La manera de enseñar está cambiando a gran velocidad, en parte debido a la educación online que se ha acelerado por la pandemia de coronavirus. Asistimos en casa y en el colegio a una nueva pedagogía que incluye un montón de términos nuevos, entre los que es fácil perderse.
Las nuevas metodologías abiertas, innovadoras y flexibles se adaptan mejor a las necesidades de los alumnos y permiten conseguir mejores en el aula ya sea física o virtual. Estos cambios buscan, por un lado, motivar a los alumnos y ayudar a recuperar su atención y, por otro lado, regenerar y dar fuerzas a los profesores para seguir la tarea apasionante que es educar, pero que a veces puede llegar a desgastar por la propia monotonía.
Estas metodologías no siempre tienen por qué ser de nueva experimentación, es decir, pueden ser nuevas para nosotros y, por tanto, innovadoras, pero estar ya contrastadas y llevadas a la práctica en diferentes entornos, centros o países.
Los principales educadores son los padres
A pesar de que parece que están dirigidas únicamente a los profesionales de la educación, no debemos dejar de lado los principales agentes educativos de los niños: los padres. El que los padres estén informados y formados en los sistemas metodológicos que se siguen en el aula puede facilitar, y mucho, que el éxito de las metodologías en los alumnos y, por tanto, en los hijos, sea mayor.
Es interesante que los padres estén en contacto con el centro educativo y los tutores, no solo para saber qué desarrollo están llevando o cómo van académicamente en el aula, sino también para que conozcan esas metodologías y cómo van funcionando.
Una vez que sabemos las metodologías que se están empleando en el aula con nuestros hijos, es necesario ser conscientes que no son perecederas, sino que van renovándose y modificándose con el paso del tiempo. Esto es lo que hace que haya innovación, que se esté al día de lo mejor dentro del mundo educativo.
Asi mismo, es relevante pensar que no solo un tipo de metodología pedagógica es la mejor para enseñar. Cada una tiene sus puntos fuertes y débiles, por lo que es recomendable combinarlas para sacar lo mejor de ellas y, ante todo, conocer bien a los niños para saber qué es lo que necesitan, y a partir de eso, seleccionar las que sean adecuadas a esas necesidades. En este aspecto, los padres también necesitan la ayuda de los profesionales de la educación para guiarles en el método de enseñanza y educativo más adecuado, según las características de los hijos.
11 términos de la nueva pedagogía para no perderse
Es interesante, como padres, conocer algunas de estas metodologías y los términos que pueden incluirse dentro de las mismas. Por ello, lo recogemos todo a modo de glosario:
1. Flipped Classroom: es una metodología desarrollada por Jonathan Bergman y Aron Sams por medio de la cual se busca invertir el modelo de educación tradicional. Se trata de grabar las lecciones para que los alumnos puedan verlas en casa y el momento de clase sea dedicado a hacer las tareas y actividades teniendo al profesor de apoyo y guía. El profesor adquiere un papel más activo e implicado. De este modo el alumno no se ve solo en casa en el momento de enfrentarse a las actividades y estudio y las clases son más productivas. Además, los alumnos se sientan en mesas redondas y grupos para poder trabajar de modo más interactivo.
2. Time Out: consiste en encontrar un lugar específico que los niños puedan asociar con momentos de reflexión y para lograr la calma. Algunos ejemplos pueden ser el rincón de pensar, la zona de clama, la silla de reflexión, etc.
En el momento en el que un niño no tiene un comportamiento adecuado y se pone nervioso o alterado se genera un «time out» llevándole al espacio que se ha destinado para lograr la reflexión y la calma. El lugar debe estar apartado de posibles estímulos y distracciones para que no deje de hacer lo que se pretende que haga que es pensar o relajarse.
Es importante decidir la cantidad de tiempo, para que no sea excesivo, y que los niños acaben despistándose y, por tanto, se pierda la misión que se persigue. Y lo más importante es que, como padres, hay que mantener la calma en todo momento para que no dar un ejemplo incoherente y poco apropiado con la metodología que se está aplicando.
3. Padres helicóptero: la sobreprotección que llevan a cabo numerosos padres hacia sus hijos les convierte en lo que se denomina «Padres Helicópteros«. Este tipo de padres son aquellos que se dedican a realizar todo lo que sus hijos deben hacer limitándoles de responsabilidad y autonomía. Hasta el punto de que, cuando ya son adolescentes y adultos, siguen acompañándoles a todo lo que realizan, como puede ser una entrevista de trabajo, hacer por ellos la matrícula de la universidad, etc.
4. Mayéutica: el método de enseñanza Socrático consiste en no inculcar al alumno el conocimiento, sino que es el maestro, quien por medio del diálogo, le ayuda a hacer deducciones lógicas y alcanzar el verdadero conocimiento por sí mismo. No se trata de dar las clases tradicionales en las que el profesor explica los contenidos y el alumno los escucha de forma pasiva, sino que se pretende que el alumno pueda escuchar, pensar, relacionar contenidos y generar conclusiones. Esta metodología implica una atención personalizada a los alumnos.
5. Resiliencia: es la capacidad que tiene una persona para superar circunstancias traumáticas o complicadas de la vida diaria. Educar a los hijos en la resiliencia supone ayudarles a aceptar aquello que les pueda suceder en la vida y seguir adelante a pesar de ello. Buscar soluciones y ser fuertes para seguir luchando. Les hará ser más felices en su vida.
6. Mentoría: es un sistema educativo en el que una persona más experimentada o con mayor conocimientos guía y ayuda, de manera personal, a otra que posea mayor debilidad cognitiva o dominio de contenidos. El mentor puede ser el professor, pero no siempre tiene por qué ser él, sino unos compañeros de clase con otros o compañeros de otros cursos escolares. Cada persona puede tener distintos mentores en función de la materia o asunto y puede ser también mentora de otra persona. Este sistema permite también una atención personalizada y muy cuidada, logrando reducir de manera muy significativa el fracaso escolar.
7. Gamificación: es una metodología que consiste en trasladar el sistema de los juegos al ámbito educativo. Por medio de juegos tecnológicos se muestran a los alumnos contenidos que adquirirán con mayor facilidad y precisión. Se trata de recompensar a los alumnos en función de los objetivos alcanzados. Esto les resulta motivante y atractivo de cara al aprendizaje.
8. Mochila digital: hace referencia al conjunto de contenidos que un alumno tendrá que estudiar y alcanzar durante ese curso escolar, pero por medio de sistema digital: libros digitales, apps, etc.
9. Agrupamiento de alumnos: se trata de romper con los sistemas tradicionales de agrupar a los alumnos en clases según la edad, de forma que se realicen actividades con grupos mezclados en edad y según diferentes criterios de agrupamiento (nivel de contenidos, heterogeneidad de grupos, etc). El agrupamiento puede ser en grupos grandes o grupos más reducidos.
10. Pensamiento crítico y creativo: es una metodología de Robert Swartz basada en la enseñanza a los alumnos de diferentes herramientas de pensamiento que les permita desarrollar la capacidad de pensar de manera más enriquecida y adquirir el aprendizaje por medio de estas destrezas.
11. Inteligencias Múltiples: Haward Gadner por medio de esta metodología defiende la existencia de 8 tipos de inteligencias que indican que todos los seres humanos tenemos ciertas capacidades en las que destacamos frente a otras que debemos desarrollar a partir de esas capacidades. Todos, por lo tanto, tenemos alguna inteligencia en la que destacamos y que nos puede hacer triunfar en la vida. Es importante conocer el perfil de nuestros hijos para ayudarles a crecer según ese perfil de inteligencias múltiples.
No tengamos miedo a innovar ni al cambio, ya que puede reportarles mucho a nuestros hijos y, por el contrario, les privaríamos de oportunidades de desarrollo excelentes.
María Campo. Profesora del Máster en Orientación Educativa Familiar de UNIR y fundadora de Eduka&Nature
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