen mostrar gran sensibilidad hacia el mundo que le rodea. También es frecuente esa alta sensibilidad a nivel emocional y hasta física.
– Perfeccionista y crítico consigo mismo en las tareas que lleva a cabo. Prefieren trabajar solos, son muy independientes.
– Puede liderar grupos debido a su capacidad de persuasión y convicción y a la seguridad que manifiestan.
– Usualmente motivado intrínsecamente, con energía y perseverancia hacia las tareas que le interesan.
– Se relaciona bien con padres, maestros y otros adultos o mayores que él
Niños con altas capacidades: el papel de los padres
El papel de la familia en el desarrollo de las potencialidades de un niño o niña con altas capacidades intelectuales es fundamental y, por ello, ésta debe conocerlo y ser consciente de ello.
Lo primero que tienen que tener en cuenta los padres es que el entorno familiar es muy importante para el desarrollo intelectual y afectivo del/la niño/a. Los padres no deben olvidar que ante todo son padres, y aunque en ocasiones las capacidades intelectuales de los/as niños/as sobrepasen las suyas propias, esto no debe afectar en ningún momento a la hora de establecer unas normas, pautas y límites adecuados a su edad, cuyo cumplimiento se ha de velar, sin perjuicio de que haya una flexibilidad y comprensión en ello.
Los padres deben hacerles valorar a los/as hijos/a la importancia de ser responsables, de integrarse socialmente, respetar y aceptar a los demás…
De esta forma se evita que puedan aparecer ciertos sentimientos de superioridad, que con el tiempo lo único que consiguen sea fomentar el individualismo y la falta de adaptación. Hay que eliminar cualquier tratamiento especial o etiqueta, que le pueda hacer sentirse superior a los demás.
La familia tiene que procurar estimular el desarrollo de las potencialidades que posee su hijo con altas capacidades para que éste llegue a su grado máximo, tanto en los aspectos que destaca como aquellos en los que presentan capacidades similares a los niños y niñas de su edad. Para ello es conveniente ofrecerle oportunidades de enriquecimiento, actividades para que puedan desarrollar sus capacidades e intereses y proporcionarle materiales en los ámbitos que más les interesan.
Es importante que los padres supervisen y dirijan el tiempo que los/as niños/as pasan fuera del colegio: planificar actividades y el tiempo de ocio y descanso, fomentar las relaciones con los amigos/as, ayudarle a satisfacer su inagotable interés y su curiosidad y fomentar su autonomía animándole a resolver sus propios problemas.
Es fundamental cuidar la parte afectiva, emocional y social del/la niño/a, ya que se han encontrado muchos casos de niños/as superdotados/as con problemas emocionales y sociales. Tener siempre presente que el/la niño/a no es un adulto, es un/a niño/a que pese a tener una madurez o capacidad intelectual elevada tiene necesidades en el plano afectivo y emocional, y por tanto es de vital importancia demostrarle afecto como a otros miembros de la familia, reforzándole y reconociendo sus logros y avances con palabras de elogio, gestos de apoyo, premios materiales, reconocimiento social…
Cabe destacar como esencial la coordinación e intercambio de información de los padres con el centro educativo, con los/as profesores/as y profesionales del colegio para trabajar al unísono, compartiendo información y pautas.Hay por tanto que atender por igual todas las esferas del desarrollo de un niño con altas capacidades, no sólo su capacidad e inteligencia, ya que la educación es la clave para transformar la capacidad en talento.
Blanca Álvarez, neuropsicóloga infantojuvenil, especialista en Intervención Logopédica, Experta en Evaluación de Altas Capacidades y Máster en Envejecimiento y Demencias, de Psicólogos Pozuelo
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