Llevamos más de un mes confinados y las clases presenciales siguen suspendidas. A través de las plataformas online, los maestros han dado mucha materia y es la hora de convertirse en el ‘profe’ de tus hijos con estas ideas para traer el cole a casa. Los mejores consejos para que tus hijos no pierdan el ritmo escolar en casa.
Aunque los profesores sigan presentes gracias a Internet, no es lo mismo. Se acercan los exámenes y les pueden aflorar mil dudas. Por ello, los padres tenemos un papel crucial estos días: el de convertirnos en maestros. Debemos tener en cuenta que como dice la experta en educación y psicología infantil Catherine LÉcuyer, «en la etapa infantil no tiene sentido mandar tareas. Las guarderías existen porque los padres trabajan por lo que con nuestros hijos más pequeños no debemos ponernos en modo sargento para que dibujen o hagan actividades. Necesitan relajarse, que juguemos con ellos y sentirse queridos». En cambio, si nuestros hijos son más mayores, si que tendremos que convertirnos en profes. ¡Es mucho más fácil de lo que uno piensa!
Cómo ser el mejor ‘profe’ de tus hijos
Luis Manuel Martínez, Doctor en Pedagogía y Licenciado en Filosofía y Ciencias de las Educación sostiene que «esta es una oportunidad extraordinaria para promover el aprendizaje autónomo de los hijos. Lo importante es que estén bien programados y sepan que carga de trabajo tienen para cada día». Por este motivo, nuestra labor consiste en ayudarles a organizarse de tal manera que consigan autonomía, pero no se sientan perdidos ni desprotegidos. Para ello os proponemos una serie de tácticas.
1. Planificar la hora de levantarse. Se deben despertar a la misma hora todos los días, independientemente de la hora a la que tengan la primera clase. Debemos ser coherentes y no obligarles a estar a las siete de la mañana en pie, pero establecer una hora tope como las nueve de la mañana será muy bueno. De esta manera se irán a dormir antes y sus ritmos circadianos no se alterarán.
2. Establecer una rutina de estudio. Cada día, después de desayunar, cada miembro de la familia debe ponerse a hacer sus tareas. Mientras que los padres tele trabajan los niños deben «ir a clase» y hacer sus deberes. Después de comer y de descansar una media hora se puede establecer una hora para solucionar dudas, ayudarles con algo que no entiendan o enseñarles a hacer esquemas.
3. Controlar lo estudiado. Ser sargentos no funciona, pero sí preguntarles qué han hecho hoy, y repasar lo aprendido con ellos. Si son más pequeños te contarán lo que han dado en clase,. Con los más mayores puede ser un buen método hablar sobre la materia estudiada. Si les han explicado la segunda guerra mundial, por la noche podréis ver una película de esa temática o contar anécdotas para que se interesen por el tema. Estar confinados no es el mejor plan para nadie, por lo que si convertimos el estudio en algo entretenido, todo será más sencillo y ameno.
4. Saber parar. Cada día a partir de una hora tenemos que enseñarles a parar. Si los niños son muy responsables querrán continuar y si el estudio a distancia les está costando, será el mejor momento de su día. Necesitan también una rutina de juegos y de tiempo libre. Ahora que los niños pueden salir a la calle, podemos aprovechar para dar un paseo y disfrutar del aire fresco.
Saber diferenciar y apoyar a cada tipo de niño
Es muy importante conocer la forma de ser de tu hijo para poder ser un profesor diez. Conocer si a tu hijo le cuesta o no concentrarse o es muy autónomo es de vital importancia. Los padres deben saber que comparar a sus hijos no trae nada bueno, ya que a aquellos a los que les esté costando más adaptarse a este tipo de enseñanza se sentirán poco valiosos. Se deben realzar las virtudes de cada hijo y apoyar a los que necesiten ese empujón extra.
1. Niños con altas capacidades y trabajadores. «Es posible que se evidencie cómo las horas que pasan en el colegio son muchas para lo que tienen que hacer habitualmente. Es una oportunidad para replantearse cómo trabajar con estos estudiantes» sostiene Luis Manuel Martínez. Aprovecharán mejor el tiempo y se organizarán de manera más autónoma.
2. Niños que estudiaban por las tardes con su madre. «De pronto han visto como, en lugar de estar mariposeando seis horas en el colegio y luego trabajar con mamá, ahora sólo trabajan con mamá». A estos niños se les debe hacer entender que las madres no están para explicarles todo lo que se ha dado en clase y solucionarles todas sus dudas. Debemos fomentar la importancia de que atiendan en sus clases online y luego explicarles algún contenido si tienen dudas.
3. Niños con dificultad de concentración. Puede que necesiten ponerse a estudiar en la misma sala en la que vosotros trabajáis para controlar que no se entretengan. Crear un clima de estudio y trabajo puede ser muy beneficioso. Si tienes una reunión de trabajo ¡ve a otra habitación para no distraerle!
4. Niños que necesitan apoyo extra. Con este tipo de niños debemos sentarnos, enseñarles a organizar su estudio y los deberes y estar atentos de que se hayan enterado bien de la tarea que deben realizar. Deben ir ganando autonomía por lo que convertirnos en padres sobre protectores no es beneficioso, pero en estos días el estar un poco más pendientes es necesario ya que no tienen al profesor pendiente de ellos. No os sintáis culpables si estáis más atentos pero tampoco les hagáis el trabajo que deben realizar ellos.
Natalia Pérez García
Asesoramiento: Catherine LÉcuyer: experta en educación y psicología infantil. Luis Manuel Martínez, Doctor en Pedagogía y Licenciado en Filosofía y Ciencias de las Educación.
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