El coronavirus ha levantado las alarmas sanitarias en muchos casos. El miedo al contagio ha traído consigo un sinfín de información relacionada con la pandemia, datos que en muchos casos son falsos. Una cuestión que lejos de ayudar a mantener el bienestar, termina por perjudicar a las personas y a su salud, algo que se torna especialmente delicado en el caso de las mujeres embarazadas.
Por ello, para aclarar las distintas dudas que relacionan embarazo y coronavirus, desde la Asociación Española de Pediatría y Atención Primaria, AEPap, se aclaran distintas informaciones en este sentido. Todo ello con la intención de discernir qué es real y qué es mito, permitiendo que las futuras madres puedan tener una gestación sin mayores contratiempos y cumpliendo correctamente con las normas médicas.
Coronavirus en el embarazo
¿Qué se conoce hasta el momento sobre la influencia del coronavirus en el embarazo? Los profesionales de AEPap señalan los siguientes puntos:
– No se incrementa el riesgo de aborto ni de parto prematuro.
– La enfermedad durante el embarazo es similar a la de la población. En el caso de las gestantes se produce de forma leve o asintomática.
– Durante el embarazo hay mayor tendencia a la formación de coágulos. Las personas enfermas de coronavirus tienen mayor riesgo de trombos, por lo que es necesario tener cierto nivel de actividad física a diario.
En el caso de que una mujer embarazada tenga que ingresar:
– A todas las embarazadas se les realiza un test de coronavirus mediante la técnica PCR, tomándose una muestra por nariz y garganta.
– Solo podrá tener un acompañante durante el ingreso y no se permitirán las visitas.
– Se les dará la información sobre normas de prevención e higiene durante su estancia hospitalaria.
– La mujer podrá estar acompañada en el momento del parto.
Embarazadas con Covid-19
Si se diera el caso de que la mujer embarazada estuviera infectada por el coronavirus, desde AEPap se indica el siguiente protocolo:
– El personal sanitario llevará un equipo de protección individual y cumplirán de forma estricta las normas de higiene.
– La embarazada quedará aislada, este tiempo puede llevarse a cabo en su domicilio.
– Cualquier persona que haya estado en contacto con un caso positivo deberá permanecer en aislamiento durante 14 días y vigilar la aparición de síntomas.
– Los contactos estrechos deben estar aislados durante 14 días y vigilar si tienen síntomas.
– El tratamiento es similar al del resto de la población. Se podrán hacer las mismas pruebas, usar medicinas para evitar trombos, oxígeno si es preciso o antibióticos si lo necesita. También se monitorizará al bebé durante la gestión y el parto.
– Si el niño tiene riesgo de nacimiento prematuro se pondrán corticoides a la madre para favorecer la maduración de los pulmones del bebé.
– Se intentará atender el parto en la habitación donde haya tenido lugar el aislamiento.
¿Y qué hay del riesgo para el bebé? Los pediatras de AEPap señalan las siguientes cuestiones:
– La transmisión del virus de madre a hijo ocurre tras el nacimiento por el contacto estrecho.
– La atención y los cuidados son los mismos que en los demás bebés recién nacidos. Pero tendrán que estar aislados y los cuidadores deben seguir las medidas de protección.
– Al bebé se le tomará una muestra para saber si tiene el coronavirus.
– A los bebés que no presenten síntomas se les hará un seguimiento telefónico por su pediatra.
– Si la madre y el bebé se encuentran bien estarán juntos durante el ingreso y el aislamiento. Si puede ser, con un acompañante a su elección.
– Antes de coger al bebé habrá que hacer un lavado de manos. La madre usará la mascarilla y la cuna tendrá que estar separada dos metros de la cama de la madre. El pecho se dará a demanda.
Damián Montero
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