Comienzan las revueltas, la violencia callejera, los enfrentamientos sociales… la crispación social está más en auge que nunca. Mientras la pandemia enferma a las personas y deja malherida a la sociedad, es importante el análisis sociológico de esta grave crisis es clave en todos los análisis, ya que puede proteger la salud, identificando y gestionando las razones de los comportamientos grupales consiguiendo la transformación
El distanciamiento y la crispación social ya era una realidad hace meses, pero llegar a la violencia extrema, al vandalismo y al caos social en la calle, es lo que ahora está ocurriendo. Debemos analizarlo para que no vaya a más. Llega además en un momento donde la gravedad de esta grave crisis sanitaria y económica cada vez es mayor. Los enfrentamientos sociales están empezando a inundar todas las partes de la geografía española y fuera de nuestras fronteras.
¿Por qué ocurre esto? Es clave analizarlo desde el punto de vista sociológico, punto de vista que debería estar presente en casi todos los análisis.¿Qué es una Sindemia? El término lo acuñó el médico antropólogo Merril Singer: «Sindemia hace referencia a la interacción entre elementos biológicos y sociales en la expansión de determinadas enfermedades, donde indicadores sociales, como la clase social, son elementos clave en la gestión integral y la búsqueda de soluciones.»Como indica la socióloga Alicia Aradilla «Estamos centrados en la solución a la pandemia y ya han aparecido los primeros síntomas de que esta situación va mucho más allá: estamos en medio de una sindemia. Manifestaciones calentadas al fuego de contenedores, saqueo de tiendas, políticos que twittean más que gobiernan, comienzan a evidenciarse claros indicadores de sindemia.
En el caso de la COVID19, no sólo hay relación entre estas variables, sino que han creado sinergia entre ellas, lo que hace más urgente e importante la multidisciplinariedad. Es clave el análisis y mirada sociológica de esta crisis, para ayudar a entender, comprender y aceptar esta situación y ayudar a vivirla, más que sobrevivirla».»un ejemplo actual como las manifestaciones de jóvenes que viven el toque de queda como un recorte inaceptable de las libertades individuales – relacionadas con el ocio- se explica desde las ciencias sociales, y será desde esta disciplina, desde dónde podremos proteger su salud, identificando y gestionando las razones de este comportamiento grupal, más que desde las fuerzas de seguridad, que sólo podrá contenerse o reprimirse, pero no podrá transformarse. La intervención de las fuerzas de seguridad es enfocarse en el síntoma, también necesario, pero no aborda la causa. Así la herida social continuará sangrando.»»La sociología respondió a por qué países como Italia o España tuvieron más contagios Y la respuesta a las fatídicas consecuencias de llamar a una fase «nueva normalidad «la dio la neurolingüística. » Analiza la sociólogaEl pasado, 28 de septiembre, Saúl Ares, Científico del Centro Nacional de Biotecnología, en unas declaraciones sobre a la gestión de los rebrotes en Madrid, afirmó literalmente «Llamarlo Nueva Normalidad a lo mejor fue un fallo» porque nos hizo confiarnos.
Alicia Aradilla lo tiene claro, y el punto de vista sociológico es vital para el análisis: «La búsqueda de una solución para la COVID 19, sólo sanitaria es un predecible fracaso. No sólo la solución, sino también el camino que recorramos en su búsqueda requieren de esta mirada, por tanto es clave:» Formar comisiones de expertos que incluyan la mirada sociológica en lugar de una perspectiva exclusivamente sanitaria aderezada o suavizada de personajes públicos o militares en un intento de aportar amabilidad o sensación de seguridad.» Apoyar los debates y análisis de la actualidad con la mirada sociológica es calve para informar, formar y tranquilizar desde la ciencia (social) a los ciudadanos » la mirada sociológica es un pilar en la búsqueda de soluciones, la vacuna es una gran solución, pero de una sola perspectiva de la situación, que si obvia el resto de disciplinas se mengua a sí misma como opción.»La pandemia enferma a las personas y la sindemia deja malherida a la sociedad.» Concluye la socióloga.