Ser padre primerizo no es algo fácil. La experiencia es un grado y enfrentarse a lo desconocido puede parecer abrumador. Sin embargo, ¿qué hay de la llegada del segundo hijo? ¿Se supone que todo lo aprendido con el primero basta para afrontar esta nueva etapa? Ni mucho menos, aunque ya se haya pasado por las etapas del embarazo, parto y crianza, ahora hay otras cosas que tener en cuenta.
Tal y como indican desde la Fundación Nemours toca prepararse para la llegada del segundo hijo. Hay que ser consciente de que se avecinan nuevos cambios, no solo para los padres. El mayor también debe saber que se aproxima una etapa distinta a lo que ha vivido hasta ahora. Nuevas responsabilidades se avecinan sobre el hogar y, como en la primera ocasión, toca estar preparados.
Cambios con el segundo hijo
El primer cambio, aunque parezca obvio, es que la llegada de un nuevo hijo supondrá la crianza de dos niños. Y lo que es más importante, atender las necesidades de dos hermanos que están en fases distintas de sus vidas. Un bebé precisa de cuidados que, por ejemplo, un escolar puede no necesitar. Sin embargo, este si que requerirá atención de sus padres, por ejemplo, para preguntar dudas sobre sus tareas o compartir inquietudes.
Los padres estarán más ocupados que nunca y toca hacer malabarismos con los horarios. El cansancio será más habitual, incluso antes de que nazca el nuevo bebé, ya que tocará cuidar de un hijo al tiempo que se cuida a la embarazada. Tras el nacimiento, las primeras seis u ocho semanas serán más exigentes ya que al mismo tiempo, se buscará el desarrollo de horarios en el recién nacido al tiempo que se miran las necesidades del mayor.
Sin embargo, hay que tener en cuenta que la confianza con la que se afronta la llegada del segundo hijo será mayor, al igual que las habilidades y conocimientos que se tienen. Algunas de las tareas que parecían complicadas, ahora son sencillas, un ejemplo es la lactancia o el cambio de pañales. Ahora saldrán casi de forma automática, en lugar de vivirlas como crisis.
¿En qué afectará?
La llegada de este nuevo hijo puede ser difícil al principio. El primer gran cambio que experimentará la familia es la reorganización de horarios. Al mismo tiempo, también es de esperar la llegada de alteraciones tanto desde el punto de vista físico, como del emocional:
– Cambios físicos. Lo más probable es que la madre se sienta dolorida y cansada tras el parto. En el caso del padre, también podrá experimentar este cansancio en tanto que el bebé se acostumbra a los horarios de sueño y duerme por la noche.
– Cambios emocionales. A los padres les toca establecer un nuevo vínculo con sus bebés. No hay que preocuparse si de primeras no se siente el mismo amor que con el otro hijo, todo llegará, simplemente tardará un poco más en llegar.
Damián Montero
Te puede interesar: